NARRA KENDALL.
Así es él. En cualquier momento capaz de soltarte algo que te ruborice y te haga desear ir más allá de un beso.
YO: ¿Por qué no te conocí antes? -Pregunto sonriendo— Me habría ahorrado tantas cosas.
DANIEL: ¿Cómo cuáles?
YO: Como por ejemplo fijarme en Mark, no sé en qué estaba pensando. -Me rio de mi misma- Era una ingenua que cayó de lleno en sus mentiras.
DANIEL: Me alegro de que no supiera valorarte. Quiero decir, me alegro porque te conocí.
YO: La vida esta llena de coincidencias ¿No? Tuve que perder a alguien que pensaba que sería el amor de mi vida para encontrarte a ti y tú tuviste que dejar Inglaterra para volver.
DANIEL: Casualmente empecé a trabajar en el hospital donde estabas internada y me convertí en tu doctor. Me parecías tan tierna..
YO: Monisima.Empieza a reír. Mueve la cabeza y me coge de la mano.
DANIEL: Sigues siendo monisima.
YO: Perdóname por no contarte la verdad.
DANIEL: No quiero hablar de ese tema, está zanjado, nos hemos prometido no mentirnos nunca más.
YO: Nuestra relación se basa en la confianza.
DANIEL: Exacto.NARRA JESÚS.
Vuelvo del trabajo casi a media noche. Abro la puerta y me doy cuenta de que hay una carta en el suelo después de darle una patada.
YO: Veamos que sorpresa nos llevamos ahora.
Cierro la puerta. Enciendo la luz y me siento en el sofá para leer lo que dice en dicha carta.
CARTA:
Hola. Soy Rosanna, quería agradecerte por tus consejos, me han servido para volver a Inglaterra con mi familia. Espero que me perdonéis por causar tantos problemas y que algún día por alguna razón recobremos el contacto. Esta claro que no conseguimos llevarnos bien desde el principio por mis brotes, mi ego y mi estupidez. No quiero que pienses que quiero manipularte, solo busco agradecerte y pedir disculpas por todo lo que he hecho en estos últimos meses. Dile a Kendall por mi que lo siento y que espero que sea muy feliz con Daniel, al fin y al cabo es lo que verdaderamente me importa, su felicidad. De nuevo gracias por todo.
Un beso: Rosanna.
Parece que ha conseguido entrar en razón pero creo que todavía le queda un largo camino para poder cambiar.
Llaman al timbre.
YO: Ana cariño -Digo sorprendido- ¿Qué pasa? ¿Por qué lloras?
ANA: He discutido con mi hermana.
YO: ¿Quiere echarte de casa?
ANA: No nos llevamos muy bien, como sabes ella es la favorita y yo solo soy la que intenta destacar.
YO: Tú eres mi favorita. No necesitas la aceptación de nadie, solo la tuya, mírame -Le doy un beso- Te quiero, si ellos no saben ver lo increíble que eres ¡Qué les jodan! Yo si, lo vi cuando te conocí y lo seguiré viendo el resto de mi vida.
ANA: Amor..
YO: No pensaba hacer esto así, ni en una circunstancia como esta pero lo siento, necesito hacerlo.
ANA: ¿Hacer qué?Entro en mi habitación, meto la mano debajo de la cama y me acerco a ella con un anillo.
ANA: ¿Qué? -Pregunta emocionada-
YO: Pensaba hacerlo más especial, con ropa limpia y en una cena romántica -Me rio- pero no, prefiero hacerlo ahora.
ANA: Jesús ¿Es lo qué creo qué es?
YO: Quiero que seas mi esposa, quiero compartir mi vida contigo porque te quiero desde que era un adolescente y te seguiré queriendo cuando sea un anciano. Sé que no puedo decidir el futuro y qué pasará lo que deba pasar, pero si se lo que quiero ahora y quiero casarme contigo, que te vengas a vivir definitivamente aquí -Sonrío- claro, solo si tú aceptas.Veo en sus ojos la emoción. Pega un grito, un salto y se abalanza sobre mi.
ANA: Te amo tanto.
YO: ¿Es un si?
ANA: ¿A ti qué te parece? -Pregunta divertida- Te diría que si toda mi vida.NARRA DANIEL.
Paseamos por las calles. Lo ha decidido ella sin importar el frío que hace y creo que merece un capricho más, uno más del los miles que le concederé.
KENDALL: Ya se que te preocupa el frío pero estoy bien ¿No me ves?
YO: Me preocupo porque todavía puedes enfermarte, tus defensas están.. -Me besa. Deduzco que lo ha hecho para callarme la boca-
KENDALL: ¿Puede volver mi novio? El doctor me pone histérica.
YO: ¡Oye!
KENDALL: Estamos en medio de una calle a las doce de la noche, alumbrados por dos farolas -Alzo una ceja- Se que para ti es algo normal pero hacía mucho tiempo que no disfrutaba de algo así.
YO: ¿Trasnochabas mucho?
KENDALL: Volvía a casa por la mañana después de pasar toda la noche fuera de casa.
YO: Que malvada.
KENDALL: Ahora solo quiero disfrutar pero no así, contigo.
YO: Te recuerdo que nos tenemos que poner en camino, tenemos un viaje pendiente, dos en realidad.
KENDALL: Es cierto.
YO: Todo está preparado en el coche, faltamos nosotros.
KENDALL: Estoy lista.NARRA KENDALL.
Me quedo dormida poco después de subir al coche. No he podido dormir nada estos días por la emoción y el cansancio consigue superarme.
••••••
DANIEL: Bonita.Abro los ojos. Creo que ya se ha pasado todo el viaje y no me he dado ni cuenta.
YO: ¿Qué hora es?
DANIEL: Las nueve de la mañana.
YO: Dios ¿No has dormido nada?
DANIEL: Paré a las cinco y descansé hasta las siete. -Pasa la mano por mi rostro- Ya hemos llegado.Miro a mi alrededor. Veo la playa a lo lejos y rio como una niña pequeña.
DANIEL: Me encanta tu entusiasmo.
YO: Hacía mucho que no la veía.
DANIEL: Vamos. Después vamos al hotel.
YO: ¿Ir a la playa ahora?
DANIEL: Si ¿Por qué no?Me convence poniéndome ojitos de bebé. Caminamos hasta la playa y cuando piso la arena él me coge en brazos para llevarme a la orilla.
YO: No lo hagas.
DANIEL: ¿Hacer qué?
YO: Lo que sea que estes pensando.DANIEL: ¿Quieres un baño? -Niego con la cabeza-
YO: ¡Para!
DANIEL: Una...
YO: ¡No! -Exclamo-
DANIEL: Dos..
YO: ¡Para!Pataleo. Él ríe y se sienta en la arena.
YO: Esta fría. -Digo notando el agua en mis pies-
DANIEL: Si.
YO: Eres un idiota, pensaba que ibas a hacer una locura. -Lo empujó-
DANIEL: Aún puedo.
YO: No -Me rio-DANIEL: Esto quería. Quería verte sonreír.
YO: Siento la necesidad de vivirlo todo, de hacerlo ya, sin esperar un minuto más.
DANIEL: Tenemos tiempo.
YO: Yo siento que no es así. -Confieso-
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Hasta el último suspiro. ®
RomansaLa vida de Kendall cambió cuando un día le dieron la peor noticia de todas, la única noticia que consiguió ponerle los pies en la tierra. Su enfermedad la hará valorar todo aquello que nunca valoró. Y sin imaginárselo, también la llevará a conocer a...