Una Odisea Dimensional

27. Hora de la verdad (maratón 2/2)

- Creo que tienes algo mío - le dice y ella lentamente se pone de pie mostrándole el suero - Eso no, ¿él dónde está?

- Esto es lo que quieres, ya no le hagas más daño - le dice enfrentándolo.

- ¿Qué hay entre ustedes dos? ¿Crees que él es especial? Es un fenómeno, nació con un don. Jamás tuvo que luchar por él, jamás se lo gano. No se lo merece.

- Tal vez, pero es suyo.

- ¿Qué me dices tú Thomas? ¿Qué tienes que decir? - grita - ¿No tienes ya suficiente sangre en las manos? No fuiste capaz de dispararle, pero yo sí. Okey, bien. Cómo quieras.

- Jensen - le grita arrojándole un banco que se estrella contra el muro de la celda de los cranks.

- Fallaste idiota - le responde.

- ¿Eso crees? - le dice.

Al ver que el duro vidrio se comienza a rajar, lo ayudo a poner de pie y hago que se apoye en el hombro sano. Los dos cranks se lanzan sobre Jensen.

- ¡Teresa reacciona! ¡Vámonos!- le digo.

Por suerte reacciona enseguida y se coloca del otro lado de Thomas para ayudarlo a cargar, dejando de fondo los gritos agónicos.

- Nos esperan en el techo, guíanos Teresa - le pido.

- Sí, es por aquí - me informa y entre ambas podemos llevarlo mejor.

El edificio está cayéndose a pedazo, hay chispas de electricidad y fuego por todas partes. Alcanzamos las escaleras de emergencia y con algo de dificultad logramos subir. No es tan simple, si ambos estamos heridos. El dolor y la sangre no se ha detenido y sé que a Thomas le sucede lo mismo. Al llegar a la cima, parece que estamos en el mismo infierno con todas esas llamas.

- Debemos avanzar con cuidado - les advierto - Es cuestión de tiempo para que se derrumbe.

Lo sé, comprendo el temor. El sonido del berg aliviana la tensión. Nos apresuramos a llegar cuando la compuerta trasera se abre y Vince junto con Minho se estiran para alcanzarlo. 

Entre ambas lo ayudamos a que del pequeño salto y ellos lo atrapan. Con Teresa tomamos un poco de distancia y llegamos a saltar antes de que todo se haga escombros. Como puedo me aferro con mi brazo sano para no caer. Newt y Maia me ayudan a subir. Veo que Sartén y Gally ayudan a Teresa. Quién apenas alcanza a subir corre a socorrer la herida de él.

- Dijiste que sabrías lo que sucedería y mírate - me dice Newt presionando mi herida.

- Mi disparo no estaba en el plan - le digo y miro a mi hermana que se nota muy preocupada - Ve con él, te necesita. Yo estaré bien.

- Cuídala Newt - le dice antes de ir a sentarse al lado de él y sujetar su mano.

- ¿Existirá algún momento en que no me provoques un infarto? - me pregunta.

- No lo creo - le digo cansada, mi cuerpo deja expandir todo mi cansancio y la pérdida de sangre - Creo que dormiré un poco.

En poco tiempo mis ojos se cierran y caigo dormida.

Pov Maia.

Odio tener que ver a dos personas que quiero tanto, en este estado.

- ¿Tienen algún sedante, para que pueda quitarle la bala?- le pregunta a Brenda.

Ella solo la mira de mala manera y le alcanza una bolso con cosas de primeros auxilios. Thomas aprieta un poco más mi mano.

- ¿Cómo estás?