Cap. 20

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Una mujer quien desde muy pequeña siempre fue guiada por la curiosidad.

Aprendió todo sobre la genética, sobre la marca de nacimiento, sobre la clonación y sobre muchas cosas más. No se sabía si lo que Cynthia tenía era una especie de enfermedad mental o si solo se dejaba dominar por esa curiosidad que es tan natural en todos los seres humanos.

¿Arderá tanto meter las manos al fuego? ¿Qué pasaría si arrojo desde el tercer piso a una persona? ¿Qué se sentirá el estar herido de muerte?, esas y muchas otras preguntas la invadían con el día a día. Su curiosidad era anormal o tal vez... tal vez no lo era.

— ¿No somos hermanas? —Se podía escuchar la dulce voz de una niña.

Eran las cinco de la tarde de un día sábado cuando ella comenzó con su experimento.

Dos niñas que eran prácticamente iguales... bueno, no tanto, ya que la diferencia de ambas radicaba en su cabello, sus tonos eran diferentes, haciendo que uno se viera muy oscuro y el otro un poco más claro.

Se encontraban en la habitación de aquella mujer de bata blanca. Las niñas no comprendían lo que ella intentaba explicarles, los términos relacionados al tema de la clonación eran algo que no podían comprender, aun cuando la rubia intentaba explicarles con "peras y manzanas".

— ¿Estás diciendo que ella solo es una sombra mía? —Una de las niñas comenzaba a comprender haciendo que la otra se sobresaltara.

— Eres muy inteligente Platina para tener solo seis años —la rubia se le acercó a aquella jovencita de gracioso vestido color carmesí para acariciarle el cabello.

— ¿Soy una sombra? ¡Eso es genial! —La otra niña por su parte parecía no captar la gravedad del asunto.

— Dawn, llamarte sombra es una de las tantas formas en que se te puede nombrar, pero a mí me gustaría llamarte más como una "falsa Platina", alguien quien no debería de existir, una aberración de la naturaleza, una simple muñeca de carne.

Aun cuando lo decía con gran simpleza y una sonrisa, ella no sabía que estaba golpeando a aquella niña con lo que era la cruel realidad, o tal vez lo sabía perfectamente. Un ser que no debería de existir, esas palabras las comprendió, era el equivalente a decirle a un niño "tú nunca debiste haber nacido, eres un error". Aun así, la niña no se derrumbó y solo sonrió mientras volvía a decir que la idea de ser un clon le resultaba genial, aun cuando su corazón estaba bastante lastimado con aquel golpe.

"Tú fuiste creada para complementar la marca de nacimiento", "ustedes no están obligadas a tratarse realmente como hermanas" "Platina no tiene porqué preocuparse por una copia", esas y muchas otras palabras eran mencionadas por la mujer de cabello rubio.

Pero aun así, las niñas se seguían tratando como si fuesen hermanas que nacieron el mismo día. No les importaba si una era una copia o si su nacimiento había sido algo artificial, lo único que deseaban era estar juntas.

Su curiosidad la llevó a preguntarse: ¿Qué sucedería si se cambian las realidades de esos bebés? ¿Qué pasaría si el clon cree ser el original y el original un clon? ¿Qué sucedería luego de pasados unos años y se les revelara esta verdad?, ese tipo de preguntas las pensaba con el pasar de los días. Ella amaba realmente a las gemelas, si prácticamente eran lo único que le quedaba del recuerdo de aquella mujer quien la cuidó desde muy joven. Pero la curiosidad siempre fue más fuerte que cualquier otra emoción, aun cuando después sintiera remordimiento.

Cynthia no contaba con el hecho de que al estar la marca de nacimiento dividida en dos personas, el intentar hacer un vinculo ocasionaría un ligero dolor en las hermanas, pero aun así ella las siguió obligando a que intentaran usar ese símbolo que yacía en sus manos. La rubia las amaba, pero su curiosidad la dominaba completamente. Las hermanas se cansaron y solo pensaban en huir, ya que se habían convencido que ella, que esa madre adoptiva no era más que un monstruo....

VINCULOS IRREALESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora