Pack Navideño 3/3 - Visita al pasado.

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"Si no fuese sólo un sueño, ¿Aún me creerías?"

Cada vez que cierro los ojos veo una horrible imagen. Alguien está frente a mí muerto, su cuerpo está en proceso de descomposición hasta el punto de oler espantoso y que los gusanos e insectos se apoderen de él. Pero no es sólo cualquier persona la que descansa fallecida, no para nada, es mi hermano. 
¿Por qué tengo que ver tal imagen cada vez que estoy por dormirme? ¿Acaso he hecho algo mal y estoy siendo castigado? ¡Pero lo juro! Toda mi vida he actuado honestamente, entonces ¡¿Por qué demonios tengo que ver a mi hermano muerto cada vez que mis párpados caen?!

Esta horrible pesadilla ha estado en mi mente desde que cumplí trece años, no sé exactamente cómo comenzó a pasar esto, pero quiero que ya se termine. Por suerte puedo pretender que todo está bien, mi familia está bien, mi hermano está bien, yo estoy bien. 

No puedo decirle a alguien más sobre esto, seguro serían los mismos comentarios: "Em...Ignora eso, sólo es una pesadilla y vuelve a dormir. Todo estará bien". Pero aún no sé como omitir "eso" de mi subconsciente, yo sólo quiero dejar de pensar en eso y sumirme en un profundo sueño, descansar física y mentalmente.

Oh no...de nuevo tengo ojeras bajo mis ojos, si alguien ve esto seguramente se preocupará. Vamos a taparlo con algo de maquillaje de mi mamá, seguro nadie lo notará.
Estamos en épocas de festividad navideña, recuerdo que desde niño he esperado esta época tan ansiosamente, pero mírame ahora, no puedo cerrar los ojos y ni siquiera puedo disfrutar como normalmente lo hacía.

—Mui, ¿Estás bien? Haz tardado mucho en el baño— Suavemente preguntó alguien al otro lado de la puerta.

—Si hermano, ya salgo, no tardo—Respondió rápidamente terminando de aplicar la base a sus ojeras.

Umm, no dijo nada más. Supongo que se fue a su cuarto, debería hacer lo mismo.

Sentir la suavidad de la almohada es una de las cosas más placenteras del mundo, el clima frío es lo mejor para poder conciliar una buena siesta.
Por no poder dormir correctamente he desarrollado insomnio, por lo cual me dificulta dormir por las noches, sumado a eso la pesadilla recurrente. ¿Estaré condenado a marchitarme lentamente hasta morir?

Mis ojos no lo aguantan más y se cierran, siento que quizás puedo dormir esta vez.
Erróneo.

「El "mu" (無) en tu nombre significa "nada", así que no pienses que sirves para algo. Así que déjalo」

Esa es la voz de Yui, pero por qué suena tan...¿molesta?
¿Estás enfadado conmigo? ¿Qué te hice para que te enojaras?
Esta bien, no diré nada más que te moleste así que por favor quédate tranquilo.

En un parpadeo todo cambió.
Mi hermano no estaba molesto, no estaba feliz...estaba muriéndose.

「Dioses, si es que existen, por favor protéjanlo. El castigo lo recibiré yo...sólo no dejen que alguien lo lastime...Por favor」

Espera, ¿De qué estás hablando hermano? No hiciste nada malo...¿Por qué estas así?
Incluso si quisiera decir eso, las palabras no salían, un nudo en mi garganta evitaba que dijera algo. Duele, duele mucho.

No puedo hacer mucho, tan solo sostener tu mano y esperar a que todo esto sea una pesadilla. Que nada de esto sea real y que vivamos felices, ambos, junto con nuestros padres. Que no des tu último suspiro aquí en esta fea cabaña deteriorada.

「Muichiro. No te lo dije, y me arrepiento, pero el "mu" (無) en tu nombre no significa "nada". Es el "in" de "infinito" (無限) Así que perdóname, por ser un mal hermano...por molestarme contigo por cada cosa que hacías...por rebajarte a ser una basura como yo...Lo lamento, Muichiro」

Y como vino, se fue. Ya no había vida en su cuerpo, tan sólo quedaba pura carne.

—Yui...Yuichiro...¡Yuichiro!— Incluso si seguía dentro de ese sueño, llamaba a su hermano con fuerza fuera de él.

—¡¿Mui?! ¿¡Qué sucede!?— Rápidamente acudió al llamado de su hermano, entrando bruscamente a su cuarto, viéndolo retorcerse en la cama, apretando las sábanas y desbordando lágrimas.

—Yui...No mueras...—Murmuraba, aún en un estado inconsciente.

—Mui...Despierta, vamos ya. Me estás preocupando— Habló el mayor con un tono serio, pero obviamente preocupado por saber el estado de su hermano.

Siento que alguien me llama...Que cálida voz.

Quiero despertar, quiero ver a mi hermano vivo y salvo. Quiero...
Sin darme cuenta abrí mis ojos y lo primero que vi fue la figura de mi hermano, con un rostro diferente al usual.

—¿Yui..? ¿Eres tú..?— Confundido el menor quiso asegurarse de que estaba despierto, que no era un sueño.

—¿Quién más va a ser? No me estés llamando a gritos en la noche—Riñó de mala gana mientras se sentaba a un lado de la cama.

—Lo siento...Parece que tuve una pesadilla— Se disculpó tomando sus sábanas y envolviéndose en ellas— Bueno, volveré a dormir.

—No me vengas con eso— Interrumpió el mayor quitando las sábanas de encima —Sé que no puedes conciliar el sueño fácilmente y tienes serios problemas en cuanto a todo lo que refiere a dormir.

—¿Yui? De qué estas hablando, no es nada— Intentó mentir pero no pudo.

—Sé que no puedes dormir y tienes ataques de ansiedad con frecuencia— Su tono no era serio, era más preocupado— Tienes insomnio y todo a causa de una cosa, esa pesadilla constante. Has sufrido con eso desde los trece ¿No? Te he visto con distintos cambios de humor, pero no pude decirte nada. ¿Soy un hermano adecuado para ti? Uno que ni siquiera es capaz de cuidar a su hermano menor cuando más lo necesita, vaya mierda que soy.

—¡No! ¡No digas esas cosas sobre ti mismo!— Esta vez era el menor quien interrumpía— No es tu culpa, pero tampoco es la mía...Ah...no sé ni qué es lo que estoy diciendo.

—Mui, mírate. Estás sufriendo en silencio...¿Por qué lo haces?—

—Es sólo que...no sabía cual era la opción en ese momento. Estaba asustado, de todo. En mi pesadilla te veía muerto, tantas veces que hasta pensaba que se haría realidad. El dolor, podía sentirlo en todo mi cuerpo, mi mente, todo dolía y no sabía cómo decirlo. Entiéndeme—

—Lo haré, así que por favor, dime las cosas que te estén molestando de ahora en adelante. Por favor—

El sentimiento de presión que había en mi pecho, poco a poco va desapareciendo. Puedo respirar correctamente y me siento mejor mentalmente.
Aún luego de decir todo eso, todavía estoy algo inseguro sobre "eso".

—Mui—

—¿Si?—

—Sólo fue una pesadilla, así que no tienes nada de lo qué preocuparte. Tu querido hermano no se va a ninguna parte y está frente a ti, vivo— 

—Sí...me alegra, me alegra demasiado que fuese sólo una pesadilla, que sólo me haya hecho pasar un mal momento— 

Las cosas que antes me hacían sentir mal y no podía decirlas, ahora salían con facilidad. Era tan refrescante que sentía que estaba siendo liberado de algo grande.

—Vayamos a ver una película a la sala. Están dando una de tus películas animadas preferidas, ¿Vienes?—

—Claro, ¿Cuál es?— El menor se levantó de la cama, tomando sus sábanas para irse a la sala, después de todo hacía mucho frío.

—De hecho, están dando una maratón de películas de Disney—

Vaya, hermano. Me conoces tan bien, sabes que incluso aunque tenga catorce años sigo siendo el mismo niño de siempre. Aquel que sólo es un llorón y se aferraba a ti cuando era molestado. Aquel que llora incluso si las escenas no son lo suficientemente conmovedoras y luego cae en un resfriado por días. Aquel que has cuidado con detenimiento.

Nos fuimos de mi cuarto a la sala, la TV estaba encendida. Nos pusimos cómodos en el sofá que estaba al frente y nos pusimos a ver las películas, como antes cuando eramos más niños.

—Yui—

—¿Mmh?—

—Feliz navidad—

—¿Y a qué viene eso ahora?—

—No lo sé, sólo quise decirlo—

—Mui—

—¿Si?—

—Feliz navidad a ti también—

Quizás sea por lo oscuro de la sala que no pude ver claramente, pero creo poder asegurar que vi a mi hermano sonreír. Ya que pocas veces sonreía me sorprendió, pero por lo menos puedo estar seguro de que se siente igual.
Ahora, no, desde siempre he tenido un buen hermano. Y eso nadie me lo puede contradecir.

Oh no, estoy por dormirme a mitad de la película. Tengo miedo de dormir, pero esta vez...sí creo poder tener un dulce sueño.

Días Recurrentes | Kimetsu No Yaiba AU Escolar |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora