En un gran instituto, que lleva por nombre Kisetsu, las clases cursaban normalmente. Con estudiantes enfocados en sus clases, y dando lo mejor de sí, bueno, al menos para la mayoría.
Llegó la hora del almuerzo, momento en el cual todos se tomaban un descanso y aprovechaban para comer, ir al baño o simplemente vagar por algún lugar.
-Oigan, ustedes tres - Alguien llamó a un pequeño grupo que se encontraba por casualidad pasando por los alrededores -¿Podrían ayudarme a llevar esto al salón de ciencias? - Preguntó mientras señalaba unas cajas que estaban detrás suyo.
-¿¡Porqué tendríamos que ayudarte vie- -Le fue interrumpido al feroz chico de ojos verdes.
-¡Inosuke no seas así!-Regañó un chico con ojos carmín. Que le tapó la boca para luego dejarlo ir, mientras le sermoneaba. Y a un lado de ellos estaba un chico rubio observando detrás del profesor -Ah disculpe, sí podemos - Se dio cuenta de lo que había hecho, y le respondió con un tono servicial.
-Chicos, ¿Me ayudarán? - Les dijo mientras veía de reojo a Inosuke molesto y a Zenistu quien sólo se limitó a asentir.
-¡Lo que sea! ¡No puedes con esto todo tu sólo, así que siéntete honrado de que el Gran Inosuke te preste su ayuda! - Señaló con aires de superioridad.
-Claro claro, entonces vamos. Toma estas - Fue repartiendo las cajas de dos. Dos para sus amigos y para que no fuese mucho peso para ellos, Tanjiro cargó una tercera.
-Muchas gracias jóvenes. De verdad me salvaron de esta-El profesor agradeció gentilmente.
Todos llegaron al salón de ciencias y fueron dejando las cajas con cuidado en un mesón que había en el lugar.
-Entonces, ya nos vamos - Tanjiro se despidió en nombre de sus dos amigos, para dirigirse de nuevo a su aula de clases.
-Pero que chico más servicial - Murmuró para sí mismo mientras les veía irse. -Interesante-
El trío entró en el salón, aún no habían tocado el timbre para indicar el final del receso, cuando se fijan en que los compañeros de su clase estaban arrinconados en una esquina del salón, y se veían temblando.
-Que esta... Sucediendo...? -Escupió Zenistu con su característica voz temblorosa y llorona.
En ese momento uno de sus compañeros señala una parte de la pared, que se encontraba detrás de ellos.La razón de su temor... Era...
La gente comúnmente enfrenta problemas, ya sea algo tan simple como perder un lápiz hasta la preocupación de tener una deuda por pagar.
El punto es que los problemas son una parte de nuestra vida.
El asunto es diferente cuando cuando se tratan de insectos, o mejor dicho cuando se trata de un bicho en específico, este es uno que puede sobrevivir a un bomba nuclear, sí, ese bicho infernal, la cucaracha.
Y así era, uno de esos bichos se había colado dentro de nuestro salón, y por supuesto a nadie pero a nadie les agradaban esas cosas, y el miedo que generaban era extremo.
Al voltear la mirada nuestros ojos se fijaron en la cucaracha que nos estaba viendo igual.
Al instante de escucharon con quejidos de Zenistu, quien no dudó en esconderse detrás de Tanjiro.
-No es que tenga... Miedo... Ese bicho no es nada contra mi.. - Inosuke habló, aunque su cara y cuerpo decía lo contrario. Al igual que Zenistu se escondió detrás del chico de cabello vino.
-Tanjirooo, haz algooo- Chilló Zenistu a unos de sus costados.
-¡A-así es! Vamos Monjiro haz algo! - Gritó Inosuke al otro costado.
-¡Vale vale! ¡Y es Tanjiro!- Respondió a los lloriqueos de sus amigos, junto a sus compañeros de clases.
"¿Porqué era yo el que tenía que hacer esto?"
En la mente del joven Tanjiro cruzó, esto le recordaba cuando sus hermanos le llamaban para que matara a algún bicho.
Y no, no es porque Tanjiro no le tenga miedo a esas cosas, de hecho, les tenía un pavor horrible. Pero ¿qué más da? Era parte de su responsabilidad como hermano mayor.-¿Alguien tiene algún tipo de periódico o algo para matarla? - Preguntó Tanjiro, recibiendo en sus manos el zapato de Inosuke, hasta cierto punto le causó gracia lo miedoso que puede llegar a ser su amigo. -Gracias -
Y luego de poder tomar todo el valor del mundo, aplastó al bicho con el calzado entregado.
-¡¡GRACIAS!! ¡¡MUCHAS GRACIAS POR SALVARNOS!! -Se escuchó al unísono en todo el salón. Todos sus compañeros le agradecieron correctamente, llegando a darse un abrazo grupal, haciendo que todos se cayesen.
Y así continuó durante unos minutos, hasta la abrupta entrada de un nuevo profesor al aula.
-¡¡Buenos días jóvenes!! ¡Mi nombre es Kyoujuuro Rengoku, y seré su profesor de historia!- Aquel tipo de cabellos rubios y rojos captó la atención de todos y todas en un segundo, bueno, antes de eso, primero queda recalcar, el entusiasmo con el cual se presentó. Era un poco aturdidor.
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🔆Kisetsu: Temporada 🔆
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Días Recurrentes | Kimetsu No Yaiba AU Escolar |
Short StoryCortos sobre la vida diaria de Kamado Tanjirō y conocidos, en sus días de Academia. Universo alternativo sobre el manga y anime Kimetsu no Yaiba. Personajes pertenecientes al mangaka Koyoharu Gotōge.