Solos contra el mundo 🖤

Capítulo 9: Citas y Planes

Simón P.O.V:
No estoy muy seguro del porque acepté salir con Emma.
Creo que la razón es porque estoy intentando distraerme.
Intento constantemente que mis sentimientos por Ámbar desaparezcan. Pero es inútil.
Lo que siento por ella es demasiado fuerte.
La quiero con todo mi corazón, aún después de lo que hizo.
En cuanto a Emma, siendo sincero no es el tipo de chica con el que me gustaría salir.
Si bien es muy buena amiga y es divertida, no siento atracción alguna por ella. Sin mencionar que he notado que no se lleva nada bien con Ámbar.
Entiendo los celos de Ámbar.
Pero ella sale con Benicio, o al menos eso es lo que el dice.
Me da rabia.
Es una persona detestable en todo sentido.
Nunca confiaría en él y no quiero que perjudique a Ámbar.
Ella paso por mucho. La entiendo en cierto modo.
Su madrina, Sharon Benson quien la crió, nunca estuvo para ella. Jamás la quiso como una verdadera hija.
Nunca pudo conocer a sus padres.
Siempre se sintió sola y vacía.
Nunca tuvo a nadie que la acompañara.
Yo le di la oportunidad de cambiar y ser mejor.
Yo quería ayudarla a sacar al exterior su verdadera Ámbar.
Pero me decepcionó. Así también a todo el equipo del Roller.
A pesar de todo lo qué pasó, nunca podré olvidarla porque me encanta.
Me encanta toda ella.
Nada ni nadie podría cambiar lo que siento por Ámbar.
Emma ha estado coqueteando conmigo durante unos días ya, y esto se esta volviendo algo incómodo. Es una increíble persona y muy buena amiga, pero no me interesa de esa manera.
*Narrador omnisciente*:
~Cita de Simón y Emma~:
Emma llevó a Simón al parque.
Había preparado un picnic.
Quería que su primera cita sea especial, para así abrir camino a una relación amorosa. Pero eso no es lo que el mexicano quería.
-Oye Simón.- dijo la chica inglesa intentando comenzar una conversación.
Simón la miró para darle la señal de que la estaba oyendo, pero la verdad era que estaba pensando en otra cosa.
-¿Hace cuanto haces música?-preguntó ella.
-...Desde chiquito, en México.-contestó él algo distraído.
Emma lo notó extraño y le dijo:
-¿Simón que pasa?, estas raro. ¿Es algo que dije?.
-...No...emm...Emma perdóname.- respondió el mexicano confundido.-Es mi culpa, lo que pasa es que tengo la cabeza en otro lugar.
-¿En dónde?- preguntó Emma con una expresión de enojo mezclada con confusión.
Automáticamente la imagen de Ámbar vino a la mente de Simón.
Sus ojos.
Sus labios.
Su cabello.
Su sonrisa.
Ella.
Por un momento el mexicano se transportó al momento en el que besaba a su amada.
A Ámbar.
La adrenalina se apoderó de él.
Sintió la misma felicidad y el amor que sintió cuando sus labios se tocaron.
Eran uno solo.
Eran ellos, Solos contra el mundo.
-¡Simón!
De repente oyó un gritó y volvió a la realidad.
Era la ahora enojada Emma quien lo estaba llamando hace cinco minutos consecutivos.
-¡Simón!¡Te estoy llamando hace mil años! ¿En que pensabas?
Simón aún estaba cegado por las imágenes que habían venido a su mente anteriormente, pero logro recobrar la postura y respondió:
-...En nada, perdón Emma.
Emma se tranquilizó con un suspiro y dijo mientras acariciaba su mejilla:
-No pasa nada, entiendo que debes estar cansado. Debe ser agotador trabajar en el Jam & Roller y a la vez componer canciones para la Roller Band.
Simón asintió desinteresadamente.
Emma comenzó a acercarse lentamente a él con la intención de besarlo.
Comenzó a mirar sus labios y Simón se dió cuenta de la intención de la chica.
Cuando Emma estaba a centímetros de tocar los labios de Simón el mexicano movió su cara hacía un lado, en señal de rechazo.
Emma no se tomo bien su reacción y exclamó, esta vez furiosa:
-¿!Cuál es tu problema¡?
Simón no soportaba la situación y se levantó de la manta en la que estaba sentado mientras decía: -perdón- y juntaba sus manos con una expresión de lamento.
Acto seguido, se fue corriendo del lugar.
Emma estaba totalmente furiosa.
No solo la habían dejado sola en una cita, si no que el chico que le gustaba no quería saber nada con ella.
-Esto no va a quedar así.- se dijo Emma a si misma y se contactó con un viejo amigo.
-¿Benicio?
-Miren quien me llama, ¡Mi vieja amiga Emma!
¿Que necesitas?-dijo Benicio con una risa malévola.
-Necesito verte. Te contaré todo en persona. Nos vemos en el Jam & Roller.-Respondió Emma antes de cortar la llamada.-Simón, vas a ser mío.