Capítulo 50: No hay culpables

4 1 0
                                        

Las cosas en el hotel han mejorado notablemente. Ahora somos ocho, por lo que es mucha más ayuda en las cosas esenciales para subsistir mientras mi mente desarrolla el plan perfecto. 

Aún se siente la tensión entre Aline y Norma con los nuevos, casi ni se determinan. La relación de Millie y Blair cada vez va mejor, y lo mío con Amanda, pues... No sé, esta noche nos vamos a un restaurante en el que según ella, me preparará una deliciosa cena.

I

Estaba en mi habitación con Blair, Roger y Ricky contándoles mi idea de fuga. 

- Hay que cavar un túnel subterráneo. Es la única forma de liberarnos de esta mierda, piénsenlo. Si intentamos pasar justo en frente suyo, nos acribillarán sin piedad. Esos pobres ingenuos no tienen permitido dejar pasar nada ni nadie por la zona. Matan hasta a la hormiga que cruza la frontera - dije.

- Es algo ilógico, te aseguro que miles de insectos pasan a diario a través del cerco y ellos ni cuenta se dan. Y no ha pasado absolutamente nada, los de afuera siguen vivos - sugirió Ricky.

- Las moscas nunca se posan sobre otros insectos. Te aseguro que el día en que Lars Sladkov las liberó, esas moscas lo primero que hicieron fue posarse sobre la gente como forma de descanso hasta poder buscar alimentación - dijo Blair.

- Hipotéticamente si las moscas estaban alteradas para actuar sobre el humano, lo hizo de inmediato. Para ello, se distribuyeron en distintos ambientes viajando a través de los tres estados vecinos - dijo Roger.

- No todas actuaron sobre los humanos. Tuvimos un precipitoso accidente que nos obligó a refugiarnos en el bosque Yosemite y allí había un par de coyotes contagiado de esa mierda. Llegó hasta los animales, lo que no me explico es por qué al tener contacto con otros avispones, algunos humanos se contagiaban y otros simplemente morían. La mayoría de nuestros conocidos murieron ante nuestros ojos de forma espantosa - respondió Blair.

- Miles de compañeros, profesores y todos los trabajadores manuales de nuestra universidad también murieron ante nuestros ojos - insistió Ricky.

- ¡Paren! Se están desviando completamente del tema. Lo que realmente queremos saber es cómo vamos a pasar. Ya di una idea y para mi es un plan mayor, o sino arremeter contra los militares. Acabarlos o algo así - todos negaban con la cabeza, no querían participar de una masacre que seguramente terminaría con nuestras muertes. - Ohhh - se me iluminó la mente, de pronto. - Se me ha ocurrido un gran plan. Adormecerlos a todos con gases lacrimógenos, sería lo ideal para esta situación y poder así escapar. Piénsenlo, aún tenemos toda una vida para la respuesta que quieren - terminé y les pedí que salieran de mi habitación para poder bañarme. 

II

En la cocina, estaban Aline, Norma y Millie terminando de lavar los trastes. Millie sentía la depresión de Norma, apiadándose de alguna u otra forma y pidiéndole que se fuese a sentar.

- ¿Crees que soy enferma o qué? - preguntó Norma, enojada.

- Norma ya basta, no tienes por qué tratar así a los demás - respondió Aline, incómoda.

- Sí, tienes razón. Millie, cariño, discúlpame - suplicó Norma. Millie asintió y la abrazó. - Tenemos que estar unidas y más ahora que hay extraños en la casa de los que no sabemos nada - Millie se incomodó aún más.

 - Tenemos que estar unidas y más ahora que hay extraños en la casa de los que no sabemos nada - Millie se incomodó aún más

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Hasta El Último AlientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora