❝La nueva resistencia❞ ⌊Rookinite⌉〈EDITADA〉

7 | No dejaré que te hagan daño

Rookie e Infinite caminaron por todo Luminous Forest, mientras que Rookie le contaba todo lo que sabía de él, cómo lo amenazó, todo sobre la resistencia y las ilusiones del Phantom Ruby.

—¡Wow! No... no puedo creerlo —balbuceó el chacal, deprimido.

—¿Qué es lo que no crees de todo esto? —interrogó.

—No puedo creer que fui tan cruel con todos ustedes. Eso estuvo... mal.

—Sí... —musitó el rojizo encogiéndose de hombros.

-—Y... ¿no sabes nada sobre mí antes de eso?

—Pues... no.

—Debe haber una razón para todo eso, estoy seguro de que no soy una mala persona, un mal... Eh... ¿Sabes qué especie soy?

—Creo que eres un chacal.

—¿Un chacal? ¿Por qué eso me suena tan familiar? Quizás alguna vez... ¿conocí a otros chacales?

—¿Lo dices en serio? —preguntó sorprendido.

—Sí, creo que estoy recordando algo... —Sujetó su cabeza en un intento de que sus recuerdos regresasen a él, pero no era muy útil. Aquella acción solo le causaba dolor y frustración al chacal—. ¡Agh! ¿Por qué me es tan difícil recordar? Mi memoria está tan borrosa, como si algo en mi mente se hubiese roto...

—¡Igual que el Phantom Ruby! —indicó apuntando la gema.

—¿Crees que esta gema rota tiene algo que ver con mi memoria?

—Es posible. Tal vez Sonic sepa algo sobre esto, pero si te llevo hasta ellos quizá quieran atacar. Después de todo tú casi los mataste.

Infinite se sonrojó y miró a Rookie con cara de enfado al escucharlo pronunciar esas palabras. El lobo lanzó una risa nerviosa.

—Pero no te preocupes, no dejaré que te hagan daño.

—Está bien. Dejaré que un «lobo hipster» me defienda... —admitió sarcástico, mas, en el fondo, estaba siendo honesto.

Momentos luego, Infinite y Rookie se dirigieron en dirección a Sunset Heights.

—Espero que sigan en el refugio. Infinite, trata de pasar desapercibido, no queremos que estas personas te reconozcan.

—¡Pero si yo no conozco a estas personas! —gritó ofendido, llamando la atención, a lo que Rookie tuvo que pasar desapercibido, procurando ocultarse a sí mismo y a Infinite.

—No ahora, pero tal vez fuiste tú el que causo pánico y miedo a todos alguna vez... Nada serio.

«Tengo una mala reputación con gente que ni siquiera conozco...», meditó el bicolor, mientras se acercaban más y entraban al refugio.

—¡Hola! ¿Sonic? ¿Hay alguien aquí? —les llamó el lobo—. Oh, no. Parece que ya se han ido.

—¡Genial! ¿Ahora qué haremos?

—Espera un segundo —le pidió observando curioso hacia un lado del área—, ¿qué es ese brillo de allá? —se preguntó acercándose al objeto—. Es... ¡la Chaos Emerald! ¿Qué estará haciendo aquí?

—¿¡Eso qué importa!? ¡Jamás podré recordar nada! ¡Jamás sabré quién fui en realidad!

En ese instante, la Chaos Emerald y el Phantom Ruby comenzaron a brillar. Era extraño para ambos, pues era algo desconocido y nunca antes presenciado por ellos.

—¿¡Qué sucede!? —gritó el lobo terracota, espantado.

Infinite, por su lado, estaba en un dificultoso trance, con sus ojos bicolor iluminándose, alejándose cada vez de la realidad.

-—Yo... no soy... no soy...

—Infinite, ¿qué te sucede?

—¡No... No soy débil!

Infinite emitió un grito. La Chaos Emerald, el Phantom Ruby y los ojos de Infinite dejaron de brillar mientras el chacal caía al suelo, en obvio estado de semiconciencia.

—No... No soy débil, no soy débil, no soy débil...

—Infinite, ¡reacciona por favor! —le llamó, pues se notaba como el chacal comenzaba a concientizar—. ¡Soy yo! ¿¡Por qué sigues diciendo «no soy débil»!?

—Yo... creo que estoy empezando a recordar. Recuerdo a Sonic, a Eggman, a ¡Shadow!

—¿Shadow? ¿Qué sucede con Shadow? —Se le acercó más, preocupado.

—Él, él me llamó débil, él causó que no quisiera mostrar mi rostro nunca más... hasta ahora.

—Infinite, lo que dices son puras locuras. Por favor, no enloquezcas. Yo... no quiero que seas como antes..., por favor... No te vuelvas cruel otra vez...

Las palabras de Rookie impactaron en Infinite, tanto que causaron que poco a poco él comenzara a reaccionar.

—¿Rookie? ¿Estás... estás bien?

—¡Infinite! ¿Tú estás bien? —Se preocupó, mirando su estado.

—Sí, eso creo... Ahora recuerdo muchas cosas: recuerdo la resistencia, recuerdo que me alié con Eggman, recuerdo cuando cree el sol gigante que casi los mata a todos; pero no recuerdo nada de antes de haber visto a Shadow y... la forma en la cual me atacó, y cómo me llamó...

—¿«Débil»? —se atrevió a preguntar.

—Así fue, ese día me prometí a mí mismo no volver a mostrar más nunca mi rostro a nadie, pero ahora tú lo estás viendo.

—¿Lo siento? —vociferó dudoso.

—No, no te preocupes, no es tu culpa. Desconozco al Infinite que realizó esa promesa y desconozco al Infinite que alguna vez causo terror en los lugareños y... en ti. Quisiera disculparme, pero... siento que no soy la misma persona que hizo eso...

—Tú no te preocupes por eso. Ahora deberíamos buscar a Sonic y a sus amigos. Tal vez ellos sepan que es lo que sucedió y cómo terminaste así.