No te acerques a él [2Jae]

19.

Eso que dije fue suficiente para obtener su atención. Sus ojos me miraban fijamente, esperando esa respuesta que tanto había estado pidiendo. Por fin iba a soltar lo que él deseaba.

-Después de este tiempo y de haberle dado muchas vueltas a lo mismo, ya he sacado la conclusión. Sé lo que siento y sé lo que quiero. Me gustas. -confesé.

La mirada expectante y llena de nervios de Jaebum, cambió a una atónita. Estaba escuchando una respuesta afirmativa, lo que él tanto ansiaba. Ya no iba a tener que intentar lograr pasar página, porque yo necesitaba que continuasen sus sentimientos intactos, como si fuese la primera vez.

Continuaba mirándome asombrado, parecía que no llegaba a asimilar mi confesión. Y era lógico, habíamos estado tanto tiempo separados mientras él seguía enamorado de mí, que ahora el hecho de que yo estuviese correspondiendo sus sentimientos como cuando éramos pareja, le impresionaba.

-¿Lo dices en serio? -logró articular.

Reí un poco y asentí. Se veía tan lindo metido en su asombro.

-Lo digo muy en serio. Me gustas, hyung.

Él sonrió abiertamente por mi respuesta, sus ojos se volvieron más brillantes y sus labios temblaron. Su intención fue decirme algo, pero solo consiguió balbucear un poco. Sus manos buscaron las mías, y una vez que las agarró, pude notar como no solo sus labios estaban temblando, sino que todo su cuerpo estaba igual. Sabía que tenía muchas emociones acumuladas en este preciso momento y necesitaba sacarlas. Me estaba regalando una escena demasiado bonita.

Comenzó a acercarse a mí, con nervios y a la vez mucha felicidad. Sus labios estaban casi rozando los míos y mis ganas de besarle se intensificaron gracias a ello. Pero, en ese momento recordé que él no estaba soltero, así que me alejé un poco para evitar el beso.

Él frunció su ceño y me preguntó con la mirada el por qué me había alejado de algo que deseábamos los dos hacer, así que decidí aclararlo.

-Todavía estás en una relación, cuando termines con él podremos ser libres para hacer lo que queramos.

No podía permitirme besarle si él estaba atado a otra persona. Respetaba las relaciones y no quería actuar inapropiadamente.

Mi hyung se quedó quieto y algo pensativo por lo que había dicho. Miraba a un punto fijo sin decir ninguna palabra. ¿Era necesario pensar mucho en lo que le había dicho? Era algo muy simple y no comprendía el por qué estaba en silencio ante mi respuesta, la cual me parecía la más acertada.

-¿Qué ocurre? -decidí preguntar.

Al escuchar de nuevo mi voz, levantó la vista y me miró. Sus manos soltaron las mías y suspiró para después fruncir sus labios. ¿Algo andaba mal?

-¿Hay algo que deba saber?

Su silencio me estaba empezando a impacientar. Necesitaba que me aclarase el por qué estaba actuando así.

-Sí, es sobre Lucas y yo. -se dignó a responder por fin y eso me alivió un poco.
-¿De qué se trata? -le miré expectante.
-No quiero que te enfades, Youngjae. -hizo una mueca. -Lo que decidimos fue para unirnos.

Fruncí el ceño por sus palabras, ¿a qué se estaba refiriendo?

-Dime lo que sea que me debas contar. -pedí.

Lo mejor era que me dijese de una vez lo que tenía guardado, sin rodeos.

Esperé por un minuto más donde él seguía indeciso. Estuve a punto de pedirle de nuevo que hablase, pero en ese momento separó sus labios para hablar.