Demasiada información

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- Tengo que hablar contigo de una cosa- dijo de repente rompiendo el silencio incómodo que había. Parecía que no iba a ser algo bueno.

- Eso suena fatal- admití y él soltó un suspiro mientras se incorporaba conmigo encima que no sé si hizo que me aliviara porque estaba medio sonriendo o que me preocupara aún más- suéltalo ya.

- Me gustaría que vinieras conmigo de vacaciones este verano. Después del gp de Alemania.

- Estás de broma...- insinué. Me había contado por encima alguna vez cómo eran sus vacaciones y no me quería ver envuelta en un plan así.

- Eeemm no- dudó- ya está todo arreglado y mis amigos encantados de que vengas- vale, no, no era una broma.

Algo que quizás él esperaba que fuera una noticia eufórica para mí, en realidad no lo era. No me apetecía especialmente ir de vacaciones con él y toda su tropa, los y las cuales seguro que examinarán todos y cada uno de mis aspectos. No iba a estar cómoda y lo sabía desde ya.

- Verás, Marc- estaba pensando cómo decirlo sin que sonara demasiado brusco, porque sabía que había sido un detalle por su parte, pero no me dio mucho tiempo a pensar más.

- Sólo era una propuesta, Aina. No tienes que aceptar obligada. Si no te apetece o si tenías otros planes, no pasa nada.

- No, no. No es por eso- seguía pensando cómo decirle lo que estaba pensando.

- ¿Entonces? Dime que no es por Irina- murmuró poniendo sus manos sobre las mías.

- ¿Irina va?- sabía que iban unas cuantas chicas pero no precisamente ella.

- Sí, ella viene desde hace unos años.

- Bueno, no era por eso. Pero tampoco lo arregla- admití con una leve sonrisa- ¿Has llevado alguna vez a una chica con la que hayas tenido algo más que un polvo?

- No- respondió sin dudarlo.

- Con más razón entonces. Marc, no quiero sentirme el centro de todas las miradas y cotilleos. Quizás con el paso de los días se calmará pero estoy segura de que los primeros días estarán hablando de mí y eso me pone muy nerviosa.

- Por mis amigos ten claro que eso no será así- pasó su pulgar por mis nudillos y mis ojos bajaron inmediatamente a ver este gesto, apartándose de la mirada un poco inquietante que tenía sobre mí.

- Ya...- quería creer que sería así, pero tampoco me atrevía a decirle un "sí" ya- lo pensaré ¿vale? Déjame unos días.

- Te propongo una cosa- rebatió sonriendo. Sabía que iba a conseguir lo que quería- seguro que aceptas más rápido.

- No te rindes nunca ¿verdad?

- Soy patrón de las causas perdidas- pasó su mano por uno de mis rizos y tiró de él levemente para después soltarlo haciendo que se volviera a rizar- ven con tus amigas. Invita a Miriam y a Nuria- esa propuesta ya me gustaba más y él lo notó- lo conseguí- esto hizo que me diera la risa al ver que me conociera ya de esta manera.

- Está bien. Se lo diré. Así hablarán de las tres, no solo de mí- mal de muchos, consuelo de tontos.

- Pero no te preocupes por eso. Serán encantadores- dijo presumiendo de amigos y yo lo abracé pensando si sería buena idea ésta, porque algo me decía que no lo era.

- Vaaale- fingí- ¿dónde vamos y quiénes van?

Estuvo un buen rato contándome los planes que habían hecho, los cuales me gustaban casi todos. Por casi todos los entiendo todos menos el barco. Espero que no tenga en mente que me voy a tirar al agua en mitad del mar porque sí, porque la lleva clara.

No me pidas más (Marc Márquez)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora