- ¡Que hiciste Elizabeth ! - tomo mis manos y las estrelló contra la puerta sin dejarme escapatoria.
- ¡ No te interesa ! - realmente estoy muy molesta.
- ¡ Crees que no me interesa ! - giro mi cuerpo para quedar cara a cara.
- ¡No, ahora alejate de mí ! - quería salir de ahí pero cada vez que lo intentaba él apretaba más su agarré.
- ¡Sino me interesará no te hubiera buscado toda la maldita noche! - su rostro comenzó a tomar un color rojo.
- ¡Por algo no me encontraste! - los dos estamos muy molestos.
- ¡Tal vez porque estabas follando con alguien más! - eso terminó con la poca paciencia que me quedaba.
Por segunda vez la palma de mi mano fue directo a su mejilla, no sabía de donde había sacado tan fuerza para golpearlo de está manera. Está vez superó mi límite por mucho.
- Me hubiera encantando hacerlo para venir y decírtelo en la cara - tome la cerradura de la puerta y salí de la oficina rumbo a la habitación.
¿Quien se creía para hablarme así?
Mientras subía las escaleras marqué el número telefónico de Charlie.
Hola - su voz se escuchó en el otro lado de la línea.
Hola Charlie, estás ocupado - quiero salir lo más rápido posible de está casa.
No, hoy es mi día libre ¿ porqué ? ¿ estás bien Elizabeth ?.
Sí, sólo que no hay nadie en casa y esté lugar es muy grande para mí sola.
Que te parece si vamos a que conozcas Bali, busco a los chicos y vamos al hotel de Gabi y Cristina luego de eso las llevamos a conocer todo lo que ustedes quieran.
Eso suena increíble.
Y lo es, sólo espera a conocer una de las playas más hermosas de todo Bali.
¿Está vez será legal o tendremos que escapar de nuevo? - su risa se escuchó en la bocina del móvil.
Te prometo que está vez será legal, no te quiero meter en problemas - me agrada.
Está bien, ¿ dónde y a qué hora nos vemos? - mi mente pedía a gritos que fuera muy pronto.
Te parece bien a las 4 de la tarde aún tengo algunas cosas pendientes y no las puedo retrasar.
Está perfecto, ¿dónde nos vemos?.
Yo pasó por ti no te preocupes, Elizabeth me tengo que ir te veo en unas horas adiós - y sin dejarme contestar finalizó la llamada.
No quería que Nathan y Charlie se encontrarán, la única solución que encontré fue salir antes de la hora acordada.
- Quiero hablar contigo - Nathan entró a la habitación cerrando la puerta detrás de él.
- No tengo tiempo - comencé a buscar ropa y un traje de baño.
- ¿Qué haces?
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Casada Con El Sexo
Romance- ¿Qué te parece si apostamos algo? - ¿Qué tienes en mente? - Tú esposa - las alarmas dentro de mí se activaron. - Tranquilo no es sexo, ¿sientes algo por ella? - No. - ¿Y ella siente algo por ti? - No sólo tenemos sexo, ¿a qué viene todo ésto...