Capítulo 53.

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NARRA DANIEL.

El corazón se me rompe un poco más, sabía que no despertaría perdonándome pero no pensaba que me echaría después de estar a su lado sin pegar ojo en toda la noche.

YO: Kendall no puedo irme, soy tu doctor.
KENDALL: Cuando quieres buscas un suplente, búscalo.
YO: No.

Le agarro el rostro.

KENDALL: No quiero que me toques.
YO: Tú no eres una persona vengativa, tampoco eres cruel, no te comportes así conmigo. -Suplico-
KENDALL: Te conté lo que Mark me hizo para que tú no hicieras lo mismo pero tomaste nota y actuaste exactamente igual.
YO: Ya te he explicado porqué lo hice, no quería cargar con la muerte de Rosanna toda mi vida.

Pone cara de dolor, y señala la puerta con el dedo índice.

KENDALL: Ya he escuchado la historia y es increíble que yo conozca a tu novia mejor que tú, sin ni siquiera haber visto la escena sé que no tenía intenciones de suicidarse pero si de amarrarte de nuevo.
YO: Ella no es mi novia, ya no, se acabó porque quiero estar contigo.

Me mira con los ojos llenos de tristeza, juraría que quiere perdonarme, que no soporta esta situación como yo pero su orgullo es demasiado fuerte.

KENDALL: Yo no, ya no.

Me siento frente a ella en una de las sillas más incómodas que me he sentado en mi vida.

YO: ¿No te das cuenta de la injusticia que estás cometiendo? Cometí un error pero todo lo que siento por ti es verdad, nuestra noche juntos fue real -Ella ni siquiera de digna a mirarme-
KENDALL: Quiero ver a mi familia.
YO: Esta bien.

NARRA ALEXA.

Hemos llegado sobre las siete de la mañana y no nos hemos movido de aquí, esperamos poder ver a Kendall pronto.

DANIEL: Kendall está consciente pero no podéis verla hasta dentro de unos veinte minutos.
MARTA: No importa, esperaremos lo que sea necesario.
DANIEL: Están ayudándola a asearse.

Su cansancio es notable pero la tristeza lo es más, suena raro, pero parece que se le sale por los ojos.

RAÚL: ¿Podremos entrar juntos? -Pregunta él señalando a Marta-
DANIEL: Si, después podrán entrar Alexa y Manuel. -Muevo la cabeza-
RAÚL: Perfecto.

Detengo a Daniel antes de que vuelva a entrar.

YO: Gracias por estar con ella y siento haberte tratado tan mal. -Susurro-
DANIEL: A veces las cosas buenas que haces no son suficientes cuando hay un error por medio, aunque el error sea solo uno y las cosas buenas miles. -Dice, da un paso hacía atrás y entra dentro-

Manu pone la cabeza en mi hombro.

MANU: ¿Qué habrá pasado? -Pregunta-
YO: No lo sé, supongo que la reacción de Kendall al verle no ha sido buena. -Respondo convencida- La conozco.

NARRA KENDALL.

Estoy tan débil que ni siquiera puedo mantenerme en pie sola. Camino de vuelta a la cama perseguida por el oxígeno, soy consciente de que si por accidente me lo saco de la nariz podría morirme.

ENFERMERA: No puedes estar más tiempo de pie, te agotas, tu estado aún no es leve, es grave, debes permanecer tumbada.
YO: No me gusta permanecer tumbada.
ENFERMERA: Si no quieres morirte quédate tumbada. -Dice abriéndome la cama-

Daniel me observa desde un cristal, se supone que en estos casos yo no puedo verlo a él pero él a mi si, pero parece que no es así, nos vemos mutuamente. Desvío la mirada, cuando por fin consigo tumbarme con pese a los dolores cierro los ojos para no tener que verle.

ENFERMERA: Perdona que me meta -Susurra- pero deberías valorar todo lo que él hace por ti.
YO: No sé de que me hablas.
ENFERMERA: Se sobre vosotros y por supuesto que no sabes de que te hablo, mientras que tú estabas tan grave que ni siquiera podíamos retirarte los calmantes él ha estado como loco haciéndote pruebas, ha estado aquí horas y horas pendiente de ti -Trato saliva, mi corazón va a estallar- y ha pasado toda la noche sin dormir asegurándose de que no te ocurría nada.
YO: No sabes nada. -Digo con un tono muy frío-
ENFERMERA: Tienes razón, pero si se lo que he visto y veo.

Sale de la habitación. De nuevo estoy con una horrible ropa de hospital, tal como la primera vez que me internaron, un dejavú bastante espantoso.

Escucho la voz de Daniel cuando la enfermera se aleja de mi para irse, él sin embargo ha entrado en la habitación.

DANIEL: Me ha dicho Clara que has sentido dolores.
YO: Si.
DANIEL: No tenía que haberte dejado levantarte.
YO: Estaba hecha un desastre.
DANIEL: Tu vida está en riesgo y no permitiré que vuelvas a levantarte te pongas como te pongas.

Abro los ojos, él sabe perfectamente como odio las ordenes y yo sé que a él le encanta ordenar.

No digo nada, solo lo miro pero creo que está suficientemente claro lo que quiero decirle con la mirada "que te den".

DANIEL: Dejaré entrar a tus padres.
••••••
Minutos después entran mis padres, mi madre me abraza y mi padre me agarra la mano.

MAMÁ: Hemos pasado mucho miedo.
PAPÁ: Si, pensábamos que te perderíamos.
YO: Estoy aquí, por ahora creo que no me voy a morir.
MAMÁ: Pequeña.. no digas eso, eres fuerte, yo confío en ti.
YO: Dependo de una enfermedad mamá, dependo de lo fuerte que recaiga y ahora dependo de esto para poder respirar.
MAMÁ: El doctor me ha dicho que te lo retirará cuando la gravedad pase.

YO: Mamá, abrázame ¿Si?

Ella concede mi deseo, me abraza con fuerza como cuando era pequeña y me hacía alguna herida en las rodillas, ella siempre me levantaba, me abrazaba y me susurraba que todo estaría bien.

PAPÁ: Tenemos que salir para que entre tu hermano y Alexa, pero cuando vuelva a ser la hora de visita volveremos.
YO: Esta bien, no os preocupéis.

NARRA DANIEL.

Sus padres salen de la habitación.

MARTA: ¿Por qué le cuesta tanto hablar? -Pregunta preocupada-
YO: Porque le cuesta respirar y se cansa rápido, pero poco a poco todo volverá a la normalidad. -Contesto-

Los acompañado hasta la puerta e indico a Alexa y Manu que pueden entrar. De nuevo Mark está fuera, esperando saber algo de ella y entrar a verla.

ALEXA: ¿Tenemos qué ponernos mascarillas?
YO: Si, la enfermera os dará lo necesario.

NARRA KENDALL.

Alexa y mi hermano me abrazan justo cuando entran, hablan sin parar de lo preocupados que estaban, hasta me hacen reír.

ALEXA: Pasé un miedo horrible cuando vi sacarte en camilla, fue espantoso.
YO: Pensabas que me moriría. -Digo con dificultad-
MANU: Yo estaba seguro que ibas a mejorarte. -Deja un beso sobre mi frente y coloca la cabeza en mi hombro-
YO: Aún estoy en peligro.
ALEXA: Sh, pero te pondrás bien.

YO: ¿Es cierto qué no se ha despegado de mi? -Pregunto lanzando la pregunta que tanto me carcomía por dentro-
ALEXA: Si, ha estado desde que te ocurrió hasta ahora, casi sin dormir, saliendo y entrando.
YO: Ah. -Susurro-
ALEXA: Ha demostrado que si te quiere, me molesta admitirlo después de lo que ha hecho pero te quiere.
YO: Si me quisiera no lo habría hecho.
ALEXA: Pero.. está bien.

NARRA DANIEL.

Salgo fuera para tomarme un café, Mark me persigue hasta cansarme y giro para hablar con él.

YO: ¿Qué?
MARK: Déjame entrar a verla.
YO: No ¿Algo mas? -Pregunto muy serio-
MARK: Ella se alegrará, no me echará ni se alterará. -Asegura muy convencido y yo paso los dedos por mi barbilla-
YO: Estoy seguro de lo contrario, no vas a poner la vida de mi paciente en peligro.

Acelero el paso para deshacerme de él.

MARK: Tú no lo entiendes, no tienes ni idea de lo mucho que la quiero.

Paro en seco, me giro y termino acercándome a él.

YO: Te puedo asegurar, jurar e incluso demostrar que no la quieres tanto como yo la quiero, yo he estado a su lado y no he huido como hiciste tú. -Digo casi sin pensar las consecuencias de lo que acabo de decir-

Hasta el último suspiro. ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora