¡Por fin!.. ya salí de esa entrevista.. estaba que salía de ahí, quería vomitar, las náuseas del embarazo no me dejan.
-¿Nos vamos?–Pregunto Oma.
-Espera que recobre fuerzas–Le dije lavandome la boca.
-Ok–Dijo ella y sonrió.
-¿Por qué sonríes?–La mire y levanté una ceja.
-Te estoy imaginando con tu panzota–Dijo ella riendo, le di un golpe en el brazo y nos fuimos a casa.
El camino fui muy silencioso.. no hubo preguntas, ni regaños, ni chistes tontos por parte de Oma y me satisfacía por que la verdad no estaba de humor para eso..
Llegamos un poquito antes de las 9 a la casa, todos aún seguían despiertos a excepción de mi tesoro José..
-Hola familia–Salude con una sonrisa.
-Hola ¿como les fue?–Dijo mi tía.
-Bien–Le dije con una sonrisa.
-¿Bien bien o bien regular?–Pregunto Diego y me aferre al cuerpo de mi osito.
-Bien, todo fue aclarado.. tratamos de dejar claro que Estiven no tenía que ser el centro de chismes ni insultos de nadie.. que por favor lo dejaran a él y a su pequeño ajenos a malos comentarios–Hablo Oma y le dio un rápido besó a Danny.
-Oh que bien, estábamos viendo la entrevista pero mi tía apago el TV por los nervios–Hablo Iván con una sonrisa.
-No eran nerviosos.. era ansiedad, eso es muy diferente–Recalcó mi tía.
-Bueno ya llegaste así que está belleza se va a dormir–Alejo se levanto, me dio un beso en la cabeza y se fue. -¡Hasta mañana familia!–Grito y subió las escaleras.
-Era el más preocupado por tí–Murmuro mi osito y sonrei, mi primo y yo nos queríamos mucho.
-Nosotros nos vamos–Dijo Oma y se levantó del sofá.
-Quedate por fis–Suplique y le puse cara de cachorro, ella sonrió y miro a Danny, él sonrió y alzó los hombros como sin importancia.
-No se.. ruegame otro poquito–Me dijo burlona.
-Estúpida que te quedes o te amarro?–Le dije con una sonrisa y ella sonrió igual.
-¿Te han dicho que tienes una manera muy peculiar de rogar?–Dijo y se sentó otra vez.
-No, pero gracias.. no suelo ser tan común–Le dije y sonreímos cómplices. Nos olvidamos de los demás y nuestras miradas se hicieron una, reflejando todo el cariño que sentíamos.
-Creo que deberíamos darles una habitación–Mi osito me hizo desviar la mirada.
-Oh si claro–Le dije con una sonrisa y ligeramente acaricie su mejilla. -No es por incomodarlos pero ¿Diego puedes dormir con Iván?–Les dije con una sonrisa...
-Oh no no no.. no quiero incomodar a nadie, si no hay espacio no te preocupes nos vamos–Hablo Oma apenada.
-No tengo problema, además nosotros compartimos la habitación en nuestra casa...
-Si, no me sentiré tan solo en esa enorme habitación–Dijo Ivan y chocó el puño con Diego feliz.
-Tia ¿por que no subes a descansar?.. hoy fue un largo dia–Ella asintió y se fue con mis primos, Oma y Danny.
-Tu también debes descansar–Mi osito acaricio mi espalda y me sentí tan relajado.
-Lo sé.. ¿y José?.
-Se canso de tanto jugar y calló exhausto–Lo mire y tenía una de esas sonrisas que me hacen dudar de mi realidad.
-Eso es tan típico de él.
Nos levantamos y tomados de las manos fuimos hacías las escaleras, hiba a subir mi primer es escalón cuando voltee hacia la cosina y vía Eider...
-Osito sube.. ahorita voy–Le sonreí y solte su mano.
Camine hacia la cosina y me paré en la puerta...
-¿Que paso?–El levantó la cabeza sorprendido y sonrió débilmente.
-Llegaste..–Susurro y busco un baso.
-Cuentame, ¿por que estás triste?–El silencio era hostigante.. la verdad odio el silencio. Me regaló un baso con agua y la recibí.
-Mis padres llegaron hoy..
-¿Y?–Pregunte ansioso y curioso.
-Pues mi hermana me llamó y me los quiso pasar... pude escuchar cuando mi padre dijo “yo no tengo un hijo”–Dijo Eider y explotó en llanto.
Lo abracé y deje que depositará su cabeza en mi hombro y llorara.. que horrible debería ser eso..
-¿Y tu madre que dijó?–Le pregunté dándole palmaditas en su espalda.
Se levantó se limpió la cara y aún con la mirada en el suelo me habló...
-Nada.. mamá no hablo... luego hablo mi hermana y me dijo que ellos habían venido por unas semanas y colgó por que ellos la llamaron–El puso las manos en su cara y lloro.
¿Has sentido que eres vigilado?, bueno yo si... así que voltee y mi osito chismosin estaba parado en la puerta oyendo y viendo todo. Lo jale del brazo y ví que estaba incómodo pero por chismoso le pasaba.
-Oye Eider.. mírame–Le hablé con dulzura, el levantó el rostro y al ver a Estiven se limpió la cara y se hiba a ir.
-No te vayas, ven...–Me asombre por la acción de mi osito, lo jalo del brazo y lo abrazó.
Eider debía entender que aunque sus padres aún no entendían el hecho de si sexualidad el tenía una familia aquí... Y que lo querríamos a pasar de todo, por que eso hacen las familias...........................