Psicodelia

36 6 0
                                    

Lo que pasa es que no estoy listo.
No estoy vivo, pero parezco estarlo.
Estoy cansado.
Respiro, pero ya no vivo.
Lo que pasa es que no estoy listo para seguir solo.
Estoy a nada de ser polvo.
Lo que pasa es que sigo trancado en la misma vieja historia.
Y desperdicio más mi tiempo rogándole a Dios que me libre de ti, qué viviendo mi maldita y miserable vida.
Pobre de mí, pobre estúpido. Casi siento lástima por mí.
Ayer pasó algo que no debería darme gusto.
Ayer te vi en la calle.
Ibas deslumbrando luz en cada paso que dabas.
Llevabas ese lindo collar de besos que alguna vez te regalé. Aún podía verlos. Aún podía sentir mis labios rosando tu perfumado y dulce cuello.
Llevabas esa camisa azul con lunares de amor, lunares fragmentados al sonor de nuestro respirar aquella madrugada.
Y ese pantalón, que me volvía loco, y que ahora que lo veo me vuelve afrodisíaco a más no poder.
Y ese calzado. Que parecía que te quería hacer caminar hacia mí.
Y esos ojos, Dios, esos ojos que me absorben la vida.
¿Y sabés que fue lo peor?.
Qué todo era producto de esta maldita psicodelia.
Lo que pasa es que me estoy ahogando en emociones y palabras reprimidas.
Lo que pasa es que sigo viviendo como si aún estuvieras aquí.
Lo que pasa es que te veo en todos lados, pero nunca estás.
Lo que pasa es que me muero sin ti, y entre más muero, más vida tienes tú.
Como si mi morir fuese tu vivir.
Como si mi morir para ti fuese simplemente una palabra.
Lo que pasa es que me sigues haciendo sentir vivo, incluso si mi sangre ya no corre por mis venas.

Todo acabóDonde viven las historias. Descúbrelo ahora