Mi Primera Opción (Editando)

Capítulo 80

No me separé de él en toda la noche pero una voz bastante particular fue la que hizo levantarme.

-Abbie...Abbie- dijo mientras me removía.

-¿Ezra?- dije parpadeando par aclarar mi vista.

-Sí, enana. Siempre metiéndose en problemas eh, ¿cómo están?- dijo con tono preocupado. 

Bueno, no he contado mucho de la vida de Ezra y es porque casi no lo vemos, dejó su carrera como abogado a un lado después de graduarse y emprendió una gira con la banda, de esa manera tocó muchas puertas y es lo que es ahora, estamos muy orgullosos de él y su música. Siempre que puede nos visita pero creo que sólo han sido dos veces y por pocas horas, pero lo queremos.

-Está sedado pero está conmigo- dije tocando su rostro. -Yo estoy bien si él lo está-

-Ay Abbie... siento lo de Matt, fue un idiota pero te quiso-dijo. Intenté no volver a caer en el abismo al recordar que estaba bien. -Verónica está afuera para llevarte a casa y que puedas ducharte y traer algunas cosas de Josh, no aceptaré un no por respuesta, lárgate de aquí- dijo.

-No quiero dejarlo, esto es mi culpa y no quiero que le pase nada más, no me lo perdonaría-

-Estoy aquí y no me despegaré de él, sabes que los quiero mucho a ambos- asentí y salí besando el rostro de Joshua y abrazando a Ezra.

-Gracias- dije y salí, encontré a Verónica rápidamente.- ¿No dijiste que traerías mis cosas?- dije cruzándome de brazos.

-Sí pero me encontré a Ezra, fuimos a charlar y le conté lo que sé de toda esta locura que les está sucediendo a ambos, me persuadió y perdí la noción del tiempo- rascó la parte trasera de su cuello en señal de incomodidad y lo dejé pasar; asentí y fuimos a casa en completo silencio, desde la ventanilla del copiloto sentía como los rayos del sol colaban en mi rostro, volvía a sentir calor después de tanto tiempo y toqué mi estomago haciéndole saber a mis hijos que todo iba a estar bien.

-Todo estará bien otra vez, Bi- dijo Vero apretando mi mano.

-Ahora lo sé- dije porque ya sé que Duke está en la cárcel, Martina murió y Scarlett tampoco estará cerca de nosotros. Llegamos a casa y todo estaba como lo habíamos dejado. -Me encargué de que todo estuviese en orden cuando regrese Josh- dijo mi mejor amiga.

-Te agradezco mucho- dije y la abracé. Muchos recuerdos comenzaron a calar en mi mente, cuando estuve con Matt en la cocina, cuando charlábamos acerca de qué íbamos a decir en las reuniones, ahora tenía que enfrentarme a ello, sola.

-Estoy aquí para ti- dijo. -Ahora ve a ducharte y arreglarte un poco, asentí y subí. 

Abri el grifo y dejé que la tina se llenara mientras me quitaba la ropa, me observe en el espejo mientras estaba en ropa interior, tenía rojas algunas partes de mi cuerpo, otras tenían sangre seca y mi hombro con la venda, tenía que cambiarla; entré en la tina sintiendo otro gran alivio, el agua estaba calientita.

-Todo estará bien, orugas revoltosas- dije en voz alta a mis bebés. Comencé a quitar todas las manchas de mi cuerpo, manchas de sangre mezcladas entre las de Joshua y Matt, intenté borrarlas rápidamente al recordar cada segundo cuando comenzaron los disparos desesperadamente, cerré mis ojos fuerte intentando sacarlo de mi cabeza y atraje mis piernas a mi pecho. -No voy a perderte a ti también Joshua, te lo prometo- 

-¿Abbie?- dijo Vero tocando la puerta y después entró al baño sin avisar. -Quería saber si estabas bien- dijo acercándose y sentándose en el borde. -Todo ha sido tan rápido- tenía dos tazas en sus manos y me tendió una. -Chocolate, el que te gusta- dijo sonriendo.