hard times || h.s

miradas

Les traigo un maratón porque estoy ansiosa por estos capítulos! Disfruten.

Maratón 1/3

Abigail.

El tiempo parecía pasar más rápido con Harry. Daba un pestañón y los días pasaban y pasaban, y con estos, Shay parecía incluso crecer cada vez más. La niña desbordaba curiosidad por cada cosa. Normal, estaba recién descubriendo el mundo. Para su edad, era increíblemente inteligente y vivaz.

Nuestros planes para hoy eran simplemente estar en casa disfrutando juntos la tarde de viernes libre. Agradecíamos los fin de semanas enormemente, en especial desde que  Harry entró a trabajar y la universidad era agobiante para mí.

Cuando el timbre nos saca de nuestra burbuja, un pequeño puchero se forma en mis labios, pero me alegro al comprobar que es Joe, el mejor amigo de Harry quien llega a casa, para darnos una grata visita. Es el único amigo que he conocido de Harry y parecen bastante cercanos, cosa que me alegraba.

—Traje cerveza —deja una bolsa sobre la mesa del café y se sienta en el sofá con confianza.

Harry también se acomoda, para luego llamarme y pedirme que me siente a su lado.

—Solo voy a ver a Shailene, ya vengo —le aviso y él asiente con una sonrisita.

A veces pienso que él no se da cuenta o no sabe el efecto que tiene sobre mí, porque con cada pequeña sonrisa o por más minúsculo que sea el gesto, yo me derrito.

Cuando reviso a la bebé y veo que ella sigue durmiendo plácidamente, solo acaricio su nariz con extrema suavidad.

Suspiro, pensando en qué sucederá con nosotros. Últimamente, ese pensamiento estaba dando vueltas en mi cabeza sin motivo aparente. Y lo peor es que las palabras de Evelyn estabas más que nunca en mi mente.

¿Qué si la relación con Harry se rompía, por cosas de la vida? ¿Qué sucedería con ellos, con Shailene? No puedo ser tan ciega y no hacerle frente a las cosas. Nada está asegurado en esta vida. Las relaciones terminan y todo se acaba, pero el solo hecho de pensar en dejarlos algún día, me rompía el corazón.

Me sentía dividida. Un miedo irracional me estaba inundando, pero por otro lado, mi subconsciente estaba jugando conmigo.

Estás arruinando tu vida.

No tienes que hacerte cargo de una bebé que no es tuya.

Te terminarás aburriendo a jugar al rol de madre.

Todos me lo han dicho, pero yo simplemente estaba cegada. Amo a Harry y amo a Shailene, pero eso no quita las dudas que han aparecido tan intensamente estos días. ¿Estaba preparada para ellos?

Inhalo y exhalo, en un intento vago por deshacerme de mis pensamientos. Le echo una última mirada a Shay antes de volver a la sala.

—¿Ella está bien? —me pregunta Harry, dándole palmaditas al espacio vacío a su lado.

—Durmiendo como una reina —me río un poco.

—Ustedes son como los papás del año —rueda sus ojos Joe.

Harry de pronto parece incómodo por su comentario. No lo paso desapercibido, seguía pareciendo molestarle el hecho de que alguien dijera algo referente a mí siendo la madre de Shailene. ¿Por qué?

No le doy rienda suelta a mis nuevos pensamientos confusos. Me siento a su lado y él pasa su brazo por mi cintura de todos modos.

—Cierra la boca, Joe —murmura y su mejor amigo solo se ríe.