Un Camino Juntas (Terminada)

Parte 49: Anís

Estando frente al edificio de nuestro hogar con Antonia hice sonar la bocina de mi auto para que el celador nos diera ingreso al parqueadero y estacionar.

Anto: ¡Mami vamos!, dijo jalando mi brazo.

Calle: ¡Voy mi amor!

Al llamar el ascensor mis nervios aumentaron mis manos no dejaban de temblar, definitivamente tenía miedo de ver a Poché ¡Que loco! Pensé.

Saque las llaves y la ingrese en aquella cerradura respiré profundo y gire la llave dándome ingreso a nuestro hogar, en cuanto di un paso para avanzar a la casa un olor invadió totalmente mis fosas nasales.

¡Fuck! ¡Anís!

Anto: ¿Mami a que huele?

En seguida cambie el tema para distraer a Antonia y le dije:
Calle: ¡Mi amor se me olvido algo en el carro ven acompáñame!

Anto: ¿Y mi mamá?

Calle: ¡En un rato la vemos! ¿Sí?

Anto: ¡Está bien!

Al llegar al auto le dije a Anto que me esperare mientras hacia una llamada, tome mi celular y marque su número replico tres veces y escuche su voz ronca sabía que estaba durmiendo.

Calle: ¡Marica perdón por despertarte pero te necesito!, no sabía a quien más recurrir.

Juana: ¿Dime que paso?, se escuchó como intentaba despistar el sueño.

Calle: Necesito que vengas a mi casa y te lleves a Antonia a almorzar yo te doy el dinero...

Juana: ¡No seas boba!, no necesito dinero para pasar el día con mi sobrina.

Calle: No te demores, ¡es urgente!

Juana: ¡Ya salgo!, en 15 minutos estoy contigo...

Calle: ¡Gracias!

Colgué para luego volver con Antonia y en medio de una sonrisa le dije:
Calle: ¡Mi amor adivina quién quiere llevarte a almorzar!

Anto: ¿Quién mami?

Calle: ¡Tu tía Juana!

Antonia hizo cara de felicidad pero en seguida cambio su expresión como si algo la estuviera molestando.

Calle: ¿Pasa algo?

Anto: ¡Yo quiero estar con mi mami Poché!

Calle: Mi amor te prometo que después de almuerzo la verás, necesito que comas para que seas grande y fuerte, dije tocando su nariz.

Anto: ¿Y porque no podemos ir todas?

Calle: Porque necesito hablar con tu mami, para organizar la sorpresa...

Anto: ¡Está bien mami!, dijo en tono triste.

Mi pantalla se alumbro y vi un mensaje de Juana...
Juana: ¡Ya estoy afuera!

Calle: ¡Vamos mi amor ya llego tu tía!

Al salir del edificio Antonia corrió donde Juana dándole un abrazo y subiéndose en sus brazos.

Juana: ¿Cómo estás princesa?

Anto: ¡Bien!

Calle: ¡Hola bebé!, gracias...

Juana: ¡No tienes nada que agradecer!, ¿todo está bien?

Calle: ¡No lo sé!, te explico más tarde, ¿puedo quedarme unos días contigo?

Juana: ¡Claro que puedes!, me avisas cuando puedo traer a Anto a casa...

Asentí con mi cabeza despidiéndome y subiendo nuevamente al ascensor, "Tranquila Dani tu puedes, tienes que ser fuerte para cualquier situación, ahora más que nunca tu familia te necesita" me animaba yo misma mientras el ascensor subía los pisos.

Nuevamente estaba parada frente a la puerta de mi apartamento recosté mi frente contra aquella puerta fría y suspire cerrando mis ojos me quede unos segundos en esa posición y luego decidí entrar nuevamente, abrí la puerta y ese reconocible olor que estaba por toda la  casa lleno mis pulmones, al dar unos cuantos pasos por el pasillo empecé a ver las botellas de aguardiente tiradas por la casa, en total conté tres botellas antes de llegar a la habitación.

Abrí la puerta lentamente y habían unas dos botellas más tiradas en la alfombra de nuestra habitación, dirigí mi mirada a la cama y hay estaba ella en medio de un gran charco, ¡mierda!

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MoPaMa10