Capítulo 6.

11.3K 716 98
                                    

NARRA KENDALL.

Lo vuelvo a sentir. Una explosión en mi interior que recorre hasta el centímetro más escondido de mi cuerpo ¿Y cómo no sentirlo? Si me mira con esos ojos marrones y descoloca todo mi universo.

DANIEL: ¿Estas bien?

Vuelvo a la realidad un poco avergonzada y asiento con la cabeza sin pronunciar palabra, porque aunque quisiera no podría.

DANIEL: Sabes porque estoy aquí ¿No?
YO: Para echarme una bronca. -Ríe-
DANIEL: No, no es para tanto.

Entro en el baño, él me espera fuera y me lavo la cara unas quince veces antes de salir. Tengo ojeras y estoy pálida..

"Kendall, deja de perder el tiempo pensando gilipolleces" me digo a mi misma.

NARRA DANIEL.

Hablo con su amiga Alexa hasta que ella sale del baño, con el pelo recogido y sin la chaqueta que hace apenas unos minutos traía.

YO: Te he visto muy furiosa.
KENDALL: No tiene importancia.

Suelto una carcajada.

YO: Bueno, si tu no le das importancia a los chicos que te traen flores y terminan con el ramo estampado en la cara.. no tendrá importancia. -Digo gracioso-

Ríe, mueve la cabeza y se cruza de brazos.

KENDALL: Vamos, échame la bronca.
YO: Que no pesada, me ha sorprendido la fuerza que tienes.
KENDALL: La rabia consigue hacer mucho.
YO: Ya entiendo, un ex novio arrepentido.
KENDALL: Algo así. -Admite-

Saco el bolígrafo y mi libreta.

YO: ¿Debo recetarte algo para el mal de amores? -Pregunto y ella ríe el doble-
KENDALL: Si me recetas un pesticida para que no se acerque a mi, perfecto. -Responde y esta vez soy yo quien ríe-
YO: Pesticidas no me quedan, lo siento.

Ambos reímos, es increíble la conexión que tenemos, creo que vamos a ser muy buenos amigos aparte de doctor y paciente.

Entran sus padres, yo guardo la libreta en mi bolsillo y la señalo con el dedo índice.

YO: Ten cuidado con la fuerza.
KENDALL: La tendré, no se preocupe general. -Pone la mano en su frente-

NARRA KENDALL.

Sale de la habitación tras hablar unos segundos con mi madre.

PAPÁ: ¿Y esa sonrisa?
YO: ¿Qué?

Escucho la odiosa risa de Alexa, esa risa que grita "Lo sabía".

MAMÁ: Es un doctor maravilloso.
YO: Si, es muy buena persona.
MAMÁ: Y además encantador.

Alexa pega un salto sentándose conmigo en la cama y pasa la mano por mi espalda.

ALEXA: Increíble.
YO: Cállate. -Frunzo el ceño-
ALEXA: Tú no has visto lo que yo si.

Me deja confusa, pero termino ignorándola porque no dice más que tonterías y prefiero mantenerme al margen de lo que sea que está pensando.

NARRA DANIEL.

Acabo mi jornada y regreso a casa para ver a Rosanna, estar con la familia y descansar un poco.

JESÚS: ¿Qué tal en tu primer día?
YO: Bastante mejor de lo que creía.
ROSANNA: Entonces estás muy contento con tu nuevo trabajo ¿No? -Pasa las manos por mi cuello-
YO: Muy contento.

Dejo un beso en sus labios. La noto extraña, como si no sintiera el mismo entusiasmo que yo ahora que por fin estoy alcanzando mis metas.

Me doy una ducha, al salir ella me espera en la cama con el móvil.

Hasta el último suspiro. ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora