Días Recurrentes | Kimetsu No Yaiba AU Escolar |

🌌🌠|Capítulo 16|La Mejor Casualidad |🌠🌌

Se dicen que las buenas casualidades duran de por vida, y eso quizás pueda ser cierto.

Las años van pasando y junto con ellos las personas.
Pero un sentimiento tan profundo e inexplicable como el amor que dos personas se tienen mutuamente, ni los años, siglos y milenios podría siquiera dañarlo.

Así mismo es la relación de cierta pareja, que empezaron como cualquier otra. Gracias a una simple casualidad, se conocieron y desde allí, sus vidas se entrelazaron y se volvieron uno.

Hace varios años una historia de amor nació.
Que se desarrolló en la secundaria, un amor jovial y vívido.

El viento corría entre las ventanas de aquel instituto, era un día soleado y muy fresco.
Todos estaban animados y a gusto con el ambiente.

—Hey Tanjuro, te toca a ti sacar los baldes de agua —Una persona habló mientras le entregaba al mencionado las cubetas.

—Ajá, ya entendí —De mala gana respondió levantándose de su asiento y yendo a cumplir el encomendado.

Aquel joven de cabellos rojizos caminaba entre los pasillos del segundo piso, estudiaba actualmente 2do de secundaria.
En un fugaz descuido, al tropezarse, el balde de agua que cargaba se soltó de sus manos y cayó por la barandilla.

No bastó mucho para que éste mismo cayera al suelo. El problema fue que al caer, el agua cayó en una estudiante que por desgracia pasaba por allí.

El joven rápidamente corrió al primer piso, al ver todo el desastre que había ocasionado por un accidente, dudaba en sí mostrar su cara o no.

La chica se quedó allí parada, apenas podía procesar lo que le había sucedido.
El chico tan solo se limitaba a ver desde un rincón, escondiéndose detrás de una pared,  luego se armó de valor y fue.

—¿Hey... Estás bien? —Algo dudoso preguntó, acercándose a la joven que estaba totalmente empapada.

No recibió respuesta así que decidió tocar su hombro delicadamente.
No tardó en escuchar un casi inaudible sonido, parecía como si estuviera.. ¿¡Llorando!?
Reaccionó alarmado y se posicionó en frente de la más baja.

—¡Hey hey! ¿¡Estás llorando!? —De nuevo preguntó.

—Mi... nuevo uniforme... Está arruinado.. —Un leve sollozo se escuchó por parte de ella.

Tanjuro se apresuró en sacar un pañuelo para poder secar las lágrimas de la chica, que no se contuvo en soltar su llanto.
Por suerte nadie pasaba por los alrededores.

El chico la guió a un asiento cerca de allí y le buscó una toalla, después de todo era su culpa.
Luego después de que se calmaron las cosas, Tanjuro se explicó.

—.. Y entonces eso fue lo que ocurrió, de verdad lo siento demasiado — Casi en modo de súplica estaba

—Oh.. Con que un accidente fue.. —La chica por fin pudo captar todo. Con el pañuelo prestado se secaba los restos de lágrimas, ahora que lo pensaba, estaba avergonzada, después de todo ese espectáculo ¿Quién no lo estaría? —¿Podría saber tu nombre? — De manera algo tímida preguntó.

El chico por unos momentos dudó si en dar su nombre, ¿Y que pasaba si era de una familia rica? ¡Luego su vida podría estar en peligro por un  simple accidente!