VINCULOS IRREALES

Cap. 95

Se encontraban cenando en el gran comedor de aquella mansión.

Cynthia era una mujer a quien se le consideraba la mejor en cuanto a la rama de la genética y de todo lo relacionado a la marca de nacimiento, una de sus más grandes cualidades o defectos era su insaciable curiosidad que la obligaba a hacer cualquier tontería aún si esta iba más allá de lo que era correcto o no. Esa misma mujer estaba tranquilamente dándole de comer en la boca a un chico de cabello azabache de forma bastante melosa, cualquiera que la conociera "superficialmente" diría que ese era su comportamiento habitual... aunque más equivocado no podría estar.

— Di: ahhh.

Las hermanas Berlitz la observaban con enojo al igual que Leaf y Meloetta, generando indiferencia en la rubia y temor en Ash ya que no sabía de lo que podían ser capaces de hacer las chicas en un arranque de celos. Trip por su parte estaba muy tranquilo intentando descifrar el ingrediente secreto de la salsa que estaba cubriendo su porción de arroz.

La mansión Berlitz no contaba con una gran servidumbre solo tenían de su lado a los guardaespaldas de la familia quienes estarían dispuestos a hacer lo que fuese por Cynthia y las hermanas ya fuese salvar a un Meowth atrapado en la copa de un árbol o hasta moler a golpes a cierto Ash por estar dejando que una mujer hermosa y mayor que él le estuviese dando de comer como si fuese su amorosa esposa.

— Entonces ¿No has descubierto nada? —Preguntó mientras tragaba lo que la mujer le estaba dando.

— Lastimosamente la pequeña princesa no sabe a dónde pudo haber ido su compañera, creo que solo se limitaba a ayudarla en su objetivo.

— ¿Puedo intentar hablar con ella?

— Está amarrada en la sala de tor... digo, está amarrada en el sótano —se corrigió rápidamente la rubia mientras le limpiaba la boca a su hermano menor.

— Bien, si me disculpan me retiro —Ash se puso de pie mientras se disponía a dejar la mesa.

— Pero hermanito no has comido casi nada y aún falta el postre.

— Guárdenme mi porción que ya regresaré.

— No te preocupes hermano del alma yo guardaré bastante bien tu porción en mi estomago —dijo tranquilamente el camarógrafo generando molestia en Ash quien aún así dejó el comedor.

— ¡Ash iré contigo! —Exclamó cierta criatura legendaria mientras se dirigía hacía su amado compañero.

— Yo te sugeriría que te quedaras con nosotras —comentó Cynthia con tranquilidad.

— ¿Eso por qué? —la de cabellos verdes se mostró molesta con aquellas palabras.

— Diancie aún debe tenerte miedo, si te ve, Ash no podrá hablar con ella a gusto —agregó Platina haciendo que tanto Trip como Leaf la vieran con algo de confusión.

— Mejor quédate a comer con nosotras —Dawn le regaló una sonrisa a la pequeña haciendo que desistiera en su idea de seguir a Ash.

Bajó tranquilamente hacía el sótano encontrándose con que la pequeña criatura legendaria estaba atada con una soga reforzada mientras colgaba del techo. Al parecer luego de haberle dado de comer y conseguir que su miedo disminuyera la volvieron a convertir en prisionera para que no escapara. Diancie dormía tranquilamente ya que en esta ocasión no la habían dejado boca abajo, haciendo que el azabache sonriera levemente al verla dormir de una forma bastante moe.

— Se... Serena... Serena —murmuraba entre sueños.

— Pudiste acceder a la mega evolución gracias al vínculo tan fuerte que forjaste con ella —pensó al recordar la apariencia de Diancie al alcanzar aquel nivel evolutivo— eso debe significar que tienen años de conocerse y que han pasado por diversos cosas... pero si eso es cierto, ¿Por qué decidiste ayudarla hasta el punto en que debes dejarla ir?