SuperM | TaeTen

capítulo 22

NARRA TEN

—Tennie...Tennie~— susurró una voz tan conocida, mientras me acariciaban el cabello de forma suave— tienes que despertar, malcriado.

Arrugué mi entrecejo en descontento y negué con la cabeza— un rato más Tae... Porfis~— susurré con voz ronca, aun sin poder abrir bien los ojos.

—hace una hora me pediste lo mismo y te lo concedí, así que ahora levantate.— me regañó y bajó a regar besos en todo mi rostro.

Es un maldito meloso.

—TaeYong, aun no me aseo~— me quejé, levantando el rostro para apartarlo, haciendo que sus besos terminen en mi cuello.

— ¿tomaste la pastilla que te dejé en la mañana?— me preguntó, girando el rostro y luego arrugó el entrecejo— no la tomaste.

—¿qué pastilla? Sé que ayer, de calentura no usamos ni preservativos, pero tranquilo, no quedaré embarazado porque soy un chico.— bromeé.

—idiota, toma los calmantes para el dolor, porque sé que ni bien te levantas después de una noche..."así ", oigo tus lloriqueos todo el día.— dijo, pasándome el vaso con la pastilla.

—cierto, lo que odio de nuestras noches de reencuentro, son... La mañana siguiente...— dije incorporándome para tomar la pastilla, hasta que una punzada en mi espalda baja y más al sur, me hizo arrugar el rostro y volver a recostarme— TaeYong hijo de puta, te cortaré la polla para que dejes de seducirme...— solté lo primero que de me vino a la mente.

Él muy bastardo rió a carcajadas.

—ya~ no seas exagerado y toma la pastilla, yo te ayudo a alistarte, así bajamos a desayunar.— dijo riendo.

Me volví a incorporar y está vez si pude hacerlo.— ¿cómo que exagerado? la próxima vez deja que yo te rompa el culo, desgraciado.— me quejé, para después tomar la pastilla.— dame otra.

—ni en tus más su húmedos sueños, nene, si quieres ser activo, pues te buscas a otro.— bromeó, mientras me daba otra pastilla.

—ya rugiste.— dije y él solo me dio un golpe en la cabeza. Hice un puchero y extendí mis brazos— llevame al baño, ¿si?— hablé tierno y el solo rió y me sujetó como a una princesa para llevarme al baño.

Luego de haber hecho una guerra de pasta dental al lavarme los dientes, de haber tomado un baño, arrastrando a TaeYong en el proceso, aprovechando para compartir unos besos algo subido de tono y con el dolor un poco más calmado, pero tan solo un poco, nos dirigimos al la cocina a desayunar.

—bueno, tú espera aquí, ¿qué quieres para desayunar?— me preguntó TaeYong, una vez que me dejo sentado en la mesada de la cocina.

—tu boca.— hablé coqueto, estirando mis brazos.

—¿no tuviste suficiente en la ducha?— preguntó con esa sonrisa tan encantadora, a la vez que rodeaba mi cintura con sus brazos, para después dejar un beso en la comisura de mis labios.

—jamás tendré suficiente de ti.— dije rodeando su cuello con mis brazos, para comenzar a dejar numeroso y cortos besos sobre sus labios.

Él enternecido, me mostró esa sonrisa, que tanto me enamoró y yo....

Simplemente solté un gritito como toda una fangirl y lo abracé efusivamente, a la vez que lo rodeaba también con mis piernas y respiraba su perfume tan tranquilizante— ¿qué hice para merecer al ser humano más perfecto en la tierra?— dramaticé, dejando sonoros besos en su cuello.

—tonto, tú eres perfecto, no lo olvides.— dijo para después dejar un beso en mi nariz, luego en mi mejilla, después en mi frente y finalmente en mis labios, lo sostuve de la nuca para evitar lejanía y comencé un beso calmado y muy tierno, entre suaves risitas y sonrisas cómplices con pequeños chasquidos que se escapaban.