Cap. 22

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Dormía con tranquilidad, dormía tan profundamente.

El chico normal que había hecho un solo vínculo en toda su vida, se encontraba en el piso durmiendo como lo hacía por más de una semana. Solo tenía un par de horas de haber llegado a su apartamento junto a su hermana, ya que ambos habían ido a rescatar a aquella joven de cabello azul que respondía al nombre de Dawn.

Lastimosamente, Ash tuvo un despertar demasiado abrupto.

— ¡Levántate plebeyo que tengo hambre! —La hermana de Dawn le dio un fuerte pisotón a Ash en lo que era el pecho.

El azabache sintió como el aire escapaba de sus pulmones, para que abriera de golpe los ojos y lo primero que viera fuese a Platina quien tenía una mirada llena de prepotencia.

— ¿Qué forma es esa de despertarme? —Preguntó con dificultad mientras intentaba ponerse de pie.

— Hermana, no le vuelvas a hacer eso a Ash —Dawn por su lado se encontraba sentada en la cama mientras veía con enojo a su gemela.

— No puede quedarse a dormir todo el día, si no fue a estudiar por lo menos debería levantarse a hacernos el desayuno.

— ¿Qué a caso tú no puedes prepararlo? —El azabache con un movimiento brusco hizo a un lado el pie de su agresor mientras se levantaba lentamente.

— ¡¿Yo?! ¡Jamás he preparado un solo platillo en mi vida, y hoy no es buen momento para comenzar a hacerlo! —Platina se cruzó de brazos mientras veía a Ash de una forma que lo hacía sentí como si ella lo viera como su esclavo.

— Sí que te tienen consentida —murmuró por lo bajo.

— En muchas ocasiones le he dicho a mi hermana que le enseñaré a hacer aunque sea un platillo básico, pero ella se niega —confesó la ojiazul mientras soltaba un suspiro.

Ash se estaba tocando el área golpeada de su pecho mientras dirigía su mirada hacia la cama. Pudo notar como Lyra seguía durmiendo plácidamente mientras abrazaba a Pikachu como si fuese un muñeco de felpa (para aclarar, él también estaba profundamente dormido). Fue raro para el azabache ver que el escándalo que hacía la Berlitz de cabello oscuro no era suficiente para despertar a la hermosa y joven Tenshi.

No tuvo de otra y fue a la pequeña cocina que tenía cerca de la entrada para ver que podía preparar. Dawn se levantó mientras le decía que le iba a ayudar a cocinar.

Buscó y buscó en la mini alacena y se dio cuenta que no había nada para comer. Ash se puso nervioso ya que Platina había dicho que quería comer algo que él no sabía preparar y de lo que jamás había escuchado. Además, lo que ella quería comer parecía ser más un platillo que se servía en el almuerzo que algo nutritivo para comenzar el día.

— ¿Quieres cereal con leche? —Preguntó el de ojos cafés mientras le mostraba una caja de cereal a la de ojos azules.

— ¿Qué edad crees que tengo? ¿Cinco años? —Platina seguía con aquella expresión altanera mientras veía con reproche a la pobre caja.

— Hermana, no seas tan quisquillosa, además el cereal es bueno y gente de cualquier edad lo come.

— ¡Pero yo quiero algo más de mi estilo!

— Entonces te asaré unos ajos con cebolla picada —dijo el joven estudiante mientras seguía revisando en la alacena.

— ¡¿Qué dijiste maldito plebeyo?! —El sentido de Spinarak de Ash lo alertó de que la gemela de Dawn había entrado en modo ira aumentada veinte veces.

VINCULOS IRREALESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora