-No entiendo como haces- dijo Nick tirándose en el sillón derrotado.
Después de aquella conversación volvió a ser el mismo, nos pusimos a jugar y yo había ganado todas las batallas, era mi juego favorito, pero eso él no lo sabía.
-Para, me dijiste que no sabias jugar. - solamente me encogí de hombres- Sos una maldita..-
-Ya vi..¡ay!- alguien hablo.
Se escucho un golpe seco que provenía del lado de la entrada, era Thomas. Se cayo por chocar con mi mochila, olvide por completo que la habia dejado tirada justo en la entrada.
Me levante para ayudarlo a pararse.
-Perdona- le dije entre risas. Él me fulmino con la mirada.
Se limpio el poco polvo que tenia de sus pantalones y me saludo con un beso.
-Thomas, tenes que ver como juega, es buenísima.- grito Nick desde el sillón apuntado la pantalla donde estaba el inicio del juego.
-No lo creo-
Ambos nos sentamos en el sillón, Nick nos pasó los joysticks y nos pusimos a jugar.
Después de otras 3 canciones, en las que en todas salí victoriosa, Thomas se rindió.
-Mierda, te odio nena.
-Mentira, me adoras- le di un golpe en el hombro.
-Un poco, pero no se lo cuentes a Sam.
-¿Qué no me diga qué?- dijo Sam llamando la atención de todos. No la habíamos escuchado entrar.
Llevaba un nuevo color de pelo, ahora era una mitad violeta y la otra azul.
-¿Y?
-Nada hermanita- Thomas se levantó y la abrazo pasando un brazo sobre sus hombros, ella se cruzó de brazos. -Te queda genial- dijo mientras la despeinaba.
-Ya lo sabía.- se sentó a mí lado y me saludo. -Uh, otra vez ese juego.
-No me digas que no te gusta Sam- ella me puso una mirada obvia. -¡Es el mejor juego!
Solamente rodo los ojos como respuesta.
-Y es buenísima Sam, le rompió el culo a Thomas. - exclamo Nick.- Aunque, bueno, está acostumbrado.
-Eh- se quejó este.
-¿Mas buena que Tyler?- le pregunto Sam mientras me miraba insinuando.
-Eso no lo pensé, cuando venga, ¡competencia! - grito haciendo énfasis en lo último.
Seguimos hablando diferentes tonterías, mientras le hacia una trenza cocida a Sam.
-¿Y este mochila?
Me sobresalte, Tyler estaba hablando justo atrás mío al lado de mi oreja.
-Mia- dije en un susurro.
Quise agarrar la mochila, pero Tyler la levanto dejándola fuera de mi alcanza.
-Dale, Tyler- estaba saltando, pero no llegaba, odiaba ser tan enana.
Después de un rato molestándome, me la dio.
-Eso está muy lleno, ¿A dónde vas? -me pregunto Sam.
-Eh..no, la verdad que no sé. -baje la mirada.
No había pensado en eso durante toda la tarde, estuve distraída y se me olvido. Pero ahora ya estaba llegando la noche, tenía que irme, buscar algún sitio para dormir.
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Pitada.
Teen FictionYo no buscaba recordarlo, quería algo rápido. Eso no estaba en su mente, me hacia desearlo. Y asi me termine enamorando.