Cogemos el coche, eso significa que donde sea que quiera llevarme Elías no está muy cerca de la escuela de música. No tengo ni idea de dónde vamos pero tampoco pienso en ello. Miro el paisaje por la ventanilla mientras analizo sus palabras.
Durante muchos años he seguido sus consejos y estoy aquí, sé que estoy creciendo como persona y por qué no decirlo, también en el mundo de la música. Siempre ha querido lo mejor para mí, y así sigue siendo...
— Hemos llegado — Dice, aparcando y pillándome por sorpresa. El edificio ante el que nos encontramos es enorme. Cuadrado y alto, con ventanas por toda la fachada frontal que forman una especie de espejo gigante que va reflejándonos mientras nos acercamos — Si después de esto sigues dudando y decides no hacer ningún disco, continuarás con tus estudios sin más, lo demás ya llegará.
Asiento. Estoy nerviosa y eso que exactamente no sé qué es este sitio, simplemente tengo una pequeña sospecha, la que se disipa cuando entramos y Elías se dirige a recepción y pregunta acerca de la compañía que me ha ofrecido hacer el disco.
— ¿Podemos venir aquí sin más? — Le pregunto, bajando la voz.
— Sí si son ellos los que solicitan tu asistencia — Me sonríe, haciendo que me tiemblen las piernas, y no sé si por la situación o porque me sigue provocando todo tipo de cosas su presencia.
Esperamos unos cinco minutos hasta que nos confirman que podemos entrar y nos dirigen a la puerta que se encuentra a nuestra derecha.
Es un despacho gigante y tras un escritorio enorme, de madera marrón oscura, se encuentra un señor sonriente.
— Bienvenidos — Saluda amablemente, levantándose y estrechando primero la mano de Elías, luego me mira a mí — Imagino que tú eres Julieta, ¿no? Yo soy Miguel.
— Si — Le digo con hilo de voz, estrechando la mano que ahora me ofrece a mí. — Encantada.
— Estaba esperándote, sentaos, por favor. — Eso hacemos, él en su sillón y nosotros justo enfrente. — ¿Habéis decidido algo?
— Pronto Julieta decidirá qué quiere hacer, pero hoy hemos venido por otro motivo — Miro a Elías, no sé qué pretende.
— Adelante entonces — Miguel asiente, entrelazando las manos y escuchando a Elías con atención.
Me da buena sensación, es un hombre normal y corriente, como casi todas las personas que se me han cruzado en mi vida. No parece esconder ni pretender nada más, como en el caso de Juan, que sigo convencida en que tiene un lado oscuro.
Elías le explica la situación, que todo ha ido algo rápido y todavía no soy capaz de creerme todo esto, y él simplemente asiente, como si estuviera comprendiéndonos.
— Voy a serte sincero, Julieta — Me mira directamente a los ojos — Te seguimos desde el primer año que participaste en el campeonato de coros. No creas que mandamos cartas y proponemos contratos con cualquiera, nada que ver. Hay mucha gente trabajando aquí, gente que se fija hasta en el más mínimo detalle, en algo que destaque, que sea diferente y llame la atención. Y eso es lo que vimos en ti.
Observo de reojo a Elías, que sonríe con orgullo. Son palabras que había escuchado antes, y nada más y nada menos que suyas.
— Y el gran punto de inflexión fue hace seis meses, en esa final tan esperada. Estábamos ahí, entre el público. Vimos cómo tu coro ganaba el campeonato, pero sobretodo te vimos a ti, Julieta.
— ¿Qué quiere decir? — Pregunto.
Recuerdo la final como si fuera ayer. Y esa noche es algo que no se me va a olvidar nunca. Nos lo jugábamos todo. Habíamos sido subcampeones en el primer año y este solo podíamos ganar, sabíamos que podíamos hacerlo. Tuve muchas dudas acerca de la canción que interpretaría, pero un día llegó una nota para mí, a pesar de que Elías no estaba conmigo, era él quien me daba la clave, la canción perfecta.
— Esa canción, Julieta... — Miguel mira al techo y cierra los ojos — Tu sola, cantando y haciendo el escenario tuyo, ahí supimos que eras la chica indicada.
No sé qué responder, porque no tengo palabras. Miro a Elías, que me devuelve la miraba con esa sonrisa permanente.
— Acompañadme a un sitio — Se levanta y nos conduce a la puerta de salida. Después por un largo pasillo por el que nos cruzamos con mucha gente, pasamos por una puerta tras otra, he acabado perdiéndome. Menos mal que por fin parece que hemos llegado — Este es el estudio de grabación, con una mano señala la sala donde nos encontramos.
Entramos los tres, Miguel cierra la puerta. Dentro solo hay una persona. Un hombre con unos cascos que ahora se quita para recibirnos.
— Buenas tardes, Carlos, esta es Julieta — Presenta enseguida, el hombre nos saluda con la cabeza — ¿Podrías hacerle una pequeña prueba de sonido? — El otro asiente.
A ver, a ver... no estoy entendiendo nada pero el estómago comienza a hacerme movimientos extraños, tengo que sujetarme con ambas manos para intentar tranquilizarme y volver a la realidad. Una prueba de sonido, sí, he escuchado bien. No sé lo que es, pero seguro que algo importante.
— Vamos Julieta, por aquí — El tal Carlos abre la puerta de lo que se supone que es el estudio — Ponte frente al micrófono y colócate los cascos, nosotros estaremos fuera.
Asiento sin saber qué otra cosa puedo hacer. Hago movimientos mecánicos, como por intuición. Estoy en una pequeña sala insonorizada y a través del cristal miro a Elías. Veo que le dice algo a Miguel, después se acerca.
— Yo tampoco sabía nada — Me susurra, aunque su sonrisa me tranquiliza — ¿Te ves preparada para hacer esto? Solo tienes que decirme que no y nos iremos, ¿de acuerdo?
— Estoy bien, solo nerviosa — Digo soltando una bocanada de aire.
— Eres la mejor — Coge mi mano para dejar un beso en ella — Hazlo como siempre lo has hecho, como si estuviéramos tú y yo ensayando.
Vale, ahora sí todo parece calmarse dentro de mí. Es lo que necesitaba, que él me animara, que me de fuerzas como siempre consigue hacer.
Me toca a mí, tal y como me ha informado Carlos, cantaré Uncover, la canción que hizo posible nuestro triunfo en el campeonato.
Comienza fuerte así que tomo aire y sin más... empiezo a cantar.
ESTÁS LEYENDO
Sigue brillando, Julieta. (Segunda parte #ESDJ)
RomanceSegunda parte El sueño de Julieta. En su último año en el orfanato, Julieta prepara todo para entrar en la escuela de música más importante del país, donde confía en triunfar y llegar a ser en un futuro una gran cantante. Pero no todo es eso, en su...