-Buenos días señor Andrés-Saludo un hombre cuando me desperté.
-¿Quien es usted?-Pregunte somnoliento.
-Ou perdón por mi grosería... ¡mucho gusto soy Eider París tengo 26 años y seré el guardia de su alimentación y medicamentos.. la señora Omayra me dejó a cargo de usted!-Hablo un poco entusiasmado y con una enorme sonrisa.
-Ahora tengo guardia-Bufe y me tiré de nuevo a la cama.
-Se que usted es mi jefe pero me debe obedecer para que se cure rápido-Hablo más tranquilo.
-Ok ok ok, pregunta preguntona.. ¿ya fuiste a París?-Le pregunte burlonamente.
-No entiendo por qué la pregunta-Hablo confundido.
-Por que tu apellido es París, y te quería molestar pero déjalo así-Me levanté y me senté a un lado de la cama con una sonrisa.
-Oh ya veo, ella si me dijo que usted se burlaria de mí-Hablo con una sonrisa, sr acercó y me entregó la bandeja del desayuno.
-¿Te quedaras hay?-Le pregunte y empecé a desayunar sin ánimos.
-Si señor, tengo que verificar que usted se coma todo.. y se tome los medicamentos-Busco la fórmula y me dio unas pastillas y seguí desayunando.
Me explico que él se encargaría sólo de mí, mis comidas, mis medicinas, mis ejercicios y todo para que mi recuperación fuera exelente, ya estuvo en contacto con mi doctor y sabía que hacer y que no debía hacer.
Después de hablar con él me fui a bañar.. tome una ducha fría dijo que eso era muy relajante para mi. Me cambie ahí mismo en el baño por que el estaba afuera esperándome.
-Listo, empecemos-Baje junto a él y me llevo al jardín a hacer yoga.
Cuando me llevo una ensalada de frutas a las 9 de la mañana le dije que mañana empezaría a trabajar y el dijo que también estaría conmigo para estar pendiente de mis medicinas y comidas.
Llegó la hora del almuerzo y sentó en el jardín a comer, el se sentó a mi lado y estuvo pendiente de cada cosa que hacía.. le dije que quería nadar un rato y él me dijo que no había ningún problema.
Terminé de almorzar y subí rápido a mi habitación para cambiarme para nadar... bajé con la bata puesta y me paré en la orilla de la piscina, metí los dedos de mis pies para probar el agua y estaba deliciosa... safe el nudo de mi bata, y me la quite, calló al suelo y me lancé al agua.. me quedé un rato en lo profundo y luego salí limpiando mi rostro de todo rastro de agua.
-¿Que tienes?-Le pregunta a Eider que estaba pálido.
-Na-nada.. debo ir a la cosina por agua-Salio casi corriendo y yo me reía por como caminaba.
Seguí nadando y me sentí relajado.. tiempo después llegó Eider con una bandeja, me dio unas pastillas y me las tomé, me comí un sandwich con jugo y seguí nadando... me sentía un pez, un pequeño y fuerte pez.
-¡Señor ya debe salir de la piscina!-Escuche el grito de Eider.. asome mi cabeza y le sonreí.
-Otro ratito-Le hice un puchero y el sonrió.
-15 minutos y empiezan a correr de ya-Me dijo y metí otra vez mi cabeza al agua y seguí nadando libre.
Nade de lado a lado muy contento.. ya me sentía muy bien para mañana ir a trabajar con todas las energías puestas.
-¡Se acabo el tiempo!-Grito otra vez y saque no cabeza, limpié el agua de mi cara y le sonreí.. me dispuse a salir y el ya tenía mi bata en sus manos, me voltee y me la puso, al principio me puse muy nervioso de que él me viera así pero traté de quitarme todos esos pensamientos.
-Gracias.. vamos a cenar-Le dije amarrando mi bata.. caminamos dentro de la casa pero antes de llegar al comedor me dió un mareo y casi me caigo pero el me agarró.
-Estuvo mucho tiempo en la piscina.. vamos a su habitación-Me apoye en él y subimos a mi habitación.
Algo tenía que imaginarme para que no sospecharan de mi embarazo... subimos y me acostó, dijo que subiría mi comida. Cuando llegó con la comida también me dió pastillas.. me las tomé y el se sentó en los pies de la cama a verme comer.
Extrañaba a mi osito, por más cosas feas que el hiciera no podría matar el amor que siento por él.. Eider se retiró de mi cuarto y se llevó todo con él, dijo que mañana me despertaría temprano para que desayunara bien y que mañana estaría conmigo en todo momento, asentí con una sonrisa y el se fue.
Será difícil acostumbrarme a vivir sin mí osito.. lo veré todos los días pero no será igual por que él no me verá con amor sino con desprecio por tener un bebé dentro de mí.. pero pronto me desare de él y todo mejorará para ambos...........