Capítulo 30.

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NARRA KENDALL.

Se da cuenta de lo que acaba de decir segundos más tarde y reacciona lleno de nervios.

DANIEL: C..Como tu hermano mayor, ya.. ya lo sabes.

Muevo la cabeza.

YO: Si, te he entendido, no te preocupes.

Hace un lado en mi cama y se sienta a mi lado.

DANIEL: No es lástima. -Susurra-

No quiero mirarlo, ni siquiera darme cuenta de que lo tengo a tan poca distancia que sería tan fácil besarlo y confesarle que lo mío no es un amor de "hermanos" ni de amigos y tampoco de paciente.

YO: Te creo, son tonterías que pienso a veces.
DANIEL: ¿Quién te ha metido esa idea en la cabeza? -Pregunta levantando una ceja-

¿Y si le digo qué ha sido su novia? Posiblemente no me crea, ella es su prometida y la creerá por encima de todo.

YO: Nadie, no me hace falta nadie para crearme paranoias. -Me encojo de hombros-

Agarra mi barbilla obligándome a girar la cabeza y mirar sus brillantes ojos.

DANIEL: Nunca me has dado lástima, no por tener una enfermedad tengo que sentir pena de ti.
YO: Haces cosas por mi que ni siquiera mi familia hace, me animas, me sacas de este encierro arriesgando tu trabajo, me traes chocolatinas -Ríe- que bueno, no es gran cosa pero para mí significa mucho, significa que te acuerdas de mi y que vas a estar cuando te necesite.
DANIEL: Y no lo hago por pena ni mucho menos.
YO: Porque me quieres.

Se tensa, tose varias veces mientras pone los píes en el suelo para ponerse en pie e irse con alguna excusa, ya lo conozco lo suficiente como para saber que hará eso.

DANIEL: Tengo que ir a resolver unos asuntos, pero prométeme algo.
YO: De nuevo haciéndome prometer cosas.-Digo quejándome-
DANIEL: Sh, prométeme que vas a estar bien y que no volverás a pensar una cosa así.
YO: Lo prometo.

Mete la mano debajo de mi almohada y saca nuestras fotografías.

DANIEL: Esa no es la cara de un hombre que está haciéndote reír por pena. -Sonríe-
YO: Te creo. -Murmuro avergonzada por mi actitud de niña pequeña-

Alexa entra en la habitación, él pasa la mano por mi rostro y se va guiñándole un ojo a Alexa.

YO: ¿Me explicas?
ALEXA: Yo le dije que viniera, sabía que tu actitud era por algo relacionado con él.
YO: ¿Qué? No habrás sido capaz de decirle nada ¿Verdad? -Pregunto nerviosa, casi histérica-
ALEXA: Que no ¿Por quién me tomas?
YO: Por una loca que quiere conseguir juntarnos. -Ríe-
ALEXA: Cierto.

NARRA DANIEL.

Lo he dicho, he dicho algo que nunca le había dicho a nadie

¿Cómo me siento después de hacerlo? Raro, raro porque nunca había tenido un arrebato así, nunca las palabras habían escapado por sí solas de mi boca como si tuvieran vida propia.

Aprovecho el descanso para comer para enviarle un mensaje urgente a Jesús que dice así:

"Te necesito hermano, ven, no tardes demasiado, es algo urgente"

Y recibo su respuesta después de dos minutos impaciente:

"Ya voy, me has preocupado, llegaré en unos minutos, espérame en el bar, se que es tu media hora de descanso"

Quedo apoyado en la pared, con la mente medio volando por no sé dónde, totalmente perdido, tanto que no soy capaz de encontrarme. Solo algo retumba en mi cabeza buscando una explicación razonable ¿Por qué el primer te quiero de toda mi vida lo ha recibido Kendall? ¿Por qué ella y no Rosanna?

Hasta el último suspiro. ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora