Una vez nos amamos

Capitulo 53

Corrí tan rápido como pude hasta alcanzarla, sin darle tiempo de nada ni siquiera de que reaccionara y cayera en la cuenta de que era su hermana la que estaba frente a ella, la tome en mis brazos rodeándola con los míos. Un aroma peculiar entro por mis vías nasales, el típico perfume de Lina, cuando vivíamos juntas lo odiaba por ser demasiado dulce y empalagoso pero ahora parecía que era el mejor olor existente de todo el mundo, además de que era una prueba más de que ella en realidad estaba aquí.

— No puedo creer que seas tú... de verdad que no lo creo...—me ahogue con mis propias palabras tratando de no largarme a llorar. Por fin tenía a alguien de mi familia en un momento como este. Lo necesitaba tanto—estas aquí... estas aquí...

— Si soy yo (TN) _____—Lina acaricio mi espalda. El sonido de su voz nunca me había parecido tan dulce, ella también me había echado de menos—

Por un momento olvide donde estábamos, estaba tan pendiente en nuestro encuentro que cuando abrí mis ojos descubrí que aun estábamos aquí en el hospital ¿Qué hacía Lina aquí? ¿Quién le dijo dónde estaba? ¿Acaso ella ya lo sabe? Todas esas preguntas comenzaron a inundar mi cabeza. Con lentitud me fui separando de ella aun teniendo mis manos en sus hombros.

— ¿Por qué estás aquí?—pregunto algo inquieta. Lina rodo sus ojos observando todo el lugar—

— Realmente fue una odisea llegar hasta aquí...—suspiro sentándose en los asientos del pasillo de la clínica—

— ¿Como...?—jugué con mis dedos mientras me quedaba a mitad de palabra—

— Fue mama quien me mando—elevo sus cejas dándome a entender que ahora se venía algo grande y sobre todo grave—llegue en la madrugada y...—miro hacia arriba tratando de recordar—fui hasta la casa de tu amiga Yoona, la última vez que hablamos dijiste que estabas quedándote en su casa ¿verdad?—asentí sentándome a su lado—la cuestión es que llegar hasta allí fue todo un desafío, no entiendo el idioma es tan...—puso cara de horror—me costó muchísimo llegar hasta allí. Pero todo fue completamente en vano, porque cuando llegue ahí tu amiga me dijo que ya no vivías con ella, fue muy extraño—trague saliva observando cada uno de sus gestos, estaba más que sorprendida por lo poco que había descubierto ¡dios mío! ¿Qué dirá en cuanto se entere de...? Eche una rápida mirada hacia el ascensor, Había dejado a Yesung solo hace mucho tiempo, pero por suerte Jong Jin estaba allí con el—entonces Yoona fue muy amable al pedir un taxi para mí y enviarme al lugar donde supuestamente vivías ahora—eso significaba que Yoona no le había dicho nada de Yesung—cuando llegue allí me di con la sorpresa de que no había nadie en esa casa, estaba muy cansada así que me senté en la entrada a esperar. Hasta que una vecina de allí me dijo que en la mañana no había nadie en aquella casa, lo cual me pareció aún más extraño y por cierto menciono a un tal señor Kim y su esposa, algo así no pude comprenderlo—arrugo sus cejas negando con su cabeza. Hizo una pausa después de haber hablado tanto y bebió de la botella de agua que tenía—

— Entonces... ¿Cómo fue que llegaste hasta aquí?

— Tu vecina menciono algo de un hospital, algo de que tu estarías aquí. Entonces le pedí que escribiera la dirección en un papel para poder dársela a un taxista, ella muy amablemente lo hizo así que aquí estoy...—volvió a suspirar bebiendo otro sorbo de agua y nuevamente miro el hospital—por cierto ¿Qué haces tú aquí? En este hospital—mis labios se quedaron entreabiertos tratando de decir algo coherente que informara a mi hermana por todo lo que había pasado—acaso... ¿trabajas en la cocina de este hospital?—negué a punto de empezar a relatarle mi historia, pero justo en ese momento una enfermera paso por mi lado sonriéndome—

— Buenos días señora Kim.

— Buen día—respondí, los ojos de Lina se clavaron en mí, mirándome de manera extraña sin entender nada—