Capítulo 105.

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NARRA KENDALL.

Dejo caer la cabeza en su hombro. Su mano desliza por mi hombro y suspira.

YO: No quería estropear este momento.
DANIEL: No quiero que vuelvas a hablar así, no quiero que vuelvas a ser una persona negativa. -Dice con la voz temblorosa- No podría vivir sin ti.
YO: Quiero quedarme contigo, no creas que soy negativa.. solo que.. a veces me siento así.
DANIEL: Te queda mucha vida por delante y toda la vas a vivir conmigo, juntos.
YO: ¿Eso piensas?
DANIEL: Estoy seguro de ello.

Pasa los dedos por mis mejillas.

YO: Quiero vivir.
DANIEL: Vas a vivir, no tengas prisa.
YO: Tengo prisa porque he estado muchas veces al borde de la muerte y eso me ha hecho replantearme toda mi vida. Si no hubiera sido por la médula quizás me habría ido del hospital para morir en un lugar como este.
DANIEL: Kendall.. no te lo hubiera permitido.
YO: ¿Es qué tú desearías morir en una habitación de hospital rodeada por vías? Es horrible morir así.
DANIEL: Estarías rodeada de las personas que te aman.
YO: Y aun así no seria feliz. -Alzo la mirada- Dani, la enfermedad me obligó a poner los pies en la tierra y me hizo valorar todo aquello que no valoraba, eso incluía mi vida, mi libertad -Pongo las manos en su rostro- Se que no lo entiendes, que es complicado y casi de locos pero tiene lógica, para mi la tiene. No quería morir así, preferiría morir aquí, sentada en esta playa mirando el mar, en paz.
DANIEL: No quiero seguir hablando de la muerte. -Dice serio. Se pone en pie y mete las manos en sus bolsillos-

YO: Perdóname.
DANIEL: ¿No entiendes qué de tan solo pensarlo me vuelvo loco?
YO: Lo sé pero fuiste consciente de ello cuando te enamoraste de mi, cuando me preferiste antes que a una mujer saludable como Rosanna.
DANIEL: Tenía esperanza -Asegura- tengo esperanza.

Me pongo en pie. Pego un salto y me subo en su espalda.

YO: Lo sé -Susurro- y te quiero más que a nada por ello.
DANIEL: ¿Dejamos el tema?
YO: Paséame por la orilla.
DANIEL: ¿Crees qué soy tú trasporte?
YO: ¿No? -Bromeo cortando la tensión que hace segundos podía acuchillar-

Corre por la playa conmigo en su espalda, haciéndome creer que me va a lanzar al agua en cualquier momento.

YO: ¡Para! -Rio-
DANIEL: ¿No querías un paseo?
YO: Un paseo tranquilo. Que la gente nos envidie por ello -Le doy un beso en el cuello-

(...): ¿Sois pareja? -Pregunta una señora-
DANIEL: Así es.
(...): ¿No eres demasiado pequeña?
YO: ¿Y usted demasiado entrometida? ¿No la han enseñado a no meterse donde no la llaman o qué? -Ataco molesta-
(...): No pretendía..
YO: Pues lo has hecho. No tiene porque juzgarnos.

DANIEL: Hey -Gira la cabeza- Tranquila, lo que digan no me importa.

Sigue caminando dejando a la señora atrás.

YO: Entrometida.
DANIEL: Son solo opiniones bonitas, existen personas que no nos aceptarán.
YO: Pues que se jodan.
DANIEL: Exacto. -Sonrío-
YO: No quiero que tú te sientas incómodo por comentarios como ese.
DANIEL: No me importa, te quiero independientemente de la edad que tengas. Además, para mi eres perfecta.
YO: A mi me gusta aprender de ti cosas que no podemos decir al mundo.

Gira la cabeza sorprendido por mi comentario y le doy un beso.

YO: Nosotros somos felices mientras que ellos nos miran mal.

NARRA ANA.

Jesús se da una ducha mañanera, hoy es su día de descanso y hemos decidido pasarlo juntos.

JESÚS: Me gusta tenerte aquí, despertar contigo.. -Dice desde el baño-
YO: A mi también, ahora tenemos la casa para nosotros solos.
JESÚS: Y no sabes cómo me alegro. -Ríe-

Encuentro algo en uno de los bolsillos de su uniforme. Una carta de Rosanna.

Sale del baño secándose el pelo con la toalla y se da cuenta de que tengo la carta en las manos.

JESÚS: Me la dejó ayer debajo de la puerta.
YO: Vaya, está muy agradecida.
JESÚS: Si, está dispuesta a cambiar y se ha marchado. Creo que nos hemos quitado un peso de encima.
YO: También lo creo pero no me gusta que tome confianzas.
JESÚS: ¿De verdad estás celosa? Amor, hace años que estoy loco por tus huesos.
YO: Ya, pero Rosanna es una psicópata, obsesiva y bipolar.
JESÚS: ¿Y?
YO: Y podría obsesionarse contigo.
JESÚS: ¿Y?
YO: Y querría conquistarte.
JESÚS: ¿Y?
YO: ¡Deja de decir y!
JESÚS: Es para que te des cuenta de que aunque lo intente, voy a seguir comprometido contigo, viviendo contigo y enamorado de ti ¿Qué más da? Además, solo la he ayudado a darse cuenta de que estaba cambiando por mal camino.
YO: Eres una persona maravillosa.
JESÚS: Te quiero pequeña.

NARRA KENDALL.

Entramos en nuestro apartamento. Él se quita la ropa y entra en el baño para darse un baño. Pido el desayuno al servicio de habitación y me siento en la cama. Me siento cansada, débil y un poco mareada. Parece que tengo un poco de flato.

DANIEL: Mi niña.
YO: Dime.
DANIEL: ¿Puedes pasarme una toalla?

Me pongo en pie. Camino hacía el baño y por debilidad debo apoyarme en la pared.

DANIEL: ¿Kendall?
YO: Voy, estaba.. mirando el móvil.

Consigo recobrar la compostura y darle la toalla como me ha pedido.

YO: He pedido el desayuno, no tardes en salir.
DANIEL: No tardaré, solo cinco minutos más.
YO: Ya me conozco esa excusa Oviedo.

Sonríe. Me lanza un beso y cierra los ojos después de dejar la toalla a un lado. Espero sentada al borde de la cama que llegue el desayuno.

DANIEL: Casi me quedo dormido.
YO: Lo había supuesto. -Se tumba a mi lado- ¡Estás mojado!
DANIEL: Lo sé -Ríe-
••••
Al fin llega el desayuno. Lo pongo sobre la cama.

DANIEL: ¿No comes?
YO: ¡Si! Estoy hambrienta.

No es cierto pero quiero hacerle creer que todo está bien, sé que dije nada de mentiras ni ocultaciones pero está tan feliz.

DANIEL: Creo que hoy debemos quedarnos a descansar.
YO: ¿Estas proponiendo algo?
DANIEL: Tal vez.

Me tumbo sobre su pecho porque me siento protegida en el.

DANIEL: Hey ¿Qué pasa?
YO: Nada, todo está bien. -Susurro- Solo quiero tumbarme en el pecho de mi hermoso novio.

Miento. Estoy apunto de romper en llanto pero contengo con todas mis fuerzas las lágrimas y actúo como si nada.

Hasta el último suspiro. ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora