Nuevos inicios

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Capítulo 46 nuevos inicios 

Ya habían pasado dos semanas desde que Elsa ingresara al hospital y hasta ese momento se veía una mejora en su estado de salud, pero la salud mental de Anna se veía deteriorada, Honey podía sentir la hostilidad que emanaba Anna cuando ella ingresaba a la habitación de Elsa, con ella era bastante arisca y cortante, además que prácticamente Anna vivía en la misma habitación donde estaba recuperándose su hermana.

Definitivamente Jack tenía razón, quizá Bella Beasley podría ayudarla antes que las cosas se pusieran más complicadas de lo que ya eran, desde que había platicado con Jack sobre la posibilidad de que Yukiko hubiera sido el verdadero objetivo y no Sergei, Aiko no podía dejar de pensar que quizá hasta la orden de matar a su abuelo hubiera sido un farol inventado por Sergei, quizá había sido realmente contratado para matar a la propia Yukiko... de ser así se habría muchas otras posibilidades y ninguna buena, definitivamente lo idóneo es que nadie supiera de su nombre verdadero, una vez como agradecía ser más parecida a la familia de su padre que a la de su madre...

Ahora después del incidente con Tadashi, sentía mucha inquietud, se negaba a sentir miedo, pero el que él supiera su verdadero nombre le daba... ansias... nervios... angustia...

¿Cómo lo sabía? Y lo más importante desde cuando lo sabía... Yusuke se había ido ese día a Rusia para darle caza a los verdugos de Mariko, había logrado despedirse de Elsa, si en algún momento había dudado de que ella correspondiera a su primo, la inquietud había sido menor al verla tan feliz, desde que la conocía, solo la había visto sonreír de esa forma, cuando la reunió con su hermana Anna, pero como pudo darse cuenta, ella no era tan sobreprotectora como Yusuke le advirtió, había coincidido con ella que Anna necesitaba ayuda, quizá ella misma no le vendría mal unas sesiones, pero siempre anteponiendo a su hermana, tal para cual... no sabía de qué se quejaba Yusuke, por lo que observaba Elsa protegía a quienes amaba y hasta ese momento Elsa se negaba hablar con la policía sobre Yusuke y sobre sus secuestradores, aunque Anna se le veían las ganas de acusarlo...

La situación se estaba descontrolando y no podía evitar sentirse nerviosa, a decir verdad, muy nerviosa...y excitada...

- ¡Tienes que olvidarlo, me oyes Aiko! - se dijo así misma- por nuestra seguridad olvida lo que paso con Tadashi...

Pero ahora que sabía que se sentía ser besada por él, la tristeza la abrumo, pues se dio cuenta que no había futuro para ella con él, pudo ver los secretos que Tadashi protegía con tanto celo y sabía que si se involucraba nada bueno saldría... pero por otros besos quizá, solo quizá estuviera dispuesta a arriesgarse...

Elsa se sentía otra vez en esa maldita montaña rusa de emociones, había despertado tan feliz, Jack la amaba, se lo había dicho y la había besado, pero ahora con la situación de Anna, su propia salud, el tener que salir otra vez al mundo, se sintió abrumada... muy abrumada...

-Un paso a la vez- se dijo con las lágrimas corriendo por sus mejillas, lágrimas de frustración y dolor...

Intuía que Anna necesitaba ayuda, pero no verla por tres meses se le antojaba un castigo horrible, se enojaba con ella no estaba siendo práctica, los sentimientos que tanto controlo la ahogaban, no quería perder de vista a su hermana, no otra vez, se sentía muy inútil ahí en la cama sin poderse levantar y zarandear a Anna... pero no podía y le frustraba mucho...

Sabía que, si quería cuidar a su hermana, primero debía recuperarse, eso era lo más sensato y dejar que Anna se recuperara, pero el miedo irracional de no verla podía más que ella y eso le molestaba... y mucho

Para Tadashi desde la muerte de su madre había días muy malos y ese era por mucho uno de los peores, primero había sido muy grosero con pacientes delicados, después había gritoneado a su mejor médico y no solo eso, era la médico tratante de su hermano, y no contento con eso había cedido a la tentación de besarla, llenándolo ahora de una gran insatisfacción que hacía que su genio fuera mayor y para rematar su maldito día había discutido con Hiro... su hermano ya estaba cansado de luchar... Tadashi temía tanto que Hiro se rindiera y eso había hecho, había sido muy claro, solo un tratamiento más... pero ya la última alternativa de Hiro era usar células madres, ya fuera de un embrión o de un recién nacido, pero para eso debía tener la autorización del gobierno japonés, pero para pedir la autorización se necesita primero el donante...

No tenía caso atormentarse con lo que no podía cambiar.

Para poder sentirse más cómodo consigo mismo era primero disculparse con todos los que agravio a lo largo del día y esa lista solo incluía a Elsa Arendell, pues Anna Arendell no le dirigió la palabra, con Honey ni un millón de años se disculparía con ella, era la mujer más irritante que había tenido la desgracia de conocer y para colmo alborotaba sus hormonas también, así que lo más sensato era alejarse lo más que se pudiera de ella, estaba demostrado que no podían estar solos en la misma habitación...

Así que, con eso en mente, se dirigió a la habitación de Elsa, toco suavemente al no oír nada abrió con suavidad y la vio sentada en el borde la de camilla de espaldas a él. Pudo ver como los frágiles hombros temblaban...

Genial

Estaba llorando

Suspiró con fastidio, ahora la disculpa que él pensó darla de forma rápida y ascética ahora le iba a costar... maldición...

Elsa escuchó que alguien tocaba la puerta y no quería que la vieran llorar por lo que con un poco de esfuerzo se sentó en la camilla con cuidado con las mangueras que estaban conectadas a sus brazos donde le seguían administrando el medicamento para su tiroides, no quería que la vieran llorar, ojalá y pudiera terminar de llorar, pensó fastidiada consigo misma, eso de la tiroides la tenía ya francamente harta. El cansancio, los cambios de humor, en fin, paciencia lo que siempre les decía a los pacientes ahora debía practicarlo en si misma...

-Ehh, hola...-dijo una voz conocida- ¿Te molesto mucho si hablo contigo?

Elsa reconoció la voz como la del hermano paranoico, sus nervios no estaban para soportar a un familiar molesto, no cuando ella misma se sentía así...

-Eso depende- dijo Elsa con voz ahogada- si viene a reclamarme lo de su hermano, entonces no es un buen momento...

-En realidad viene a disculparme- dijo Tadashi entrando y cerrando la puerta y caminado hacia Elsa-soy consciente que fui muy grosero con usted y su hermana, pero principalmente con usted...

Elsa respiro alegrándose que al menos las lágrimas ya habían parado, le había sorprendido que ese hombre prepotente acudiera a disculparse tan rápido, Elsa no pudo evitar preguntarse por qué y si había otras intenciones ocultas...

-Pero nunca me ha gustado hablar con las espaldas de la gente- dijo a modo de broma para tratar de quitar la mala impresión que seguramente dejo en la mente de la joven.

La vio asentir mientras con cuidado se volvía a acomodar en la camilla, la vio muy fatigada y debía reconocer que a pesar de eso era bonita, no como Honey, pero bonita... ¿de dónde vino eso? Pensó molesto

Elsa se recargó nuevamente en las almohadas, como odiaba sentirse tan cansada todo el tiempo, solo esperaba no quedar con daños en la tiroides como el hipotiroidismo o hipertiroidismo, pero ya debía dejar de divagar y concentrarse en su extraño visitante.

Al verlo se dio cuenta que como ella se veía abrumado, quizá la situación de Hiro era más delicada de lo que ella pensaba...

-Entiendo que se preocupe como hermano mayor- dijo Elsa con voz más firme- yo misma me preocupo por mi hermana menor, pero también entiendo que ella necesita su propio espacio y antes que me grite nuevamente, déjeme terminar mi sentir, después de todo usted mismo ha dicho que ha sido bastante grosero conmigo y si sigue con esa misma actitud tendré que pedirle que se vaya, sé que es su hospital, pero no le da el derecho de descargar sus frustraciones conmigo o con cualquier paciente...

Tadashi cerro la boca que había abierto para defenderse, esa joven sí que sabía poner en su lugar a la gente con palabras amables, vaya, vaya que sorpresa, tenía carácter la chica...

-Entiendo que la enfermedad de Hiro es extraña y de difícil tratamiento y lo que es peor con un pronóstico incierto, entiendo que tenga miedo por su hermano, afortunadamente mi hermana es sana y no debo preocuparme como me imagino que se preocupa por él, su amor es bastante palpable. Pero al mismo tiempo, Hiro ya es un adolescente y como tal querrá vivir como los de su edad, es natural que quiera salir y conocer personas, no creo ser la persona más idónea para decirle que si lo restringe tanto, Hiro lo seguirá retando, ahora si entendí bien Baymax es para cuidarlo, así que aceptare sus disculpas siempre y cuando me prometa que dejara de ver a Hiro como un niño y no como el jovencito inteligente que sueña con una libertad que sabe que nunca podrá disfrutar...

Te protegeré  (Jelsa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora