56. Primeros meses.

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Algún día estará ella en mi lugar y veremos si le sigue pareciendo tan divertido.

Derek solo se limita a abrazarme desde atrás y su calor me conforta y me hace sentir segura.

- Yo también tengo algo que comentarles - nos dice Kira - Deberé irme al desierto con las cambiantes hasta que pueda dominar al zorro y eso podría llevarme mucho tiempo - agrega con tristeza - Es muy probable que no nos volvamos a ver.

- ¿Eso es cierto? - me pregunta Lydia.

- Hasta donde yo conozco de su futuro, es así.

- ¿Y no puedes hacer algo?- agrega Malia.

- No, su kitsune es uno de los más poderosos que he visto y no soy la adecuada para ayudarla - le respondo y me acerco a Kira - Lo siento.

- No es tu culpa - me dice antes de abrazarme - Cuida de ellos.

- Eso te lo puedo asegurar.

Uno a uno, se acercan a ella para despedirse y ella con Scott son los primeros en irse, seguidos por el resto.

- Isaac, Stiles - los llamo - Mañana iré por ustedes a la salida del colegio. Haré que traigan al Jeep aquí y lo repararemos juntos.

- ¿Sabes de mecánica? - me pregunta Isaac.

- Dean es un mecánico nato, ha rearmado por completo al Impala unas dos veces él solo. Fui la única de mis hermanos que estaba interesada en aprender.

- Es estupendo Gemms, pero el ochenta por ciento es de cinta adhesiva - agrega Stiles - Necesita muchas refacciones y horas de trabajo.

- Las refacciones van por cuenta de mi padre y tiempo nos sobra - le digo tranquila - Ahora vayan a descansar.

Cenamos con mis dos Alfas, antes de acurrucarnos en el sofá a ver alguna película. Dyl es el primero en quedarse dormido y antes de ser la siguiente, lo llevamos a su cama.

Las ganas de vomitar, es la razón por la que despertara y me apareciera en el baño. Derek no demora nada, en correr a ver como me encuentro y me ayuda sujetando mi cabello. Odio este síntoma en particular, jalo la cadena y me acerco a lavarme los dientes. La mirada de mi compañero, refleja preocupación y me causa ternura.

- Es algo normal - le digo luego de enjuagarme la boca.

- Tanto mi lobo como yo, nos preocupa verte mal...

- No te niego que no me agrada este síntoma en particular, pero será cuestión de tiempo para que desaparezca - le explico y lo abrazo - Estamos bien.

- Y me aseguraré de que siempre sea así.

- Lo sé - le digo y beso su marca en su hombro - ¿Quieres desayunar? Luego podríamos ir con Deaton y llamar a Melisa para explicarle la situación.

- ¿Le dirás?

- Solo que soy sobrenatural, ya que ella presenciara el parto y tal vez no vaya a ser tan común como otros.

-  Bien, iré a ver a Dylan.

- Prepararé el desayuno.

Cada uno, vamos en dirección contraria, mientras que preparo la mesa saco mi teléfono y llamo al mecánico de Stiles, le encargo que prepare el vehículo y todas las refacciones que sean necesarias, parecía realmente sorprendido, hasta me aconcejo que lo mejor sería desechar ese auto y comprar uno nuevo, pero me mantuve firme.

- Tendrán mucho por hacer - me dice Derek, al entrar con un adormilado cachorro en sus brazos - No hagas mucho esfuerzo.

- Para eso tengo a los chicos - le digo y le doy un beso en la frente a mi hijo - Buen día cachorro.

Una Odisea DimensionalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora