52- Mío

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Ni siquiera pudo reaccionar cuando el primer golpe llegó, él sólo se había quedado en un rincón, no por su propia decisión sino porque su primo lo había empujado allí. Nunca había esperado que reaccionaría de tal forma, habían sido pocas las veces que vio a Kai en una pelea, mayormente porque no le gustaba la violencia y prefería alejarse, y ahora veía la escena casi con miedo, pues los puños del castaño aterrizaban una y otra vez sobre la mejilla de Val, y este no le respondía ni a una, sólo intentaba zafarse del joven.

- ¡Detente!

Para su sorpresa, Kai se detuvo y le dirigió una mirada furiosa al rubio- Dime que esto es una puta broma y me detendré.

Dominik se apresuró para acercarse al mayor y asegurarse de esté bien, por suerte sólo tenía el labio partido, pero su humor no parecía ser el mejor. A pesar de que no le devolvió ningún golpe, se le veía más furioso de lo que alguna vez lo había estado. Cuando Val se levantó, el menor caminó hacia su primo, con una expresión en su rostro como si estuviera pidiéndole que lo entendiera- Puedo explicártelo más tarde, Kai, no había necesidad de llegar a los golpes.

Lo miró por unos segundos en silencio y luego rió sin ganas- Me sorprendes, Dominik, nunca había imaginado que serías capaz de ser ese tipo de persona. Ustedes dos- hizo una mueca de asco- están enfermos.

Segundos más tarde se escuchó el fuerte ruido de la puerta ser azotada. Dominik quiso suspirar aliviadamente, pero no lo estaba en realidad; no era necesario ser un genio para darse cuenta de que a nadie le caería bien la noticia de que ellos estuvieran juntos, y no era algo que realmente le importara, pero ver la expresión de decepción en el rostro de su primo le había dolido. Le hubiera gustado que al menos una persona lo entendiera y no lo juzgara, como estaba acostumbrado.

- Otra persona más que lo sabe...- pasó una mano por su cabello mientras se apoyaba en la pared, miró de reojo a Val para darse cuenta de que este tenía el ceño fruncido.

Val tomó una servilleta para limpiar la sangre que salía de su labio- ¿Qué quieres decir con eso?

No sabía si sería bueno que supiera cuántas personas ya estaban enteradas, pero era tarde para contradecir sus palabras ya que el rubio mayor lo había escuchado. A veces, Dominik odiaba no tener un filtro en su boca.

- Bueno, no sería sorpresa para ciertas personas si decidiéramos contarle- dijo- Mi abuela fue la primer persona en saberlo, pero eso fue porque no tuve otra alternativa y necesitaba decirle a alguien. Luego Will y Billy, mis amigos, también lo supieron por mi...- se quedó en silencio por unos segundos para luego reír- Creo que la mayoría se enteraron porque no puedo permanecer la boca cerrada.

El ceño de Val se frunció aún más de lo que estaba- ¿Eso es todo?

- También lo sabe Ezra, Nate lo supo cuando revisó mi celular y la reacción no fue muy buena, algunos ancianos, Wyatt, y ahora Kai.

- Podríamos decir que, al rededor de diez personas lo saben, ¿verdad?- el menor se encogió de hombros, como si no fuera la gran cosa- ¿Quieres publicarlo también en las redes sociales? Tal vez podríamos repartir folletos, o pedir que lo transmitan en la televisión.

- Me parece una buena idea- comenzó a reír cuando el rostro serio del mayor ni se inmutó. Rodeó su cuerpo para sacar del refrigerador la comida instantánea que tenía pensado cenar esa noche y comenzó a preparar todo- Quédate tranquilo, nadie dirá nada.

- ¿Estás seguro de eso?- escuchó cómo se sentaba en una de las sillas de la cocina- Porque me dio la impresión de que tu primo no estaba contento, dime si me equivoco.

- Kai es inofensivo, aunque no lo creas- deseó que sus palabras sonaran seguras, pero no lo estaba después de ver cómo se puso su primo. Si Kai decidía contarle a Holly todo se iba a arruinar, él iba a quedar completamente arruinado si su amiga lo sabía- De todas formas, hablaré con él más tarde para explicarle todo, pero estoy seguro de que no divulgará por ahí lo que sabe.

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