No te acerques a él [2Jae]

final.

Quiero agradeceros al principio antes de que empecéis a leer el final, y también quiero avisaros de que este final es muy simple y corto, pero no encontraba algo mejor para escribir.
En esta historia han pasado muchas cosas, han habido momentos bonitos y felices y momentos tristes y drama. En general, muchas cosas de por medio. La verdad es que he añadido demasiado en estas dos temporadas, tanto que ya me ha parecido suficiente y es por eso que os traigo un final tan corto y simple, pero creo que no debo añadir nada más porque lo estropearía todo. Y como esta historia ya debe cerrarse, entonces no quería escribir un final largo donde podía acabar de nuevo enredando las cosas. Lo siento si no era lo que esperabais.

Bueno, esta historia ha llegado a su final. Increíble, pero cierto. Parecía que nunca iba a terminar, pero ya ha llegado el día. Así que solo me queda deciros que muchísimas gracias por todo el apoyo y cariño que le habéis dado a la historia. Sé que muchas personas dejaron de leerla con el tiempo, pero aun así estoy bastante agradecida. Quizá no estoy 100% satisfecha porque pienso que muchos de los capítulos que escribí no fueron lo suficientemente buenos, pero espero que a pesar de eso hayáis podido disfrutarlos.

Ya sabéis que me podéis encontrar en Sorpresa inesperada y Enemigos en Wattpad. Tal vez también un poquito más adelante escriba alguna cosa más ^^

Miles de gracias por leer, por los comentarios y votos, y por el apoyo en general. Sois geniales y siempre os estaré agradecida!!!

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Cuatro años después.

Abrí la puerta del apartamento y al encender la luz confeti y globos salieron disparados y todos mis amigos aparecieron gritando ¡Sorpresa!

Había un cartel enorme que decía ¡Te amamos, Choi Youngjae! en tonos azules, los globos eran de diferentes colores al igual que el confeti y en la mesa había comida de todo tipo, tanto dulce como salada.

¿A qué se debía todo esto? Todavía quedaban cuatro meses para mi cumpleaños, así que no lo comprendía. Me parecía increíble el detalle tan enorme y bonito que habían tenido conmigo, pero eso no evitaba que siguiese sintiéndome desconcertado por ello.

-Antes de que preguntes a qué se debe todo esto, queremos decirte que la idea se le ocurrió a Jaebum. Él dijo que te merecías una sorpresa por simplemente ser tan buena persona, amigo y confidente, y que no era necesario tener que hacerla por tu cumpleaños. A todos nos pareció buena idea porque nunca te hemos hecho algo así, por lo que este es el resultado. -explicó entusiasmado Jackson.

Mis ojos rápidamente se llenaron de lágrimas y empecé a llorar de la felicidad. Mis amigos al notar aquello se acercaron a mí para fundirnos así todos en un enorme abrazo.

Eran todos tan maravillosos conmigo que me sentía el chico más afortunado por haber conocido a personas tan increíbles y haberlas mantenido junto a mí por tantos años. Literalmente no podía pedir nada más si los tenía a ellos, porque eran lo máximo que podía desear.

Nada había cambiado, a pesar de haber pasado tanto tiempo, lo que nos queríamos todos seguía intacto y parecía que nunca iba a dejar de ser igual.

Mark y Jackson continuaban juntos como una pareja sana y feliz. Yugyeom y BamBam seguían siendo un matrimonio precioso lleno de cosas positivas y bonitas. Hyungwon y Wonho terminaron una vez, pero se dieron cuenta de que estando separados no iban a poder avanzar de tan buena manera, así que continuaban juntos. Jungwoo y yo con el tiempo fuimos cada vez siendo más y más unidos. Incluso acabó estando con la persona que tanto amaba, Lucas, de quien también me hice amigo. Y Jinyoung... Él conoció a alguien durante el tiempo que estuvo fuera de Seúl, y ahora ambos vivían juntos aquí en un bonito apartamento. Su nombre es Wonpil, un encanto de chico que hacía muy feliz a mi mejor amigo y gracias a ello y a la gran persona que era se ganó el cariño de todos.

Las cosas iban bien, estábamos en buenas etapas de nuestras vidas. Y aunque a veces hubiesen algunos inconvenientes, problemas e imprevistos, eso no nos impedía ser felices y seguir creciendo.

Cada año me daba cuenta de que tener a personas sinceras, humildes, verdaderas, y en general con cualidades muy buenas y bonitas, lo era todo. Era la clave para tener una vida más completa y feliz, y para nunca sentirte solo.

Sonreí encantado al verlos a todos reunidos en mi apartamento charlando, riendo, bromeando... Simplemente unidos.

Sentí un toquecito en mi hombro y me giré para encontrarme con la persona que más me había hecho sentir y experimentar en mi vida. Con la persona que cada día estaba más seguro de que quería seguir envejeciendo a su lado. Con la persona que amaba con todo mi ser.

Esa persona es Im Jaebum.

Antes de que él pudiese decir algo, pasé mis brazos por su cuello y uní nuestros labios. Con este beso quería expresarle lo muy agradecido que estaba y lo feliz que me hacía hasta con la mínima cosa.

¿Qué sería de mí sin él? No podía imaginarme una vida sin estar a su lado, sin dormir cada noche con él, sin sentir sus besos mañaneros para despertarme, sin sus sabias palabras, sin sus acertados consejos, sin su armoniosa voz, sin sus ocurrencias, sin su cariño... Y sin miles de cosas más que él aportaba a mi vida de la mejor manera posible.

Hacía unos años atrás parecía que nunca más íbamos a volver a estar juntos y que lo mejor era que cada uno siguiese su camino y rumbos diferentes. Pensamos que lo nuestro no tendría futuro y que volver con alguien con quien ya habías estado era un error. Pero estábamos muy equivocados, sobre todo yo.

Fue una suerte que él nunca me hubiese superado y que hubiese confesado sus sentimientos. También agradecía el ultimátum que me dio para que me diese cuenta de que si no me decidía iba a perder la oportunidad para siempre.

Le daba las gracias a mis amigos por los consejos, y sobre todo a Jinyoung por haberme ayudado con el último y más importante empujón.

Ahora vivía con él en el mismo apartamento, compartíamos todo y de la manera más sana posible. Con nuestros días malos y buenos, pero en todo momento estando unidos y apoyándonos.

Éramos felices juntos y así debía ser por y para siempre. Y sí, lo íbamos a seguir cumpliendo.