Candy
Me dispuse a mirar el paisaje todo el camino hasta notar algo familiar. *Rayos se dirige a la casa de Alex - ¿A dónde vamos?
Él me mira y vuelve a dirigir su mirada al frente. -Lo importante es lo que vamos a hacer.
-¿A que te refieres? - Le pregunto.
-A nada en específico.
No puedo llamar a Alex y avisarle o ponerme nerviosa. *¿Qué es lo que quiere? ¿Por qué me trajo?
Lo volví a mirar encontrándome así con su mirada. -¿Pasa algo?- Me pregunta.
-Nada, seguro es ansiedad. Imagínate que no sé a dónde vamos...- Dije sarcásticamente.
-Ya llegamos.
Él estaciona el auto y baja, lo seguí. Caminamos sobre la arena hacia la casa de Alex, como me lo esperaba.
Al levantar la vista, justo frente a nosotros venían Alex y la princesita.
-¡Elizabeth!- Gritó el moreno.
-Joseph...- Respondió ella, perpleja.
Los dos tórtolos estaban sorprendidos de verse y Alex no era la excepción, me miraba con cara de 《¿qué haces aquí?》. Una vez consciente del asunto, Alex toma de la mano a la princesita echándola hacia atrás para alejarla del moreno.
-¿Qué rayos haces aquí?- Preguntó Alex, con cierto desprecio hacia el moreno.
-Vine por mi mujer.- Dijo el moreno.
La princesita interrumpe diciendo : -Puedes regresar por donde viniste porque ya no soy tu mujer. Y qué descaro tuviste para traer a tu amante aquí para armar un drama.
-Elizabeth, piensa un poco... ¿La iba a traer aquí si ella fuese mi amante? Yo soy fiel a ti y permíteme decirte que no te daré el divorcio si te has auto-proclamado ¨no mi esposa¨ porque soy inocente. Además, no me iré de aquí sin tí.
-¡Qué descaro! ¡lárgate de mi propiedad!- Gritó Alex.
-¡Esto es tu propiedad- patea la arena- pero ella es de mi propiedad!-Exclamó el moreno.
-¡Ya no aguanto más! ¿Se creen que soy una estatua? ¡No hay nada que hacer aquí! Tú, Elizabeth, vete con tu esposo. Yo los separé por puro capricho, él nunca te fue infiel.
*Listo... Ya te salvé. Lo mejor es echarme la culpa. Esta es la única forma de librarme de Elizabeth y que seas solo mío
-¡Candy!- Me gritó Alex.
*¡Alex, eres un idiota!
El moreno y la princesita nos miran.
-¿Cómo que ¨Candy¨? ¿Ustedes se conocen?-Pregunta el moreno y de un momento a otro, entre nosotros hubo un gran silencio.-Lo sospeché, ni siquiera es necesario hablar. Ya todo encaja en su lugar... Elizabeth, ellos dos hicieron todo esto. Ellos nos separaron.
-¿De qué... estas hablando, Joseph?- Pregunta la princesita alejándose de Alex mirándonos a todos.
-El incidente en el hospital con ella y que Alex estuviera justo frente a nuestra casa para llevarte consigo. Que ella siempre empeoraba la situación, además de que te había dicho que Alex no tenía intensiones de ser sólo tu amigo. La vida esta en contra de que estemos juntos o estos dos se conocen. Si no fuese así... Dinos, Alex... ¿Cómo sabes su nombre? ¿Cómo sabes que se llama Candy? Yo nunca lo mencioné frente a ti.
Me quedé paralizada con la boca entreabierta... Él estuvo investigando. Alex no contestaba y yo no sabía que decir.
La princesita se paro en frente de Alex y le gritó- ¡¿Cómo pudiste?!
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El enfermero y la contable
RomantizmDesde niños los cuentos se han encargado de distorsionar una realidad, expresándola en una frase: "Y vivieron felices para siempre". Cuán emocionante era leer el mismo final cliché, cuando la realidad es otra. El amor no es de color de rosa con la...