Cap. 70

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El cielo estaba siendo iluminado por las estrellas o por lo menos eso se creía ya que en Link City las luces de los edificios y las calles hacían que uno no pudiera apreciar aquel paisaje nocturno. Pocas personas transitaban ya las calles y por eso mismo nadie sabía que en ese momento dos criaturas que eran catalogadas como legendarias estaban luchando.

Frente a Ash se encontraba Dawn, una chica a quien salvó de tres sujetos. La de cabello azul provenía de una familia adinerada y era demasiado confiada con las personas y por ese mismo motivo se había metido en aquel problema. Tenía una hermana gemela la cual era todo lo contrario a ella y así sin darse cuenta el azabache terminó viviendo con ella. Cualquier chico hubiera intentado propasarse con la joven por las noches mientras dormía en posiciones muy provocativas, pero Ash no era de ese tipo.

Aquel estudiante aprendió a convivir con ella aprendió a tomarle cariño y protegerla como se protege a una hermosa flor. Esos pequeños gestos, esas sonrisas que ella le regalaba, todos esos factores generaron un fuerte vinculo entre ambos. Dawn lo llamaba SU héroe, lo había idealizado como una persona quien siempre ganaría sin importar a quién o qué se enfrentara. Pero en ese momento estaba dudando, quería detenerlo, quería evitar que cometiera una imprudencia.

Latias y Meloetta se movían a increíble velocidad mientras peleaban en el aire, aunque la fuerza física de la pequeña muñequita de cabello verde no se comparaba a la de aquella hermosa criatura de color carmesí. Pikachu no podía hacer mucho salvo lanzar sus ataques eléctricos hacía aquel lindo dragón para servirle de apoyo a su compañera. Y mientras los Pokémon luchaban, aquellos chicos se observaban con seriedad.

— Me estás haciendo perder tiempo. En estos momentos el tiempo es crucial.

— Nada asegura que Lyra esté en el lugar a donde te diriges. Saliste del apartamento a buscar una aguja en un pajar.

— ¿Por qué lo haces? ¿Por qué ahora?

— Lo hago por tu bien.

— Por mi bien... —Ash bajó la mirada— no seas tonta... la vida de Lyra corre peligro y....

— Quiero hacerte una pregunta.

Ash levantó la cabeza y observó a la de cabello azul detenidamente.

— ¿Por qué eres así?

— ¿A qué te refieres?

— ¿Por qué te gusta cargar con toda la responsabilidad?

— No sé de qué hablas.

— No nos tuviste la confianza para hablarnos desde un principio sobre esos cuatro. Inclusive te fuiste solo a luchar contra Sabrina cuando te dejó hospitalizado. No te gusta pedir ayuda y si lo hiciste esta vez es para cubrir mayor terreno... pero ahora que sabes dónde está no vas a pedir ayuda... como siempre lo haces.

— Ya te dije que solo tengo una corazonada, no es que Lyra esté ahí.

— Te fuiste a luchar contra Volkner sin pedir ayuda... fuiste a enfrentarte sin dudarlo a Roxie sin siquiera pedir ayuda... todo lo haces sin pedir ayuda... tú no eres invencible... tú eres una persona normal.

Ash se sorprendió un poco con aquellas palabras y más al ver que la chica había bajado la mirada mientras su cabello generaba una sombra que cubría sus ojos. Dawn estaba presionando fuertemente sus puños mientras la marca de su mano brillaba intensamente.

— Duele... duele más que cuando estoy con mi hermana —murmuró.

— Lo invocaste tú sola ¿Verdad?

— Mamá creía que se necesitaba una marca completa... pero no es así, he comprobado que con solo la mitad se puede lograr... el único inconveniente es que... el dolor es mayor al que se siente cuando la marca está completa.

VINCULOS IRREALESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora