Capitulo 42

162 13 0
                                        


Había pasado casi toda la noche llorando, no pude dormir así que me levante de madrugada, para no molestar a Yoona con mi constante lloriqueo. Salí hasta el jardín trasero que había en su casa, me senté en una hamaca que había allí. Vi el amanecer sin dejar de llorar, todavía no me creía todo lo que mi mama había dicho, abrió su boca solo para expulsar veneno y arruinar mi felicidad, y el mejor momento de mi vida...

— ¿Vas a coger un resfriado así?—Yoona apareció, pero no voltee a mirarla, solo sentí que puso sobre mis hombros una manta bastante calentita, había hecho frio y yo ni siquiera lo había notado hasta ahora que sentí mis pies helados—ten...

Observe entre sus manos una taza humeante, no pregunte que era solo lo bebí con ganas aun cuando sentía que me quemaba la garganta.

— ¿Llamaras a tu madre otra vez?

— ¿Para qué? Ella dejo muy en clara que no la llamara si no era para decir lo que ella quiere escuchar...

— Solo digo que deberías insistir... no creo que este muy enojada...

— No la conoces, es muy orgullosa y...—el timbre sonó interrumpiendo nuestra charla ¿Quién podría ser a estas horas? Apenas había amanecido—

— Iré a ver quién es...—Yoona se puso de pie pero en tan solo unos segundos volvió—hey... psss...—susurro desde la puerta trasera hacia a mí—es Yesung...

— ¡Oh!—me puse de pie lo más pronto que pude—aun no le abras, dile que estoy en el baño...

— ¿No le dirás lo que paso?

— Todavía no—susurre lo más bajo que pude—estamos a mitad de los preparativos... no quiero arruinarlo todo...—corrí en dirección del baño—voy por mi corrector de ojeras...—grite perdiéndome por el pasillo—

Cuando finalmente me di cuenta que toda yo era un completo desastre opte por un baño rápido de 10 minutos, seque mi cabello con velocidad, un poco de corrector de ojeras y de rubor ¡perfecto! Bueno... creo que logre verme un poco mejor, en fin soy un caso perdido, Yesung ya dijo que se casara conmigo, muy pronto y me vera en perores condiciones...

Camine por el pasillo, solo tuve tiempo de tomar un jeans ajustado una remera de tirantes ajustada a mi cuerpo y una camisa escocesa que llegaba hasta mis caderas...

— Por fin despiertas dormilona...—Yesung se aproxima a mi dejando de lado una taza de café que seguro Yoona le había ofrecido—hey...—dijo asombrado mirándome con detenimiento—¿Qué paso? Tienes tus ojos hinchados... estuviste...

— No dormí bien...—dije casi exaltada ¡estúpido corrector de ojeras! No volvería a comprar el mismo—buen día...—lo abrace ocultando mi rostro en su pecho—te extrañe...

— También yo...—el acaricio mi cabello húmedo—explícame porque no descansaste como se debe...

— Ya sabes...—musite teniendo mi cabeza en blanco, siempre que estaba nerviosa las ideas abandonaban mi cabeza—me quede viendo algunos detalles para la boda... es la emoción...

— Entiendo...—río acariciando mi mejilla—pero ya te dije que todo lo haremos juntos, no vuelvas a desvelarte, mira nada mas tus ojos, parecen...

— ¿Quieres más café?—interrumpió Yoona sabiendo que si seguía así, pronto Yesung descubriría la verdadera razón de porque lucia tan... demacrada—

— Gracias Yoona, pero con una taza fue suficiente...

— Ok... los dejo solos... tengo que prepararme para ir a trabajar...—Yonna se retiró dejándonos solos—

Una vez nos amamosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora