CLEAVED | Terminada

13. Bomba de información

—¿Las flores?— Val preguntó.

Estábamos en el auditorio, Val ordenaba a las personas para que todo estuviera perfecto esa noche, para el baile de bienvenida. Molly estaba juzgando los tonos de azul que se estaban ocupando, June estaba viendo la comida que iba llegando y yo estaba en medio de Val y de Natalia, tratando de que no se maten entre ellas.

Natalia tenía una lista en la que iba tachando las cosas hechas y de vez en cuando, rodaba los ojos cuando mi amiga decía algo. Según lo que tenía entendido Natalia era de ascendencia chinoamericana y su familia tenía un restaurante chino en el que la comida era deliciosa. No lo sé, supongo que algún día tendría que probarlo.

Como iba diciendo, Val y ella no se llevaban bien, podía sentir el odio en el ambiente. Cada una tenía sus propias razones para querer ser la presidenta del consejo estudiantil. Aunque yo apoyaba más a la rubia, era mi amiga.

Mientras ellas seguían con su habitual rutina, alguien más entró al salón: Tyler.

—¡Hola, bellezas! ¿me extrañaron?

Mi amiga refunfuñó a mi lado.

—¿Qué hace él aquí? ¿tú le dijiste que viniera? —Natalia se inclinó para preguntarle por lo bajo a Val.

—¿Crees que soy tonta? Yo no lo invité. El director dijo que tenía que venir por alguna estupidez del periódico. —Respondió mi amiga.

—¿Por qué tanto odio? —me inmiscuí en su conversación. Ambas suspiraron con frustración al mismo tiempo.

—Él es parte del periódico, con todos los chismes que hay por esos lugares, mi reputación como presidenta podría bajar—me contestó Natalia.

—Nuestra reputación—corrigió Val.

—Ya, pero Tyler no es tan mala persona—defendí, había hablado con él varias veces y siempre había estado dispuesto a brindarme la información que yo necesitaba, él no pedía nada a cambio y eso se lo agradecía. Me alejé de ellas y me empecé a acercar al moreno.—Ty.

Una gran sonrisa se desplegó en su rostro.

—Parisi, ¿qué haces aquí?—y despeinó mi cabello como si fuera una gato.

—Val,—apunté hacia donde mi amiga seguía ordenando a los demás chicos— ¿Qué hacer tú aquí?

—El director pensó que sería buena idea que narrara cómo son los preparativos para el baile en el periódico, así que...aquí estoy—levantó las manos al aire como diciendo "Yay" pero sin muchos ánimos. Lo compadecía, si yo estuviera obligada a ir a un lugar en el que nadie me quiere, no sentiría tanta emoción.—Deberías volver, Val te está disparando balas con la mirada.

—Nah, —me alcé de hombros y comencé a caminar hacia mi amiga—, te está matando con la mirada a ti.

Escuché cómo rio y caminó hacia otra parte del auditorio. Cuando llegué a la altura de las chicas, Val entrecerró los ojos en mi dirección.

—¿Qué?—le pregunté, no entendía por qué estaba actuando tan desagradable. Antes de responderme, me tomó por el brazo y me alejó de Natalia.

—¿Te acuerdas de esa vez que fuimos de fiesta y yo... eh... me besé muy apasionadamente con un chico?

—Me acuerdo, pero ¿eso qué tiene que...? —pronto mis neuronas ataron los cabos— oh... ¿Él?

—Esto... si —ni siquiera se atrevía a mirarme a los ojos— Y lo peor es que sus padres son socios de los míos, y tuve que verlo en una cena, actuando como si nada de lo que... eh... ¿hicimos? pasó. Fue terrible.