Cap. 43

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Corría lo más rápido que sus piernas le permitían, no podía dejar que aquella persona se escapara. Mientras corría no dejaba de pensar en cómo estaría su compañera. Todo había sido tan perfecto hasta que ese Tenshi decidió arruinar todo. Ash Ketchum estaba molesto porque aquella chica que corría más rápido que él había puesto en peligro no solo la vida de Misty sino también de todos los que habían llegado a ese parque para disfrutar de un momento de relajación.

Pikachu se agarraba lo más fuerte que podía del cabello de su compañero y por alguna razón no dejaba de observar a su alrededor, era como si sus sentidos le estuvieran diciendo que la chica de cabello blanco no andaba sola.

Roxie era una guitarrista con un don innato para tocar aquel instrumento y al parecer tenía una extraña habilidad digna de ser catalogada como un Tenshi, además y sin que Ash lo supiera ya se había vinculado con una cantidad considerable de Pokémon de extraña apariencia.

— ¡Eres muy lento Ashi! —Dijo la guitarrista mientras corrían en una zona un tanto frondosa de aquel inmenso parque.

— ¡No estuvo bien lo que hiciste! ¿Acaso no sientes el más mínimo arrepentimiento? —El azabache por su parte se mostraba molesto.

— ¿Arrepentimiento? ¿Qué es eso? —Hecha aquella pregunta la chica quien era un tanto pecosa se echó a reír de forma burlona.

Aquel acto solo enfureció aún más a Ash. El estudiante de la academia Unión era alguien quien por alguna razón siempre estaba dispuesto a ayudar a las personas que estuvieran en peligro y odiaba que alguien se aprovechara de los demás. Era como si intentara recompensar algún error que cometió en su pasado o por lo menos a esa conclusión llegó una vez aquel joven fotógrafo de cabello rubio sucio... y dicho sea de paso ya tenía tiempo de no ser visto por el azabache.

— Aquí estará bien —la joven se detuvo mientras había hecho una distancia de diez pasos.

— ¿Por qué tuviste que involucrar a todas esas personas? —Pikachu se bajó de la cabeza de Ash mientras sus mejillas comenzaban a generar electricidad.

— Era la única manera para llamar tu atención y traerte a este lugar... aquí nadie nos molestará —la de ojos claros observó por unos segundos aquel rostro lleno de rabia— vamos no te esponjes, estarán bien... pero no podría decir lo mismo de ti.

Pikachu se giró rápidamente para luego embestir a su compañero y hacer que cayera al suelo. Ash se sorprendió un poco pero se dio cuenta al instante que si el roedor no lo derribaba, una extraña bola de liquido purpura iba a impactar en él. La viscosidad de aquel ataque lo hacía ver algo asqueroso además de provocar que la hierba que había recibido aquel ataque comenzara a marchitarse.

Ash se levantó rápidamente mientras veía que de los arboles comenzaban a aparecer criaturas extrañas. Algunas eran tan amorfas que parecían ser bolsas gigantes de basura, pelotas que generaban gas nocivo entre otros. Y frente a aquella jovencita de botas oscuras y aspecto rockero, se colocó un insecto de color carmesí que tenía el aspecto a un ciempiés.

— No entiendo porque la inútil de Flannery no acabó contigo —la chica se sentó en el lomo de aquel gran insecto mientras afinaba las cuerdas de su guitarra— debes de ser más peligroso de lo que nos has hecho creer.

— ¿Sabrá que ella ahora está viviendo conmigo? —La duda lo invadió por un segundo ya que no podía bajar la guardia al ver que más Pokémon se acercaban.

— Sé que está mal lo que diré pero: mis pequeñines... acaben con él —con aquella orden, la joven se limitó a tocar con simpleza una de las cuerdas.

VINCULOS IRREALESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora