Treintaiseis

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La vida es como una montaña rusa.

Al principio no hay algo de qué preocuparse, solo va hacia delante, algunas veces bajas, otras veces subes, todo mantiene una balance.

Sin embargo, una simple hecho cambia ese equilibrio y cuando menos te das cuenta...

Estás subiendo.

En el caso de Ink, estás subiendo tan abruptamente que ni siquiera eres capaz de comprender qué demonios está pasando, no piensas que si esto es malo o bueno, si deberías intentar escapar o solo dejarte llevar, simplemente no hay nada en tu mente.

Por un tiempo sigues y sigues subiendo, hasta que llegas a la cima.

Ahí ves claras las cosas, tienes un segundo para reflexionar, dudas y te sientes perdido.

Te la has pasado genial en todo el camino que has recorrido, pero ya tienes que elegir qué hacer una vez estás en lo más alto.

Porque sino...

Bajarás sin poder detenerte.

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Hoy era el último día del año.

Error sabía perfectamente que este día en particular iba a ser ajetreado y agotador.

Sus clases empezaban a la una de la tarde, así que tenía tiempo para pasar el rato en su habitación sin hacer nada, simplemente estar echado en la cama y tener la mirada en el celular.

—Hey, bro, ya me voy —El de gorra abrió la puerta de la habitación para despedirse del azabache.

Error no dijo nada, solo se quejó internamente de que el menor no haya cerrado antes de irse, a regañadientes se levantó, aunque cuando estuvo en la entrada de su cuarto se dio cuenta que ya era hora de prepararse.

Mientras se duchaba estuvo pensando muchas cosas, algunas realmente hacían que apareciera un extraño sentimiento en su pecho, no podía explicar mucho eso, pero cada vez era más constante. 

Salió de baño y fue a por su mochila.

Hace unas horas Geno ya se había ido a trabajar y solo hace algunos minutos Fresh se había ido a no sé dónde.

Soltó un suspiró antes de salir de casa.

Cuando llegó a su universidad, caminó en calma hasta llegar a sus clases, no hablaba mucho con casi nadie en verdad, Cross y Nightmare se tomaron un descanso de la universidad para cuidar a esa cosa que llaman Incubux, ayer se enteró que al parecer ya estaba dando sus primeros pasos, recordar eso le daba escalofríos. La cuestión es que la única compañía que tenía ahora era la soledad.

Dos horas luego, sus clases terminaron, por suerte no tenía nada más que hacer en ese lugar, así que salió tan rápido como pudo.

Y una vez estuvo afuera, recibió un mensaje.

Era de Blue, como no había mucho que hacer por ahora, le respondió e iniciaron una conversación, en cierta parte era una alivio no tener a Ink cerca, ya que éste siempre le insistía que dejará eso para otro momento.

"Vamos, se supone que íbamos a la playa"

"Estoy ocupado"

"Error, él entenderá que tenías otras cosas que hacer, en la noche ya le respondes"

Con resignación acataba lo que decía el contrario, pero un día se harto de eso al momento que el de orbes multiformes le quitó su celular.

"Ink, devuélveme eso, no estoy jugando"

[Una sola respuesta] - ErrorInkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora