Capítulo 27

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Deje mis lágrimas caer unas tras otras mojando su pecho ¿Por qué me confesaba ahora sus sentimientos? Ahora no servía de nada, él se había comprometido con otra mujer, ya todo había quedado en la nada. Tenía que terminar con esto que solo nos hacía daño a los dos, puse mis manos en su pecho tome valor y lo aleje de mí empujándolo.

— Tengo que irme...—limpie mis lágrimas inhalando aire—

— No... por favor (TN) _____ yo...—puse mi mano en frente para que se detuviera—

— Tu elegiste esto... no sirve de nada que me quede aquí... tengo algo que hacer...—di la vuelta y tome una vez más el picaporte—

— No te vas a ir...—Yesung me tomo de mi cintura obligándome a dar la vuelta—

— ¿Qué haces? Yesung...

— No dejare que te vallas y cometas el mismo error que yo...

— ¿Qué...?—me levanto del suelo y camino conmigo hasta su habitación— ¿Yesung que haces...?

No dejo que terminar de hablar cuando sentí sus labios sobre los míos, abrí mis ojos de golpe sorprendida de lo que pasaba, lo mire con sorpresa pero el volvió a besarme, me levanto del piso e hizo que me acostara en la cama. Un fuerte dolor atravesó mi vientre cuando sentía sus manos acariciar mis piernas. Por ese momento olvide a Jiyeon, que el estuviera comprometido y que yo me iría, quise concentrarme solo en él y yo. Me beso con desesperación y pasión introduciendo su lengua en mi boca acariciándome con ella, se apartó de mí y comenzó a deslizar sus labios por mi cuello.

— Mmmm...—gemí al sentir que succionada en mi cuello—

Llevo sus manos mi cintura y finalmente a mis senos, los apretó con sus manos delicadamente y luego lo hizo más fuerte, arrastro sus manos hasta mi cintura y me elevo de la cama, los dos nos miramos por una fracción de segundos, jamás en mi vida me había sentido tan nerviosa como lo estaba ahora ¿iba a pasar? El decidió romper la distancia, tomo mis manos y las llevo hasta los botones de su camisa, capte lo que el intentaba decirme, mis manos temblaban y mi cuerpo estaba tenso, aun así comencé a desabrochar uno a uno los botones de su camisa, la deslice por su espalda y esta finalmente cayó al piso. Mire su cuerpo sintiendo la necesidad de acariciarlo y pasar mis labios sobre él, sentí su respiración en mi hombro cuando se inclinó hacia mí para bajar el cierre de mi vestido, comenzó a bajarlo poco a poco aun sin quitar la mirada de mi rostro, el cual estaba enrojecido por esto que iba a suceder. Levante mis caderas para que el pudiera bajarlo por mi piernas, una de sus manos subió por mi pierna desnuda, volví a acostarme en la cama y cerré mis ojos sintiendo que él se posaba sobre mí. Con sus manos guió las mías hasta su cuello y volvió a besarme, mordió mis labios en ocasiones y llevo sus manos hasta el interior de mis bragas, abrí mis ojos sorprendida el me miro con ternura y detuvo su mano para asegurarse de que no estuviera haciendo nada malo.

— Es...—no sabía cómo decirlo sin que el saliera espantado—es mi primera vez...—dije avergonzada—

— ¿Quieres que siga?—asentí perdida en sus hermosos ojos—eres hermosa... quiero ser yo quien robe tu virginidad...—cerré mis ojos sintiendo dolor en mi entrepierna, lleve mis manos hasta la suya empujándola a que continuara con que hace unos segundos iba a hacer—

Sentí su mano en contacto con mi intimidad, comenzó a moverla frotándola allí.

— Ahhh... mmm...—ladee mi cabeza hacia un costado, un dolor único y placentero atravesó por todo mi cuerpo—

Beso mis labios suavemente observando mi expresión de placer, continuo moviendo su mano y luego la deslizo más abajo e introdujo un dedo en mi interior.

Una vez nos amamosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora