Esa noche apenas pude dormir. Pasé toda la madrigada reproduciendo mi playlist una y otra vez.
-Que hora es?- preguntó el pelirrojo.
-Muy temprano- estaba empezando a amanecer.
-Vamos, ven a dormir- me dijo sin abrir los ojos.
-No tengo sueño- sonreí vistiendome.
-Vale- se giró y siguió durmiendo.
Eran las seis de la mañana y Sirius no vendría hasta las once. Bajé y obviamente no había nadie, pensé que hacerme un vaso de leche me sentaría bien.
Me senté en el sofá y me dispuse a tomarme mi taza viendo hipnotizada el fuego de la chimenea. Estaba tan relajada que me quedé dormida sin darme cuenta.
-Alexa, despierta- me sacudieron con suavidad.
-Sirius!- me sobresalté.
-Estas lista?- me preguntó.
-Claro- asentí.
Ambos salímos por la puerta y emprendimos nuestro paseo por el valle.
Estuvimos andado mucho tiempo, en silencio, un silencio que esperaba que él rompiese.
-Emmm...- intenté iniciar una conversación- a que esperas?
-A llegar- respondió sin quitar la vista del camino.
Solo se veía la hierba cubierta por la nieve y árboles desnudos. Llegamos a los pies de una ladera.
-Vamos, no quieres saber las respuestas a tus preguntas?- me dijo subiendo.
Costosamente llegamos a la cima, él se sentó en un largo tronco que estaba tumbado en el suelo a modo de asiento y cara al hermoso lago que se veía desde esa altura.
Todos los colores que se apreciaban eran el blanco y el azul.
-Cuando quieras- me dijo mientras tomaba asiento a su lado.
-Bien pues...
-Va a ser duro?- me cortó.
-Para mí o para tí?
-Crees que puede ser duro para tí?- cogió las riendas de la conversación, como siempre.
-Tengo miedo de lo que pueda descubrir- confesé.
-Tranquila- cogió mi mano.
-Bien... porque estás tan interesado en hablar conmigo?- comencé.
-Hace mucho que no hablamos- respondió.
-Mi padre te ha mandado?- lo miré de reojo.
-Claro que no, él no quiere que sepas las verdaderas respuestas, y lo entiendo.
-Entonces porque me has ofrecido esta charla?- me miró a los ojos.
-Mereces saber toda la verdad y contarte por fin todo lo que te hemos ocultado durante años- solté su mano.
-Que sabes de mí y mi familia?- mi tono era desconfiado.
-Digamos que... todo?- sonrió tranquilo.
Cosa que a mi no me inspiraba nada. Su sonrisa de oreja a oreja me parecía siniestra.
-Como que? Como sabes tanto de mi infancia? Yo no te recuerdo- dije perdida.
-Yo era amigo de tu madre, te vi nacer, crecer. Eramos muy afines a pesar de tu corta edad. Un año después me metieron en Azkaban por la muerte ee los Potter- se veía dolor en él.
-Y como puedes saber tanto de mi infancia si estabas en Azkaban?
-Por tu madre. Ella sabía que te tenía mucho cariño así que me mandaba fotos y recuerdos suyos en los que tú salias- respondió.
-No entiendo porqué tanti interés hacia mí, Harry es tu ahijado- dije extrañada.
-Yo quería ser tu padrino, pero tu padre puso a Severus.
-Pero porqué mi padrino?- repetía constantemente.
-Por Merlín! Norah, ya te lo he dicho, porque nos llevabamos muy bien- empezó a reir Sirius.
-N...Norah?- quedé parada.
-L...lo siento- se disculpó al darse cuenta de que me había llamado por el nombre de mi madre.
-Hablame sobre ella- le pedí.
-Que quieres saber?- dijo con un tono sorprendido.
-Saber sobre ella, su vida, su paso pir Hogwarts....nadie me ha hablado nunca sobre ella- le confesé.
-Bueno, yo a tu madre la conocí el primer año en Hogwarts, ambos eramos de Gryffindor. Teníamos un pequeño grupo junto a Lily, James, Remus... Pero nosotros éramos inseparables- comenzó.
-Como era ella?- dije algo apurada- me cuesta recordarla.
-Ella era una chica muy muy inteligente además de graciosa y extrivertida. Pero tenía un caracter fuerte- se le escapó una risilla al igual que a mí.
-Cuéntame más cosas- le pedí entusiasmada.
-En nuestro tercer año, tu madre y yo quisimos hacer la poción para convertirnos en animagos. Al fin en nuestro cuarto año lo conseguimos; tu madre adoptó una forma de loba de pelo blanco- se veía nostálgico.
-Mi madre animaga!?- dije boquiabierta, hace unos meses para mí, mi madre era una simple muggle.
-Sí- afirmó él.
-Y yo lo soy?
-No estoy seguro de que los efectos hayan traspasado.
-Vaya...- parecía una niña pequeña escuchando cuentos, asentí para que siguiera.
-En el quinto año Voldemort empezó a interesarse por las habilidades de tu padre y nosotros entramos en la Orden del Fénix. Dumbledore admitió a Adam y a Severus- su mirada estaba perdida, como si quisiera omitirlo- los últimos años estuvimos entrenando y librando aquella batalla.
-Como se conocieron mis padres?- me senté mirandolo fijamente.
-La verdad es que tu madre tenía muchos prejuicios hacia los Slytherin's hasta que conoció a tu padre. Él empezó a ayudarla en pociones, era la única asignatura que a tu madre se le resistía- su expresión era distraída.
-Y esa cara?- dije sin tacto alguno.
-Pues esque tu padre no me caía muy bien, para mí era una serpiente inmunda que salía con tu madre- rió.
-La querías- le dije nada más terminó la frase.
Su reacción no me la esperaba y menos aún su respuesta.
Holiii!!! Siento haber estado tan inactiva, esque me resfrié y no me apetecía ni escribir ni subir capitulo :(
Pero bueno aquí está y espero que os guste♡♡♡
Millones de gracias como siempre a la gente que comenta, lee y vota.♡♡♡♡♡♡
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Eres mi olor favorito (Ron Weasley y Tu)
Fanfiction¿Que pasaría si el hermano de tu mejor amiga empieza a gustarte? ¿O si te enteras que tu familia oculta un enorme secreto? ¿Y si alguien no puede saber tu existencia?