¿Qué día de noviembre podía ser? Ya había perdido la cuenta. Como sea, el grupo seguía recorriendo Nevada, pero decidieron darse un pequeño receso. Aunque para ellos eso no existía, a donde fuesen se encontraban por lo menos con uno de sus amigos avispones.
Llegaron a una especie de guarida secreta en declive. Aquel lugar secreto era perfecto para rodear la ciudad en busca de alimento. Eran las nueve de la noche cuando el grupo llegó al sitio. Su entrada precipitada no tardó en repercutir en ellos; avispones hambrientos y sedientos salieron disparados como hienas de caza e intentaron numerosas veces derrocar al grupo, intentando mostrar que el área era de ellos.
Sorprendidos, pero siempre precavidos, todos posicionaron sus armas y se dividieron el trabajo. Liam y Sid acribillaban por un lado a los más inteligentes. Norma y Aline se escabulleron por un cuarto y desde allí asesinaban a los rápidos. Blair y Jenny subieron al segundo piso, protegiendo a Millie y desde arriba destruían algunos con sus armas más letales. Todos trabajaban en conjunto, como siempre.
Blair y Jenny, disparando al azar, provocaron que un proveedor de gas estallara y consigo, que parte del lugar emanara fuego. La explosión tumbó a Liam al suelo y casi es asesinado, pero Sid logró rescatarlo. Blair y Jenny se recompusieron e intentaron evadir a muchos de los avispones, aunque la gran mayoría que querían entrar no podían, pues el fuego los asesinaba.
De pronto, Liam y Sid fueron acorralados por casi quince y se estaban quedando sin municiones. Norma salió de su escondite y se colgó de un cable, se impulsó con la pared y se dirigió hacia el lugar donde todos los avispones querían atacar. Allí abrió fuego contra ellos, con tal de defender a su novio. Blair también se unió a la comparsa y bajó por unos tubos con su metralleta posicionada y un gas lacrimógeno; les disparó a los que pudo y luego tiró el gas, provocando que los avispones se desorientaran y así lograr asesinarlos.
Liam y Sid se levantaron, y junto con Norma y Blair comenzaron, en medio del humo y de sus constantes tambaleos a asesinarlos a sangre fría. Aline, Jenny y Millie se reunieron con ellos nuevamente. Y así, una vez más Liam y su equipo demostraron quién manda.
I
Norma narra
El pueblo destruido y calmado en el que estábamos era de ensueño. Por primera vez, descansaríamos y no tendríamos ningún inconveniente con terceros. Me encontraba caminando con Jenny por el lugar. Un viento parcialmente frío se esparcía por el espacio y lo respirábamos, tranquilas e hilarantes.
- Sólo nos falta una ciudad y ya podremos ser felices... - dijo Jenny, emocionada. Asentí. Me tambaleé un poco; un fuerte mareo invadió todo mi ser. No podía mantenerme firme e intentaba, sin éxito, buscar un soporte. Pensaba que moriría. Jenny se percató de la situación y me tomó en sus brazos, cayendo conmigo al pavimento. Intenté mantenerme despierta, pero mis ojos se cerraban profundamente y caía en un mal sueño. Jenny gritó por ayuda a los demás, quienes también rondaban el lugar. Liam, desesperado, llegó al lugar del hecho y me levantó, llevándome a un lugar dónde pudiese descansar. Blair y Sid lo ayudaron.
Tras entrar en una especie de motel abandonado y destruido, pudieron colocarme en una cama dónde dormir. ¡Pero qué cansancio! Liam estaba preocupado, sabía que no era la primera vez que me pasaban esas cosas.
- Jenny, ¿qué fue lo que pasó exactamente? - preguntó, nervioso.
- Sólo se desmayó... - respondió, tratando de no hablar de esas cosas con el chico. Jenny pidió a todos que me dejasen descansar, así que salieron y quedaron esperando que despertara.
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Hasta El Último Aliento
Khoa học viễn tưởngUn grupo de jóvenes de un instituto estadounidense se percatan de la existencia de un virus letal que rápidamente se esparce por toda la ciudad e intentan sobrevivir dentro del plantel, aunque en cualquier momento pueden morir... Igual que los demás