Parte 30 - Oficina 6

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Tomo el elevador al piso de arriba, hay varias oficinas, al parecer más grandes y privadas que los escritorios de nuestro piso, que envidia, parece bastante tranquilo, ideal para concentrarse. Además no hay que olvidar que tener al jefe a un piso de distancia aporta un plus de salud mental a todo esto.

Busco la oficina 6 como me indicó Gabriel y la encuentro en el pasillo a mi derecha, la puerta está levemente abierta pero de todas maneras golpeo y espero a que alguien me diga que pase pero no obtengo respuesta. Vuelvo a golpear una vez más pero sigue sin responder nadie, será que tienen otro horario de descanso? No lo sé, pero antes de irme voy a asegurarme, abro la puerta y entro pidiendo permiso.

Me quedo clavada al suelo cuando veo a Colin detrás del escritorio, tiene puestos unos auriculares, al parecer a todo volumen porque puedo oír el murmullo de la música desde donde estoy, se encuentra hipnotizado por el ordenador, tecleando rápidamente en él. Está deslumbrante, se ve relajado, sexy como siempre, su boca se mueve por momentos cantando por lo bajo. Aún no ha notado mi presencia y no puedo moverme sin hacer un gran esfuerzo, intento volver sobre mis pasos para revisar si estoy en la oficina correcta. Miro indignada el número 6 y llevo una mano a mi rostro, no puedo creerlo. Suspiro y me pongo firme, vuelvo a voltear con la intención de acercarme al escritorio para llamar su atención pero Colin se adelanta, está mirándome desde su silla y se quita los auriculares rápidamente. Esto es surrealista, voy a escribir un libro llamado "1000 situaciones incomodas by Lucy" estoy segura que tengo material para rato.

-Lucy?- arruga su frente, al parecer no entiende que hago aquí, genial!

-Hola, mmmm, esta es tu oficina?- esta vez alza una ceja y su boca forma una media sonrisa socarrona, sé que mi pregunta es estúpida pero no se me ocurre otra cosa que decir, asiente y agradezco que no haga ningún comentario sarcástico.

-Bien...bueno...al parecer tenemos que trabajar juntos en un proyecto...imagino que Gabriel te ha informado que vendría...- intento sonar relajada y creo que logro algo bastante cercano a eso, aunque mis manos sudan y tengo que guardar un breve silencio con cada frase que digo para no enredarme en mis palabras.

-Dijo que alguien vendría pero no dijo quién.- genial, mi jefe no pudo tener mejor puntería verdad? Cuántas eran las probabilidades de que esto pasara?

-Ajam, bueno- dejo el expediente en su escritorio y me alejo unos pasos- hice una copia- una idea rápida brilla en mi mente para que esto sea más sencillo- puedes anotarme tu email? Comenzaré a trabajar en esto y te enviaré la información para que puedas hacer tu parte...- estoy orgullosa de mi, de esta forma no tendré que someterme a más situaciones tortuosamente incómodas como esta. Colin me mira atento en silencio.

-Te enviaré un correo para que lo tengas.

-Bien, dónde puedo anotártelo?

-Ya lo tengo, no hace falta- esta vez soy yo la que arruga la frente confundida.

-Cómo? Yo no...-me interrumpe antes de que pueda seguir y veo en sus labios de nuevo esa media sonrisa de satisfacción.

-Es mi trabajo, tengo los correos de todo el que trabaje en esta empresa- hago una mueca, ya tenía que salir su gran ego. No voy a entrar en esto, es hora de irme.

-Bueno, te enviaré lo necesario- doy media vuelta y camino hacia la puerta, cierro detrás de mi sin voltear a verlo para eludir el peligro, demasiado sexy para mi salud mental. Voy a paso rápido al elevador y por suerte éste llega en un momento, subo y marco mi piso. Una vez que las puertas se cierran suspiro ruidosamente liberando el estrés que siento. Bien, esta vez no hay muchas opciones, tendré que trabajar junto a él y lo mejor es hacer de cuenta que el sábado no ha pasado absolutamente nada, somos adultos profesionales, deberíamos poder con esto.

Vuelvo a la seguridad de mi escritorio y me dedico a comenzar con el trabajo, las horas pasan rápido cuando uno se mantiene ocupado, y cuando me doy cuenta solo queda algo más de una hora para mi horario de salida. Colin me ha enviado un breve email hace rato pero aún no tengo mucho que enviarle, estoy algo estancada. Sigo concentrada en el proyecto cuando escucho una tos fuerte a mi lado, claramente exagerada para llamar mi atención, giro la cabeza para ver de quién se trata y me encuentro a Gabriel de brazos cruzados mirándome seriamente. Lo miro sin entender muy bien a qué viene su cara de enfado.

-Se puede saber por qué sigues aquí?, creí haberte dejado claro el trabajo.- Uf, que miedo me da este hombre enojado, por experiencia sé que lo mejor es no llegar a ese punto.

-Sí, está claro, fui a dejar una copia del expediente en la oficina de....del sr. Spencer y estamos comunicándonos por email. Le enviaré la primer parte en un momento para que pueda empezar...- intento sonar tranquila y dócil, a ver si con esto esquivo una bala.

-Eso no es lo que debes hacer, es una decisión poco práctica para este proyecto en particular y no voy a perder un gran cliente porque ustedes elijan un método de trabajo incoherente.- me quedo muda mirándolo, ahí se va mi pequeño plan a la basura...mierda! Mira su reloj y sigue -este día ya está prácticamente perdido... Mañana no quiero verte en este escritorio, la oficina de arriba está perfectamente equipada para que trabajen en conjunto y puedan hacer esto más rápido. Pasaré a ver los progresos y espero que cumplan el plazo.

Se va sin dejarme meter bocado. Apoyo los codos en la mesa y hundo mi cabeza en mis manos, genial...ahora puedo sumar un jefe cabreado a la ecuación. Tengo que aprender que más cosas siempre pueden ir peor...al menos tengo hasta mañana para prepararme mentalmente...

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A Lucy le espera un día intenso mañana!

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El siguiente lo subiré mañana o el sábado

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Colin, será amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora