El Rosa Blanca.

Capítulo 7 parte 3/3.

Narra Estefanía.

Alejandro y yo, nos encontrábamos sentados en el comedor y yo, estaba a punto de  contarle, la razón por la que me había encontrado llorando...

—La razón por la que me encontraste llorando en el cementerio... Fue porque esta mañana, tuve una fuerte discusión con Raquel y con mi papá, ¡Ella le maltrato la mano a una empleada y yo fui a reclamarle por eso! Ella, comenzó a gritarme y a decirme que la casa era suya, y no aguante más y le dije: ¡Qué la casa no era suya, y que por lo menos, yo era más dueña que ella!

—Alejandro (Curioso): Y tú papá cómo lo tomo?

—Desde luego que no le gusto que insultara a su esposa, pero Alejandro, yo de verdad estaba muy molesta, sabes que mi relación con Raquel, nunca ha sido buena, pero al escuchar a Javier, decirle mamá... ¡No me contuve más y se los dije! Les dije que sabía que ella y mi papá, habían sido amantes cuando mi mamá aún vivía. —dije soltando unas lágrimas.

—Alejandro (Sorprendido): ¿Se los dijiste?

—Sí... Tú sabes cuanto tiempo llevó callando eso, yo simplemente no soporte más y explote. ¡Se los dije todo! Pero luego de eso, papá me pidió que me disculpara con Raquel y desde luego que me negué, y comencé a gritarle que era una zorra, una cualquiera y ella me abofeteo. —dije tocando nuevamente mi mejilla.

—Alejandro (Preocupado): ¿Cómo qué te abofeteo? Y tu papá no hizo nada? 

—Sí hizo algo, quedarse callado para no llevarle la contraria a su esposa, cómo siempre... —dije decepcionada. —Luego de eso, yo solo le dije a mi papá que se olvidará de mí, cómo yo lo haría de él.. ¡Él decidió apoyar a Raquel, así que yo no tengo más nada que hacer allí! —dije secando mis lágrimas.

—Alejandro (Confundido): Pero no entiendo, cómo llegaste al cementerio?

—Muy fácil, después de discutir con papá, salí de la casa y tomé un taxi. Pensé en muchos lugares a donde ir... Como en la oficina para ir a buscar a Mathías, pero sabía que papá me buscaría ahí y yo solo quería estar sola. De tal manera, le pide al taxista que me llevará a una floristería para comprar unas flores y luego fui al cementerio para visitar a mamá. Sabría que allí estaría sola y creó, que me hacía falta verla... ¡Tenía muchos años sin visitar su tumba! —dije con una sonrisa a medias. —Alejandro, yo solo quisiera entender... ¿Por qué mi papá quiere tanto a esa mujer? —dije refiriéndome a Raquel. —¿Por qué engaño a mi mamá con ella? Y a mí que soy su hija... ¡Ni siquiera me defendió! —Dije dolida. —¡Después de tantos años lejos de mí y todavía la defiende a ella! ¿Por qué Alejandro, por qué lo hace? —dije llorando y él solo me abrazo.

—Alejandro: No puedo responder a esa pregunta, pero sí decirte: ¡Qué estoy aquí para ti, para lo que necesites! —dijo y yo solo lo abrace más fuerte mientras lloraba.

Narra Alejandro.

Luego de que Estefanía, se calmará y debido a la hora... (1:15pm ) Yo decidí preparar algo para comer y luego ambos nos sentamos a almorzar...

—Lista para probar mi especialidad... ¡Pasta con carne molida y queso parmesano por encima! —dije colocando los dos platos en la mesa.

—Estefanía: Recuerdo muy bien esto, déjame... —dijo probando un poco de pasta. —Umm —dijo saboreando. —¡Sigue estando tan deliciosa como siempre! —dijo sonriendo. —Aún recuerdo cuando la preparábamos los sábados en casa de tus padres, eran: ¡Sábados de pasta! —dijo riendo.