Capítulo 23.

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-"Tú chaval, eres tonto".

La semana transcurre entre exámenes, nervios, libros que estudiar, materia que repasar...

Por fin llega el ansiado viernes. Cuando el timbre que indica que hay que marcharse a casa suena, Cris no puede creérselo. Los exámenes se han acabado. Ahora es cuestión de esperar.

Pero, a pesar de que ha tenido que esforzarse mucho para conseguir concentrarse, Cris ha hecho la mayoría de los exámenes bien. Cree que tiene todo aprobado, así que no los nervios por las notas finales no son los sentimientos que ocupan su mente.

En su mente está, como no, Rubius. En toda la semana no han vuelto a hablar. Ni por twitter, ni por WhatsApp... Nada. Su comunicación ha sido totalmente nula. Y es que el día siguiente es la quedada. Y Cris está muy, pero que muy confusa.

Claro que va a ir. No se la va a perder: conocerá a otras criaturitas, se lo pasará en grande con sus dos amigas... Se divertirá, definitivamente. Lo que le preocupa es la situación incómoda que vivirá con el youtuber. ¿Se hablarán y aclararán todo de una vez? No tiene respuesta a eso.

-Poooooor fiiiiiin -suelta Sandra a su lado.

La rubia termina de recoger sus cosas, intenta apartar a Rubius de su mente y se reúne con sus dos mejores amigas.

-Adiós exámenes -sonríe su amiga Sof.

-Sí. Qué bien -Cris intenta que no se le note lo mal que está y sonríe.

-¡Y mañana quedada! ¡A conocer a Rubius! -grita Sandra.

Al oír su apodo, tan solo su apodo, Cris se derrumba. Quiere hablar con él, decirle que lo siente, que no lo volverá a presionar a quedar con ella y que pueden volver a ser amigos. Tan solo le quiere decir eso.

Pero no. No puede. No sabe porqué. Sería muy simple: tan solo lo llama, quedan, hablan y lo solucionan. Pero no. Él no querrá quedar con ella. Han perdido la bonita amistad que tenían. Seguro que la odia. Siente una horrible impotencia...

Cris baja la cabeza, el pelo tapándole la cara. Intenta que no se le note el hecho de que una lágrima se le está deslizando lentamente por la mejilla.

-Eres una jodida bocazas -le insulta Sof a Sandra.

-Cris, lo siento... -susurra Sandra.

La abraza y Cris se limpia rápidamente la lágrima. Sus ojos están cristalinos y el color verde en ellos como que destaca más.

-No, sino pasa nada... Es solo que... -Cris suspira. Tristeza, impotencia y dolor son lo que transmite su mirada- Fue bonito mientras duró... -vuelve a suspirar- Soy una idiota.

-¡Eh, eh, eh! Perdona, pero no -le dice Sandra- Eres la mejor tía del mundo, y nada de andarte torturando por un tío. Vamos, que no lo permito.

-Pero no es un tío cualquiera... Es Rubius... -Cris suspira por tercera vez consecutiva.

-¡Como si es Perico de Los Palotes! ¡Me da igual! -exclama Sandra.

Cris le regala una amarga sonrisa.

-La bocazas esta tiene razón -dice Sof, ganándose un codazo por parte de Sandra- Si no sabe apreciarte, no merece la pena.

-Gracias chicas -sonríe Cris, emocionada.

Las tres se dan un abrazo.

Cris se siente solo un poquito mejor. Y es que no puede evitar estar mal. Es Rubius. Cuantas veces ha soñado con tener lo que tuvo hace unos días. Una simple amistad...

La gamer del Starbucks (Fanfic Rubius) [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora