Doce

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Trabajar y estudiar en pleno verano era lo que más odiaba Ink.

Aunque gracias a que el sol estaba presente en todos los días sin falta, él no debía preocuparse si llovía o algo.

Porque ante muchas cosas, lo que más odiaba era la lluvia.

Sentir las gotas de agua caer precipitadamente sobre su cuerpo lo irritaba además del cielo tan grisáceo y aburrido que aparecía.

Dejó todos esos pensamientos y se concentró en lo que decía su madre.

Un nuevo año empezaba y otros trabajos aparecían.

Todo como siempre.

Pero ahora hay algo diferente pues hace unos meses conoció a Error y con este a muchas personas más.

Quién sabe que vaya a pasar este año.

Solo queda esperar y ver mientras transcurra los días.

Sin embargo, eso parece que va a tardar mucho.

Y él no podía simplemente estar esperando.

Así tomó la iniciativa y decidió que mañana iría visitar a los hermanos Crayon.

Seguro que a Geno no le importa, Fresh estará feliz de verlo y Error... Bueno, todavía está tratando que no siga viéndolo feo.

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Y ahí estaba, en frente de esa puerta la cual había quedado mirando por minutos.

Ya hace rato su chófer lo dejó en esa casa y él todavía no se dignaba en tocar.

Pero no podía echarse para atrás, tantas excusas le puso a su mamá para poder venir.

De tanto darle vueltas al asunto, la puerta fue abierta.

—¿Qué haces parado frente a mi casa como por treinta minutos? —Pregunto irritado Error, que ha estado viendo al contrario desde su ventana.

—Oh, esto, ya sabes, quería... —El azabache entró a su casa sin escuchar lo que decía— Visitar...

—Si buscas a Fresh, él no está —Dijo apuntó de cerrar la puerta.

—Bueno, no importa —Impidió la acción del azabache— Solo venía a visitar a quién sea ¿Puedo entrar?

—Haz lo que quieras —Se hizo a un lado para el menor ingresará.

—Genial, nunca me habían dejado hacer algo con mucha libertad —Entró de una vez, llegando a la sala y notó el profundo silencio del lugar— ¿Estás solo?

—Sí, puedes irte cuando quieras, me harías un favor.

—No digas eso, creo que llegué en un buen momento —Rió de forma leve— Es triste estar solo.

—Lo será para ti, yo prefiero estar solo —Aclaró y abriendo una barra de chocolate fue a sentarse en el sofá.

—No digas eso —Recargó sus brazos en el sofá— Pareces un amargado.

—¿Y qué? —Se encogió en su lugar pues Ink se estaba acercándose más a él— No vengas a mi casa para reprocharme.

—No estoy haciendo eso —Dejó de moverse pues veía la incomodidad de Error demasiado notable— ¿Ya almorzaste?

—¿Qué crees que estoy haciendo? —Movió la barra de chocolate que tenía en su mano para luego darle un mordisco.

[Una sola respuesta] - ErrorInkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora