No me pidas más (Marc Márquez)

Perfectos desconocidos

- Y en definitiva, por eso estás loco- le dije a Marc mientras volvíamos a entrar en el coche, una vez que habíamos comido y nos habíamos puesto hasta arriba de pasta y postres.

- No me sirven esos argumentos. Ponerse a 300 con una moto en un circuito para mí es lo más normal- dijo con una sonrisa inocente tras abrocharse el cinturón- algún día te subiré a una.

- Sigue soñando. Ni aunque me digas que irás a 30.

- Intentaré convencerte. Tengo todo el tiempo del mundo- amenazó antes de arrancar provocándome una sonrisa inmediata.

Eché un vistazo al móvil y suspiré al segundo 0,001.

- ¿Pasa algo?- preguntó Marc al darse cuenta de mi reacción.

- Tus fans- respondí leyendo varios comentarios- que ya están haciendo deducciones.

- No sé cómo se dan cuenta tan rápido- cuestionó.

- No son tontos- reí hasta que di con varios comentarios refiriéndose a lo mismo- Marc. ¿Tú dijiste algo de mí en una rueda de prensa?- sus manos se aferraron al volante con más fuerza y entonces entendí que sí- ¿qué dijiste?

- No te mencioné, tranquila. Simplemente dejé caer que había alguien, tú, a lo que no le había sentado bien todo el revuelo de Aitana.

- Ahora me cuadra- respondí siguiendo el enlace de un comentario donde estaba Marc respondiendo a una pregunta. Subí el volumen y escuché.

"Han estado muchas personas aquí conmigo a lo largo de este fin de semana, algo que me encanta. Sin embargo, no todos se han ido igual de felices o satisfechos con este paso por el circuito. En las últimas horas ha habido, por lo visto, una avalancha de noticias mías relacionándome con Aitana, por el simple hecho de estar aquí, con sus padres y una amiga. Estas noticias falsas pueden afectar, no a mí o a Aitana, sino a alguna tercera persona. Y hasta aquí puedo decir."

- No me acordaba. Ahora estarán relacionándote con esa tercera persona.

- Eso están haciendo sí- dije procesando lo que esto suponía- Marc, no creo que lo podamos ocultar mucho más tiempo.

- No sé si esa frase es buena o es mala- ya andaba desconcentrado porque se saltó la salida que el GPS le estaba indicando en una rotonda- ¿tú quieres hacerlo público?

- No lo sé- admití- lo que quiero de momento es que no te pierdas- dije medio en broma para que nos relajáramos de nuevo y funcionó. Sonrió y se volvió a centrar en el camino hasta que llegamos a casa.

- ¿Ponemos una peli?- propuso en cuanto nos pusimos cómodos.

- ¿No te quedarás dormido? Tienes una cara de sueño increíble, después del viaje que has hecho es normal.

- Y el esfuerzo de esta mañana...-dijo ocultando una sonrisa haciendo ver a lo que se refería.

- Eso sobre todo, sí- respondí.

- Que no, va. No tengo sueño. Vamos a ver una peli porfaaa- pidió con cara de cachorrito mientras cogía mis manos. Era un niño pequeño ahora mismo, lo que provocó una amplia sonrisa por mi parte.

- ¿Con o sin palomitas?- ante la pregunta que hice, al ver que mi respuesta era un "sí" se puso a bailar y a dar palmas- ¡estás como una cabra! No sabía que te apasionara tanto el cine- dije irónica.