—¿Estas segura de lo que estás diciendo? Es que... ósea creo que en parte yo lo sabía, pero no pensé que... ¡hay! Mi dedo...—Victoria soltó el cuchillo que tenía en sus manos—
— ¿Estas bien? Pon tu dedo debajo del agua—abrí la canilla de agua para que la sangre de detuviera—
— Si solo fue un corte... no cambies de tema... ¿en verdad te iras para no volver?—puse su cara triste—
— Es que...—no sabía cómo decírselo para que ella lo comprendiera—es lo que quiero... realmente lo siento así... ¿cuento con tu apoyo...?—levante mis cejas esperando su respuesta—
— Te voy a extrañar demasiado...—asintió sonriendo—más vale que te cases con Yesung...—las dos nos echamos a reír—
— ¿De qué hablas? Mi sueño siempre fue viajar a Corea incluso antes de conocerlo...
— Soy tu amiga, a mí no me puedes mentir...
— Bueno...
— ¡Oigan!—Uno de los mozos nos interrumpió—estoy esperando de hace rato el plato de la mesa 6 ¿ya está?
— Lo siento...—termine de decorar el plato—aquí esta...—el me fulmino con la mirada recibiendo el plato—
— Hay más de 5 mesas aun... y son las suyas... si se apuran se los agradeceré—dijo algo fastidiado—
— Enseguida...—sonreí para que no siguiera enojado, desapareció por la puerta de la cocina—
— ¡Idiota! ¿Quién se cree que es?—
— Déjalo...—dije sacudiendo mi cabeza—Después hablamos ¿ok?
— Si, mejor.
— Vamos dime la verdad ¿estas enamorada de Yesung?—Victoria iba empujándome por la calle cuando salimos del trabajo—
— Tal vez debería conseguir un trabajo allá ¿no lo crees?
— Se supone que soy tu amiga... ¿y a mí no me lo vas a decir?
— ¿Qué quieres saber?
— ¿Que sientes por Yesung?
— Esta bien te lo diré... solo porque eres mi amiga y porque sé que no dejaras de fastidiarme...
— ¡Oye! se seguro me extrañaras cuando estés en Corea...—sonreí y la tome de su brazo—
— No tengas duda de eso...
— Ok... dime.
— Desde hace mucho me sucede... no lo quería admitir porque hasta ese momento era solo un viaje lo que haría... pero ahora sé que quiero quedarme... creo que... Estoy enamorada de Yesung...—admití cerrando mis ojos—
— ¡Lo sabía! ¡Lo sabía!—Victoria comenzó a dar saltitos a mi alrededor—
— ¿Crees que el sienta algo por mí?
— Pues ningún chico mandaría tantos mensajes a una chica que no le importa.... Así que yo creo que si...
— Él es como perfecto... siempre llamo mi atención desde el primer momento que comenzamos a hablar.
— No quiero arruinar este precioso momento romántico... pero... ¿y Hangeng? Después de lo que me contaste, él estaba a punto de decirte algo en ese bar.
— Se lo diré en algún momento, él es solo mi amigo... ¿Qué podría decirme?
— Pero antes tú pensabas diferente.

ESTÁS LEYENDO
Una vez nos amamos
RomanceUna vez me amaste Una vez fuiste mio Una vez existió un "nosotros" Hoy... todo aquello quedo en el pasado... Tu mente me recuerda perfectamente... Pero tu corazón no.