Capítulo 49: Buenos cambios y malos recuerdos

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*Un mes después:*
En el Jam & Roller

-¿Alguno de ustedes sabe como está ella?-
preguntó curiosa Emilia.- Hace mucho tiempo
no hablamos.

-Debe estar terrible.-Acotó Matteo.- Ella no
merece haber pasado por todo lo qué pasó. Le
preguntaré a Luna sobre su estado cuando la
vea, ella debe saber.

-Ojalá se sienta mejor.-soltó Delfi dirigiendo su mirada hacia arriba y rezando con las manos.

-Si, y mientras tanto yo creo que debemos darle su espacio. Debe tener muchísimo que procesar.-opinó Nina.

-Estoy de acuerdo con Nina.-agregó Gastón con su brazo rodeándola.-Hay que esperar un poco más de tiempo.

En ese momento, Simón y Luna llegaron al Jam & Roller, hallando a todos sus amigos reunidos en la cafetería del lugar.
Al ver a ambos mexicanos llegar, no hubo uno de ellos que no volteara su mirada para verlos. Los dos se quedaron estáticos, y sus compañeros se pararon de sus asientos, rodeándolos.

El silencio colmó el sitio unos segundos.

Ambos jóvenes se miraron cansados y luego voltearon sus ojos hacia el grupo.

-Veo que todos quieren saber el estado en el que se encuentra Ámbar.-dedujo Simón por aquellas expresiones preocupadas.

-Si...hace ya un largo tiempo que no la vemos, si no recuerdo mal...tres meses.-dijo Jazmín con un poco de molestia y ambos brazos cruzados.-Pensé que al intentar llamarla más de veinticinco veces iba a atender el teléfono...pero no me pude comunicar con ella.

-Jazmín, entendemos lo que estás sintiendo.-contestó comprensiva la mexicana más joven.-Pero tú también tienes que entender que Ámbar está pasando por un momento extremadamente delicado y complejo de procesar.

-Si, chicos. Comprendemos que hubieran preferido que ella se comunicara con ustedes. Pero la realidad es que...no es fácil...para ninguno de nosotros. Debemos apoyarla, a pesar de todo.

-Claro que si, siempre vamos a estar para ella. No hay duda de eso.-agregó Pedro.

-No entiendo algo...¿Ella está bien?-preguntó Matteo inquieto.

Simón se rascó la nuca.

-Si...mentiría si dijera que está alegre, pero esta mejorando...poco a poco. Ya verán que dentro de un tiempo las cosas volverán a su lugar, es todo un proceso.

-Entendemos. Además, lo más importante ahora es su salud.-dijo Yam.

-Por supuesto.-afirmó el mexicano.

-Chicos, revisando el calendario veo que se acerca su cumpleaños.-Dijo Emilia fijando su vista en el celular y seguidamente enseñándolo a sus amigos.

-Oye, tienes razón. Solo faltan cinco días.-se sorprendió Luna.-Había perdido la noción de lo rápido que pasa el tiempo.

-¿Creen que festejarlo sería bueno para ella? Me refiero, a que si la ayudaría a distraerse y...quizás a pasar al menos un buen momento.- Propuso Jim.

-No seria mala idea.-Respondió Nico.-Después de el infierno que tuvo que pasar...es lo menos que se merece.

-Nico, por favor no me recuerdes lo qué pasó ...se me pone la piel chinita.-se quejó Simón.

Todos mantuvieron un silencio incómodo por varios segundos.

Nadie podía negar que al mexicano se le notaba la tristeza a kilómetros.

Y la razón era más que evidente y entendible, por lo que sus amigos preferían esquivar el tema.

La mexicana de ojos verdes abrió su mochila y tomó una libreta, junto con un bolígrafo. Apoyó ambos objetos sobre la mesa de la cafetería.

Solos contra el mundo 🖤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora