¿Los sueños se hacen realidad? (Tom Holland y Tu) TERMINADA

Fiesta de año nuevo

1 de Enero de 2018

El club nocturno al que hemos venido tiene una larga fila afuera. Pienso que nos detendremos justo al frente, pero entonces el chofer pasa y gira en la esquina, en una pequeña calle. Me bajo con los demás, siguiendo a Tom. Una puerta lateral pequeña se abre, y un hombre alto y musculoso se asoma. Mira alrededor, y nos da espacio para entrar. Esto me parece demasiado misterioso. Cierra la puerta y nos dice que lo sigamos. La música está a todo reventar, y está casi todo oscuro excepto por algunas luces que cambian de color y la típica luz negativa. Nos lleva a un segundo piso, desde donde observamos a toda la gente de abajo. Hay muy pocas personas sentadas en algunas de estas mesas. Nos deja sentarnos y nos dice que enseguida vendrán con nuestras bebidas. Al medio de la mesa, hay frascos de pinturas fluorescentes, miro a Tom con cara de pregunta.

-¿Quieres pintarte?-pregunta gritando, para que lo escuche.

-Si-le respondo.

Se ofrece a pintarme, y algo insegura, acepto. Los gemelos nos copian. Cuando Tom acaba, me pasa su teléfono con la cámara frontal puesta y me observo. Me impresiona, porque me gusta. Se ve exótico y muy bonito. En mi pómulo izquierdo ha dibujado pequeñas líneas paralelas que siguen la curvatura y se asemejan a plumas, que se alternan con verde y rosado. En la frente, por sobre la ceja derecha, ha hecho lo mismo pero con azul y naranjo. Ha colocado un punto amarillo justo al medio de mi frente, y pequeñas líneas blancas que lo rodean. Lo miro y sonrío.

-Espera, falta algo-me dice.

Unta su dedo con pintura rosada y lo esparce por mi labio inferior. Luego lo unta con pintura naranja y hace lo mismo en mi labio superior, delicadamente, siguiendo la forma de estos. Su mirada concentrada en mis labios, y sus dedos rozándolo tan suavemente me hace ruborizar. ¿Cómo puede hacer que algo así me parezca tan jodidamente sexy? Tiene un don, en serio.

-Lista, ahí si te vez perfecta-me dice. Me rio y sacudo la cabeza.

-Mi turno-le digo. Sonríe y cierra los ojos.

Intento hacer algo lindo, pero no soy ninguna artista. Comienzo colocándole unos puntos color amarillo bajo su ojo izquierdo. Bajo esto, una fina línea azul, a la que le desparramo unas pequeñas líneas verdes entre medio. En la frente del lado derecho, intento hacer finas líneas alternando los colores, y finalmente, en su labio inferior, trazo una pequeña línea al medio color blanca. Insegura, le muestro el teléfono. Abre los ojos y me mira sonriente.

-Me gusta mucho-me dice.

-De verdad, si no te gusta, puedes decírmelo-le digo. Se ríe.

-Me encanta-me dice. Se acerca a besarme, pero el grito de Sam hace que nos separemos y lo miremos.

-Oh por dios-digo. Y luego Tom y yo estallamos en risas.

Los gemelos están hechos un desastre, se han pintado hasta el pelo en todo el desorden. Intentaron hacer unas líneas dramáticas, pero las fueron pasando a llevar así que termino siento la mitad de la cara de Sam verde. Harry, por otro lado, quiso que le dibujaran unas especies de triangulas en su frente, pero parece que se rasco o algo así porque toda su ceja y parpado derecho esta naranja. Sam además tiene motas de su cabello rosadas. Los gemelos nos miran, angustiados, o eso creo porque la tenue luz no deja que los vemos mucho, y solo se resalta mucho su terrorífico maquillaje (y por terrorífico no me refiero a que de miedo, sino que es desastroso).

-¿Por qué a ustedes si les quedo bien?-pregunta Harry con pánico.

-Demonios Harry, ¿Cómo voy a conquistar a una chica así? Parezco Hulk de neón-dice Sam. Nos reímos aún más fuerte ante su comentario.