Hasta El Último Aliento

Capítulo 1: El arma de fuego

Mi nombre es Les... Soy el supervisor de las cámaras de seguridad de la Secundaria de Calistoga desde hace unos 9 años aproximádamente. Estoy escondido desde hace mucho tiempo detrás de las paredes del Centro de Control, tengo miedo, he visto mucha gente morir frente a estas cámaras, dudo que alguien sepa que estoy vivo, dudo que me vengan a ayudar... La comida que reside en el Centro de Control la he tenido que ir comiendo poco a poco para poder sobrevivir.

He visto muchas atrocidades, crímenes, muertes, de todo un poco, pero hay algo que me llamó la atención. Un grupo de jóvenes haciendo lo propio para sobrevivir, para seguir con sus vidas, y es que ¿Quién quiere morir por un maldito virus o devorado por gente loca? Lo único que ellos quieren es salir del colegio, escapar de la realidad que por un error de dos ineptos se convirtió en una pesadilla... En un infierno... ¿Quién lo diría, no? Un magnate estadounidense traicionando su patria y aliándose con científicos rusos y judíos... ¡Maldito cabrón!

Sin más preámbulos, iniciaré a contarles todo lo que sucedió desde el 24 de enero de 2019 en Calistoga, un pequeño y hermoso pueblo de California que parecía tranquilo, pero que se volvió el blanco de los locos millonarios que quieren hacerse dinero de la tragedia, y que por un error de esos mismos monstruos, ha ido matando miles y miles de personas dentro del estado.

  Primera situación: Liam Watson (pt. 1)

8:07 AM---  Es una hermosa mañana, el aire nórdico se hace más potente a medida que avanza el día, Calistoga amanece tranquilo y ancioso; muchos padres llevan a sus hijos al Colegio Regional, pues aunque sea privado es uno de los más baratos y tiene los mejores rendimientos académicos del estado. Liam Watson como de costumbre, llega tarde al colegio, pero para su mala suerte hoy es jueves, lo que quiere decir que Coralie Wheeler, la inspectora del colegio, ya ha pasado el listado de asistencia semanal en todos los salones de la secundaria. Al llegar a la puerta principal para entrar al colegio, se encuentra con Coralie, quién lo mira de forma soberbia y desafiante, pues sabe lo que le espera a los tardíos:

-Y usted... Watson, ¿Qué hora piensa que son? ¿Las 6:00? ¡Para eso se hubiera quedado en su casa! ¡Usted es un irresponsable!, siempre llega a la hora que se le viene en gana, no sé como el director aún no lo ha expulsado de este colegio- dice Coralie exaltada, mientras se apoya en una de las pilastras del pasillo de entrada y da una profunda inhalación de aire.

-Pues... No me ha expulsado porque soy uno de los mejores estudiantes, así que ahórrese sus regaños y búsquese un marido que le quite el malhumor- responde Liam muy confiado y le lanza una sonrisa sarcástica a Coralie, quien se enoja demasiado con el comentario de Liam, pero decide no caer en sus provocaciones y marcharse del sitio.

Liam, desesperado y ancioso, sigue su recorrido, sube las escaleras que lo llevan a la segunda planta del edificio y llega a su salón, "II-B (ciencias)". Liam entra descaradamente al aula y saluda a su profesor de matemática y a sus compañeros, quienes ríen por la tardía llegada de su compañero. En un lapso de tiempo en que todos dejan de reír, Ty Macallan, un estudiante gimnasta y compañero de Liam, lanza un comentario tratando de provocarle.

-Si crees que eres divertido por el simple hecho de llegar tarde al salón estás muy equivocado, ¡tarado!- dice Ty, que ríe junto a sus dos amigos y choca puños con ellos por el comentario malintencionado. 

-¿Sabes? Creo que soy más divertido que tu, porque por lo menos llego tarde y aprendo, en cambio tú eres el primero en poner el trasero en la silla del aula, pero nunca se te queda nada en ese cerebro de pasa que tienes, eres una vergüenza, solo sirves para patear pelotas y ya-le responde Liam, que está muerto de la risa por sus insultos, y en ese preciso momento Ty se levanta rápidamente de su silla e intenta golpearlo, pero sus amigos y su chica, Norma, lo evitan a toda costa.